Escape

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Dedicado a @sofia_914 ❤️🤷🏻‍♀️

— Podrías haberme dicho que no estaba interesada en hombres...— se sigue lamentando el rubio sentado al lado de su amigo.

— Pero es que así no tendría grácia.— se burla de Armin con un sonrisa olvidándose por el momento la situación en la que se encontraban.

—Es que quizás me había emocionado, ¿Entiendes?— dice decepcionado de sí mismo consiguiendo que Eren deje de burlarse de él y ponga una mano en su hombro infundiéndole una disculpa.

Entre esas charlas que comenzaron los dos amigos, fueron capaces de centrarse en ellos, hacia tiempo que no se daban un rato para hablar, o simplemente para estar juntos y soltera cualquier estupidez que les saliese en el momento.

Extrañaban estar juntos. Sin embargo, su soledad compartida se vió interrumpida por el grito de una joven rubia que se acercaba a ellos, algo fatigada, quizás debido a haber venido con prisas hacia aquel lugar.

—¡Eren!— exclamó aquella mujer pequeña llegando a estar cerca de el moreno.

— Historia, ¿Qué haces aquí?— interrogó con mucha sorpresa al ver a la rubia ya muy cerca suyo.

La nombraba respiró profundo para así calmar un poco su respiración. Esos tacones que llevaba resonaron por todo el hospital. Llevaba un vestido gris, se ceñia a su cintura y acababa con vuelo, le llegaba hasta sus rodillas. Su chaqueta era larga, un poco más que su prenda gris pero esta era de color marrón claro. Llevaba el cabello con un medio recogido. Dos pequeñas trenzas se unían en la parte trasera de su cabeza mientras el cabello le caía por los hombros. Eso y unos pequeños mechones rebeldes a cada lado de su rostro.

— Las notícias corren.— contestó ella algo cansada trás haber recorrido con velocidad el pasillo en donde estaba al que buscaba. — Vine a ver cómo te encontrabas y pensé que estarías solo y— se calló al instante al ver la figura de otro hombre cerca de Eren, su rostro se coloró al instante mientras negaba con las manos el error que había cometido.

— No tiene importancia, Historia.— la calma Eren regalándole una sonrisa algo decaída.— Gracias por estar aquí pero sería mejor que te vayas.

— Quiero conocerla.

Los rostro de los chicos fueron una obra de arte cómica al ver la curiosidad de la de cabellos dorados pidiendo la entrada para ver a la chica.

El estado de Eren fue extraño pero se sentía incómodo al ver que la ojiazul quería conocer a Misaki. Supuestamente él y ella tienen una relación a ojos de la mayoría mas Historia querías conocer a la verdadera pareja del moreno, al haber escuchado experiencias tan fascinantes sobre la azabache, todas dadas por Eren, ella despertó una sentimiento curioso por ver en persona a la mujer.

El Jeaguer accedió a dejarla entrar en aquella habitación trás darle vueltas al asunto. Sólo la dejó pasar a ella, Armin se quedó con él detrás de la puerta.

— ¿Crees que está bien?— duda el ojiverde mirando a su amistad quien desde siempre tenía la razón en todo y lo salvaba de muchos problemas.

— Era tu decisión, amigo. Nunca hablamos mucho de lo que tú y la Reiss escondíais. No soy capaz de juzgar bien la situación pero creo que está bien, no hay problema en el que la conozca.— redacta Armin cruzándose de brazos y alzando los hombros algo obvio.— ¿Crees que podría hacerle daño?

— ¡No, claro que no!— contesta alarmado negando con la ayuda de sus brazos.— Es que es extraño, simplemente eso, Armin.

— Creo que es normal.— duda un poco llevando su mano al puente de la nariz para suspirar cansado.— Te dejo con Historia, si tú no estás en el trabajo debo ir yo, Eren. Nos vemos.— se despide del moreno con una sonrisa y tocando su hombro para así poder marcharse con tranquilidad atravesando los pasillos del hospital.

 Voy a enamorarte {Eremika} 2°LibroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora