Capítulo 13 Esa calidez

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La mirada de dos hermanas que se anhelaban desde ya hace tiempo permanecía a flote, ahí, completamente estáticas mirándose sin saber que reacción tomar o ¿acaso estaban tan sorprendidas que no eran capaces de articular movimiento o palabra?

Eri sentía como su corazón latía acelerado mientras su respiración se mantenía ligeramente agitada, incluso ignoraba el fuerte y doloroso golpe sobre su frente sangrante, nada le hacía reaccionar de alguna manera.

-...de verdad..... Eres mi señora Erikchica...- aquellas susurrantes palabras de aquella dulce y tierna voz, eso había sido lo que la hizo reaccionar sintiendo como sus lágrimas comenzaban a resbalar por sus mejillas.

-Mi pequeña..... Arisa....- fue la respuesta de Eri justo antes de correr en aquella dirección donde la otra joven alada estaba agitada tanto como ella.

Fue así como Eri llego hasta ella y la estrujo entre sus brazos, sintiendo el cálido y pequeño cuerpo de la otra Aliz que correspondía rápidamente al abrazo también.

Nozomi observaba lo que ocurría, le llenaba de gran alegría ver que Eri pudiera ver a alguien importante para ella, de alguna manera la aliviaba en hecho de que fuera Arisa que estuviera ahí y no Eri que fuera quien se marchara para buscarla, pero algo también comenzaba a sentir al ver tan cariñosa acción de Eri con aquella Aliz, acaso..... ¿se sentía celosa de lo que observaba?

-¿Quién demonios es ella?- se escuchó la voz de Maki quejumbrosa que se sacudía sus ropas desarregladas por la anterior agresión de la joven Aliz.

-Es la pequeña niña que te pateo el trasero- dijo Nico susurrante y burlona no sin que Maki la escuchara y la mirara de mala gana.

-No quise lastimarla, eso es muy distinto- replico rápidamente Maki a la pelinegra que no dejaba de mirarla con picardía.

-¿quisieran callarse ustedes dos?- llamo Umi a ambas que rápidamente miraron donde estaba Eri y la joven rubia que se abrazaban.

Eri lentamente se separó de Arisa y miro su rostro que también había derramado lágrimas, solo se limitó a sonreírle de una maternal manera y acariciar su mejilla.

-Arisa, No sabes cuan preocupada estuve por ti todo este tiempo- eran las primeras palabras de Eri hacia la menor que solo sonrió como tan bien lo sabía hacer.

-yo pensé que.... Esos Elemtum te habían asesinado, por eso me dedique a cazarlos desde otras tierras, gracias a eso pude conocer a alguien que me mostro como llegar hasta aquí- agregaba Arisa lo cual desconcertó un poco a Eri.

-¿Quién te dijo que estaba aquí? ¿Quién te mostro cómo llegar?- pregunto la Eri a lo que su hermana solo respondió con semblante más tranquilo y pacífico.

-una hibrida Aliz me lo dijo, ella menciono que estabas aquí junto a algunas razas más, realmente me alegro de haberlas encontrado- agregaba Arisa.

-¿una hibrida Aliz? ¿Cómo era ella?- se acercó rápidamente a las rubias Kotori con una mirada esperanzada puesta sobre la más pequeña.

-bueno..... Ella tenía el cabello gris y ojos ámbar.... Era... como tu....- dijo Arisa observando detenidamente a Kotori que comenzó a denotar una gran sonrisa en su rostro.

-entonces..... ¡Ella de verdad esta con vida! ¡Mi madre sigue con vida!- exclamaba Kotori completamente alegre mientras miraba a sus amigas con una esperanzada expresión.

Enemy MineDonde viven las historias. Descúbrelo ahora