Capítulo 9: Rumbo a la aventura

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—¿Qué opinas? —preguntó Mark tras mostrarle la grabación a su colega, el rago parecía estar confundido por las imágenes que había contemplado hace poco, y finalmente habló:

—Mark, me atrevería a decir que algo está causando que los túneles de luz fallen. Algo con una gran cantidad de energía que está afectando el flujo de las naves, pero requeriría una cantidad ridículamente grande... Además, no le veo lógica emplear algo así, no encuentro algún propósito que motive a alguien a hacerlo.

—Aviso —se repitió por los parlantes de aquella estación de Provie—. Las naves Magenta 45A y Beige B3 se encuentran desaparecidas, se registró su ingreso al espacio Nerok y han pasado 3 parts sin saber su paradero o estado.

—¿Y si les pasó algo peor que a la Fugaz Escarlata? —habló Peroti con preocupación, las naves no pueden estar tanto tiempo en el espacio Nerok, ninguna nave tiene tanta energía y resistencia—. Cemitono ya me mostró la grabación, y es completamente un sin sentido, le busqué lógica y nada... Tal vez a esa gente les pasó algo aún más raro.

—Es posible...

—Prefiero pensar que desertaron y se robaron una nave, si, debieron robarla, no hay nada en el espacio Nerok que ataque naves —continuaba el rago agitando sus colas demostrando su estrés, y tomando el dispositivo que tenía una de las grabaciones copia de la caja fuerte, se levantó y caminó hasta la puerta.

—Peroti, ¿qué haces?

—Voy a llevar esa cosa ante uno de nuestros jefes, para que se pongan a hacer algo de una maldita vez, ven conmigo a dejar ese informe tuyo. Eso puede ser muy grave.

—¿Crees que nos escucharán?

—Si es necesario déjame leer lo tuyo, y complementarlo. Haré que suene tan, pero tan pesado que no podrán dejarlo a un lado. Porque no estudié por años para que algo se contradiga de tal forma. El espacio Nerok es vacío sin contar a las naves, ¡eso es una ley universal!

Mark no estaba acostumbrado a esa reacción por parte del rago y le siguió. Se sentaron en la cafetería y escuchó el cómo escribía de forma compulsiva, mencionaba sus errores y corregía. El que se comportara así le empezaba a preocupar, después de todo Peroti era un experto. Una vez terminó de pulir los detalles dejó su vaso sobre la mesa y se puso en pie. Este hablaba durante el recorrido sobre lo extraño que era y se preguntaba el por qué nadie hacía algo al respecto. Eso hasta que finalmente dio con su jefe, el rago dejó de hablar y le dio un leve empujón a Mark como forma de dejar todo eso en sus manos. El jefe de ese equipo era un Frefu, era con el que tenían mayor relación.

—Oh, Yenter, ¿ya te consideras en condiciones de laborar? —habló ese superior.

—Señor Viina, sí, me considero en condiciones y solicito que se abra una investigación, de forma independiente hemos recopilado información que el técnico Peroti considera relevante

—Señor Viina, sí, me considero en condiciones y solicito que se abra una investigación, de forma independiente hemos recopilado información que el técnico Peroti considera relevante. Es una mezcla de sucesos del que se estima que pueden tener un origen común —dijo Mark intentando ocultar su nerviosismo por lo descabellado que debía sonar—. En mi poder está una muestra de lo que es tejido cerebral de un Blopgot, pero posee anormalidades en su estructura e incluso movimientos como si algo le hubiera estado consumiendo, y eso no es lo más interesante, la muestra fue tomada en el exterior de la Fugaz Escarlata durante el incidente en el espacio Nerok. Además del accidente de hace unos parts... Tenemos la caja negra.

—Yenter, Peroti... Su resumen es tan extraño como lo que ha ocurrido últimamente, así que consideraré lo que digan, pero no esperen mucho, no podemos desperdiciar recursos de nuestra sección si no existe un motivo realmente fuerte —dijo de forma seca el director de sección Viina recibiendo esas cosas y mirando la primera página.

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