ɪɴꜰɪᴇʟ (ᴡᴀɴɢxɪᴀɴ)

Capítulo 3

Wei WuXian

Eventualmente soy un descarado, pero no soy de la clase de personas que se mete con alguien a los cinco minutos de conocerlo.

Pero creó que existe una fuerza magnética demasiado potente cuando me acercó a Lan WangJi, realmente no es el tipo de persona con quien saldría, todo serio, con una mirada profunda que a simple vista no te dice nada, pero cuando lo vi por primera vez, pude notar lo vacía que su vida se encontraba, la urgencia y necesidad de sentir, era algo que de verdad quería seguir explorando.

Por eso lo invite al Pub, por eso le di un poco de esa bebida, quería otorgarle el valor necesario para que un día de su vida hiciese cosas indebidas, pero conmigo.

Sin embargó, no creí que solo un vaso de Sonrisa del Emperador fuese suficiente.

Porque era mucho calor el que sentía al bailar con él, al intentar estar todo el tiempo posible restregándome en su cuerpo, y no es que el bailará, ni se movía, solo tenía sus manos en mi cintura.

—¿Te diviertes Lan Zhan? —susurré en su oído — o ¿quieres ir a un lugar más intimó?

De pronto su agarre se hizo más fuerte.

—Donde Wei Ying quiera.

Fue cuando conecte con sus ojos dorados, anhelantes de algo, y tan bellos.

No pude resistirme, porque al juntar sus labios con los míos, tuve la necesidad de entregarme a él, querer explorar el bello cuerpo que se escondía en un traje elegantemente blanco.

Y que él me respondiera el beso con pasión y entrega, hacia que mis piernas temblaran.

—Vamos al hotel — dije al separarme de él.

—¿A tú cuarto? — pregunto como si fuese un niño pequeño apunto de hacer travesuras.

—Obvio que a mi habitación — y nos fuimos.

-n-

Las prisas, las prisas no son buenas, ambos lo entendimos cuando Lan Zhan me cargo, y rompimos algunos floreros.

Pero ya no podía separarme de su boca, era tan adictivo.

—Cama ... Lan Zhan — bese su mejilla.

Y el solo asintió, mientras yo intentaba sacar su camisa del pantalón, necesitaba acariciarle debajo de ella, y joder que ya podía sentir a su pequeño Lan Zhan sobre el pantalón.

—Wei Ying — y no pude evitar marcar esa piel lechosa, tenía que morderle.

De repente las manos de Lan Zhan bajaron a mi trasero, estrujándolo sin ningún miramiento, sus manos rompieron mi camisa y con rapidez bajaron mi pantalón, quede desnudo y expuesto, ya que mi boxer se había ido con mis pantalones.

Esa mirada, hacía que mi cuerpo se sintiese caliente y deseoso.

—¿Te gusta lo que ves Lan Zhan? — tomé su mano y la puse en mi pecho, y para mi deleite, lentamente la fui bajando hasta llegar a mi zona más íntima.

—Me encanta Wei Ying — y sin pudor alguno comenzó a tocarme.

—Mierda — se sentía tan bien, Lan Zhan me masturbaba con ritmo, cuando sentía llegar al orgasmo se detenía, y me besaba para acallar mis quejas.

Los besos humedos en mi cuerpo se hicieron presentes, sabía que estaba marcándome, pero besaba en lugares que de verdad no creía que pudiese sentir.

Sentir su caliente respiración encima de mi miembro hacía que me sonrojase. Y la primera lamida fue mi perdición. Era tan bueno que asustaba, quería preguntar ¿Cuánta experiencia tenía? Pero ¿Sería propicio hacerlo cuando estoy apunto de un orgasmo?