DEPARTAMENTO 35 A/B

Capítulo 7

Un montón de emociones cruzan por los ojos de su hermano que, por primera vez, Lan Xichen no esta del todo seguro que es lo que su hermano está pensando.

Y tampoco tiene la más remota idea de porque el receptor de todas estas emociones es el joven que tiene enfrente, quien pasaba su mirada de uno a otro.

—Sí que son bastante parecidos, casi podrían parecer gemelos, pero Lan Zhan no sonríe y no puedo imaginarme a Lan Xichen no haciéndolo. Qué casualidad, ¿no lo crees, Jiang Cheng?

No sé qué tenga mierda estés balbuceando. — Hosco, como solo podía tratar a Wei Wuxian, cuando ya estaba molesto con él, se cruzó de brazos recargado en la pared. No quitó la vista del extraño.

—¡Es Lan Zhan! Te lo dije hace rato cuando fuiste por tu zoológico. El maestro que me delató con el coordinador y tiro mi preciosa Sonrisa del Emperador— dijo lo último cruzándose de brazos en señal de enfado, sin embargo, pronto los relajó y se acercó a Lan WangJi.

—Aunque podría no seguir molesto si reemplazas la botella que tiraste.

Lan WangJi no le respondió. Xichen notó la intensa mirada reprobatoria que su hermano dirigía a Wei Wuxian y temió que sea lo que sea que WangJi hubiera tirado, hubiera sido muy preciado para el otro.

¿Que razón pudo haber tenido?

—WangJi, ¿que ocurrió?

Preguntó tratando de entender la situación, pero al mismo tiempo, intentar que no sonara como un regaño. Todos aquí eran adultos en sus veintes y él era el mayor.

—... Rompió las reglas, no se puede tomar en la institución.

Oh.

Oh.

Lan Xichen ya veía por dónde iba el asunto y casi podía imaginarlo, su hermano era una persona muy estricta y apegada a las normas. No admitía ni perdonaba las faltas que consideraba importantes. Wei Wuxian realmente se había ganado el desprecio de su hermano si lo encontró tomando en la escuela.

Un momento. ¿Eran colegas?

Jiang Cheng, quien se había mantenido al margen de la situación, hizo presencia proporcionando un golpe en la nuca a Wei Wuxian.

"Un poco ortodoxo". Pensó Lan Xichen.

—¡Ay, Jiang Cheng! Me golpeas todavía que te traje el estúpido juguete de tu malvada gata. Realmente eres un desagradecido.

—¡Callate! ¿Realmente bebiste en tu trabajo? ¿No te da vergüenza? Oh, claro que no. Eres el descaro personificado. Imbécil, más vale que no pierdas tu puesto. Yo no te mantendré si lo haces.

—¡No paso nada! ¿Porque todos me critican? Apenas si le di un sorbo y ya piensan que me emborraché y baile en medio del campus o firmé las paredes. Soy una persona decente.

Otro golpe seguido de un quejido resonó en la sala vacía.

—¿Entonces qué ocurrió? Dime la verdad y será mejor que no mientas.

—No soy Jin Ling para que me amenaces...— Jiang Cheng ya se preparaba para darle otro golpe, pero Wei Wuxian enseguida salió de su camino, acercándose a Lan WangJi.

—Era un regalo de parte del padre de un alumno al que ayudaba con algunas materias. Es un chico listo, pero necesitaba enfocarse. Sobre todo, porque tenía problemas con matemáticas, no le preguntaba al profesor ya que el hombre le daba miedo...

Explicaba todo aquello sin dejar de ver a Lan WangJi, Lan Xichen ya tenía un mejor panorama y tomo nota mental de sugerirle a su hermano que no fuera tan estricto.