DEPARTAMENTO 35 A/B

Capítulo 14

Después de que milagrosamente –y por milagro se refería a Lan Xichen hablando media hora con la compañía de gas— lograran instalar su estufa, Jiang Cheng quería alzar su puño en señal de victoria.

"Una cosa menos" pensó en cuanto el trabajador terminó su trabajo, Xichen estaba despidiéndolo y acordando con él la tarifa que cobraría con el dueño del edificio; mientras él se quedaba en la sala, cayendo en cuenta del otro "pendiente" que tenían.

—Fue rápido, es gracioso si pensamos en todo el tiempo que tardamos en que vinieran a instalarlo— señaló el otro ya de regreso, Jiang Cheng asintió pensativo, llamando la atención de Xichen.

—¿Ocurre algo?

—¿Que haremos con la sala?— preguntó sin darle vueltas al asunto, francamente estaba cansado de arrastrar una silla del comedor cuando quería ver televisión. Xichen se quedó en silencio un momento antes de sacar su móvil.

—A-Yao me pasó un contacto de otra mueblería, tienen más variedad, si quieres puedes revisarlo— Jiang Cheng relajó su semblante asintiendo mientras pedía los datos, prometiendo revisar el catalogo más tarde.

Con el ambiente más ligero y para celebrar que finalmente podían cocinar de forma decente, Xichen estaba tan emocionado que de inmediato quiso usar el horno, compartiendo su buen humor, decidió ordenar el resto de libros que aún tenían guardados en cajas ya que Xichen no lo había hecho debido a la repentina fiebre de su sobrino.

Mientras el hombre reunía todos los ingredientes que había comprado con anterioridad, Jiang Cheng se topó con una gran variedad de textos médicos.

Encogiéndose de hombros, decidió dejarle la repisa que ya estaba acomodando junto con otra superior, el hombre ya los acomodaría por alfabeto o especialidad.

Entonces se centró en sus propios libros de medicina y veterinaria, clasificándolos por especialidad ya que a él se le facilitaba más la consulta si la llegaba a ocupar.

Luego comenzó a ordenar sus novelas, estas eran más fáciles ya que seguía el clásico orden alfabético; entonces sacó otra caja de Xichen que tenía escrito "novelas" en ella...

Frunció el entrecejo al ver títulos como "El Guerrero Inmortal" y "El camino del príncipe de las Tierras del Este", ciertamente, no eral del tipo de novelas que no asociaría a alguien como Xichen.

"¿Qué su amigo Meng Yao no había dicho que le gustaba la literatura clásica?" se preguntó mirando una bella y etérea portada de un libro que le hizo admirarlo por un momento antes de hojearlo, aunque de inmediato desistió de eso al ver todos esos términos que nunca llegó a comprender aun si su hermana y Wei Wuxian se los explicaron mil veces cuando eran jóvenes.

—Bien, los brownies están en el horno, así que...oh, ya casi terminas, lamento dejarte todo el trabajo— dijo Xichen acercándose, aunque al ver el libro en manos de Jiang Cheng junto con su expresión confundida, le hicieron sonrojar levemente.

—Hum... veo que tienes muchas novelas. Espero que haya espacio suficiente para ambos— comentó tratando de cerrar su caja, sin embargo, Jiang Cheng vio a través de sus intenciones deteniéndolo:

—¿No los quieres poner? ¿Para qué consigues un librero entonces?

—Estos son...

—Lan Xichen, no esperaba que fueras fanático de las novelas xianxia... wuxia... como se llamen, admito que leí una o dos a mis quince, pero incluso tú tienes ediciones especiales...Meng Yao dijo que te gustaba la literatura clásica, así que esperaba algo occidental.

Xichen sonrió un poco culpable, aunque dejó la caja en su lugar, sacando un libro al azar mirándolo entrañablemente.

—También me gusta, pero mi madre amaba estas novelas... es un gusto adquirido, supongo. Y JingYi también lo tiene por mi culpa.