Capítulo 10

111 6 0
                                    

Me encuentro abrazada por Abraham, sentados en la cama, derramando alguna que otra lágrima, terminando de relatar aquella historia.

-¿En serio se comportaron así contigo?-Preguntó interesado Abraham abriendo mucho los ojos, con su mirada totalmente fijada en la mía, y cara de comprensión

-Sí-Contesté tras un largo silencio

Sentía como me abrazaba más y más fuerte, lo que me hacía sentirme segura y protegida.

-Mira-Empezó aquel chico el cual lo conocí hace semanas, apartándome el pelo de la cara, frotando sus dedos en mis mejillas para limpiar mis lágrimas-Te prometo, pero de verdad eh, que con nosotros vas a estar muy segura, ya verás como nadie más te toca ni un solo pelo

-Te lo agradezco mucho, es esto lo que necesitaba

Todo lo malo, siempre acaba, ¿verdad? Pues yo creo que ya puedo cerrar aquel cajón, que solo sabe tener basura.

Nos tumbamos, con menos de medio metro de distancia entre ambos, y le di a Play, entonces Bajo la misma estrella ya estaba ilustrada en la televisión; estábamos tapados, todo totalmente oscuro, vamos, que podría quedarme dormida en seguida, pero no pasó.

-¿Y estas son las pelis que le gustan a las chicas?-Dijo Abraham tras terminar la película

-Cada una tiene sus gustos, pero, son las que más nos suelen gustar

-Pues vaya chorrada

-Oye, que es muy bonita

-Pero si se muere al final el tío, ¿eso qué tiene de bonito? Y explícame, lo del Peter van Houten ese, ¿cómo pudo tratarlos así?

-Ay mira, yo que sé, eso se lo preguntas al director de la película

-Sí, y me pasa como a esos, quita quita

-Algunas veces tienes unas tonterías...-Dije entre risas

-¿Sabes?

-Dime-Respondí extrañada

-Cuando te vi entrar por esa puerta, desde ese primer momento en el que cruzamos las miradas, supe que serías una buena chica, y mira por donde, una excelente amiga

-Bueno, llevamos muy poco tiempo, a lo mejor nos conocemos y mejor y...

-Y nada, Rebe, que en este tiempo te he cogido un cariño especial, una confianza increíble, como...como si nos hubiéramos conocido desde siempre, vaya

-Sinceramente te tengo que decir lo mismo, tú y Rubén, y Alejandro, me habéis devuelto esa sonrisa que ha sido imposible de sacar, ni siquiera forzada, en mucho tiempo, gracias

-A tí

Veo que mi móvil se enciende solo, con en nombre en la pantalla de Alejandro, ¿y ahora que querrá?

-Oye Rebe-Se escucha al otro lado de la línea

-Dime

-¿Todavía sigue en pie eso de irnos a dormir a tu casa? Acabamos de llegar y claro...

-Eh...sí sí, por supuesto, veniros, pero no llaméis, yo estoy pendiente de la puerta

-Ah, genial, ¿está Abraham contigo?

-Sí

-Vale vale, ahora nos vemos

-Adiós

-Adiós

Tengo miedo a enamorarmeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora