Enamorado de una imposible (Completa)

Demasiado...

"No hay que lamentarse por la muerte como no hay que lamentarse por una flor que crece. Lo terrible no es la muerte, sino las vidas que la gente vive o no vive hasta su muerte" - CHARLES BUKOWSKY

NINA

No reaccione inmediatamente porque mi cerebro tardo en procesar su confesión, él lo mato, por su culpa ya no estaba con nosotras.

Cuando recibí esa horrible llamada para anunciar su muerte, dolió y mucho, estaba embarazada y sumamente enamorada de él, pero en el fondo ambos sabíamos que esa era una posibilidad y aunque doliera yo lo acepte, yo acepte su forma de vida porque lo amaba y pensaba firmemente que hacía cosas buenas, que ayudaba gente, sabía que si él moría en acción era porque murió siguiendo sus convicciones y por una causa buena, pero no así, no a manos de un tipo como él en el que se supone confiaba.

-No, dijeron que murió con fuego enemigo – le conteste, el gobierno estaba obligado a entregar un expediente a cada familia donde explicaba la causa de muerte del ser amado y yo recuerdo haber leído el suyo y venia un informe de balística donde detallaban que los 6 disparos recibidos fueron con armamento del enemigo.

-Pfff no soy tan tonto Nina, si hubieran detectado balas de fuego amigo o peor aún de mi arma, se abriría una carpeta de investigación así que aproveche el momento.

-Él confiaba en ti, como pudiste, ¡iba a ser padre! – no me estaba dando cuenta que está alzando más y más la voz y mi expresión corporal era cada vez más agresiva.

-No debió haberse fijado en ti.

-¡¡Lo amaba maldito lo amaba, él era mi mundo!!

-Nooo yo soy tú mundo!!

-Te odio, te odio!!! – me cegué, sé que debí pensar en las consecuencias, pero no me importaba, el recuerdo de su muerte, de todas las noches que le lloré, del nacimiento de mis hijas sin él a mi lado, de su sonrisa todas las mañanas al amanecer junto a mi.... Me inundaron y lo odie como jamás imagine que se podría odiar a otro ser, nacieron sentimientos que no sabía que tenía, que no sabía que podían crecer en mí, no solo lo quería muerto quería que sufriera quería que ardiera en el maldito infierno, así que me avente sobre de él, lo golpe, lo arañe, jale su pelo y trate de lastimarlo lo más que pude.

-Nina basta!!! – el auto se comenzó a zangolotear con nuestra pelea, recibí algunos golpes por parte de él y sé que dolerían como el mismo infierno, pero ahora mi adrenalina estaba hasta el tope y no sentía nada, ni siquiera recuerdo cuando el auto se salió de control y se introdujo por el lateral de una bodega abandonada, solo recuerdo sentir liquido caliente recorrer mi rostro y luego obscuridad.

NICK

Estaba nervioso, jamás había sentido tanta adrenalina dentro de mi en alguna misión o trabajo que he tenido, inclusive puedo decir que ni siquiera cuando ocurrió lo de Lya, no lo sé talvez esto era diferente porque las conocía más de cerca, Nina era una muy buena amiga y pensar en esas hermosas gemelas hacia que mi estomago se revolviera porque no podía pensar en cómo alguien les podría explicar que ya no volverían a ver a su madre y luego estaba Jessica solamente la había "saludado" una maldita vez y con eso tuve para que todos me atormentaran con mi supuesta relación con ella, no entendían que era demasiado pequeña para mí no importaba lo hermosa que fuera, pero he de confesar que lo que más me sorprendió de todo fue enteramente que ella era ciega, se que eso no debería cambiar la forma en la que la veía pero lo hacía.

-Ahí Ryan, ¿lo ves? Sale humo de aquel lado – dijo Brant sacándome de mis pensamientos, no se si era bueno que Ryan manejara normalmente el era conocido por ser el mas prudente de los tres, pero ahora estaba vuelto loco.