Me doy la vuelva y me fijo en el chico que esta en el marco de la puerta. Es alto, cabello negro,delgado, va vestido de una manera que me deja en claro que ya se iba a dormir y paro de analizar su cuerpo en el instante en que miro sus ojos...madre del amor hermoso sus ojos son tan profundos, es como si me adentrara en el oceano y gracias a las tenues luces del pasillo es como si el mar reflejará las estrellas.
Y no digo nada... solo lo observo, es como si todas las palabras en mi vocabulario se fueran y solo me quedara "wow"
Sus labios son finos y estan curvados en una media sonrisa
-¿Se te ofrece algo?- dice con una voz que me derrite en el momento que la escuché
Es una excelente pregunta... ¿porque rayos toqué su puerta en primer lugar?
-d-disculpa si te desperté, estoy horneando galletas pero no tengo harina... ¿podrías regalarme una taza?
Dios me siento tan estupida. El solo se me queda mirando como asimilando lo que le acabo de decir: chica de 19 años que toca a la puerta de un chico claramente atractivo las 11.30 de la noche ¿solo para pedir harina? Dios que bueno que no estamos en una película porno.
De sus labios se escapa una pequeña risa burlona
-es un poco tarde para hacer galletas ¿no crees?-dijo mientras tomaba una posición comoda en el marco de la puerta
-¿cuando es un mal momento para comer galletas con chocolate? -respondí inmediatamente
Vuelve a dedicarme una sonrisa torcida...
deja de hacerlo
-buen punto- dijo para luego extender su mano en dirección a la taza que tengo en mi mano.
Automáticamente siento como mis músculos se tensan, mientras le ofrezco la taza. El la toma luciendo muy relajado y se adentra en su casa
No te asomaras Eileen, si te ve husmeando en su casa lo arruinaras todo... no... al carajo
Deliberadamente abro un poco la puerta lo suficientemente lento como para que parezca obra del viento ¿mencione que no hay ventanas cerca? Toda su casa está oscura pero logro definir lo que parecen ser unos muebles sencillos, una tele en el centro, alfombras y un par de plantas. Simple pero acogedor.
De su casa emana un ligero olor a canela...¿les dije que amo la canela?
Sin darme cuenta estaba casi a la mitad de la puerta cuando escucho que se acerca. Rápidamente logro ponerme en mi antiguo lugar de espera y el se encuentra de nuevo en la puerta. Me dedica una sonrisa y me ofrece la taza llena hasta ek tope de harina
-muchas gracias-digo para luego tomar la taza de su mano. Al momento en que lo hago nuestros dedos se chocan y puedo sentir una ligera corriente eléctrica... la cual no me imaginé ya que el cambió su expresión relajada a una ligeramente sorprendida
-lo siento-dije automáticamente aunque no fue mi culpa
El solo sonrió y con eso di por acabada nuestra interacción nocturna. A duras penas me doy la vuelta para ir a mi casa y cuando estoy a punto de cerrar la puerta veo que el sigue donde lo deje.
-¿como te llamas?-me dice como esperando que yo le hiciera la misma pregunta
-Eileen- digo rápidamente, rayos
no le pregunté su nombre
-Espero algo dulce mañana Eileen- y con esto cerró la puerta de su casa.
Joder
