ENTER THE VOID // Teen Wolf [03]

05. You were hurt too

C a p í t u l o   c i n c o
❝A TI TAMBIÉN TE LASTIMARON❞

๙

Al día siguiente, desperté temprano por la mañana para poder desayunar con Alex antes de que tuviese que marcharse al hospital. Luego de lavar los trastes, volví a dormir un rato más; mi cuerpo aún no se acostumbraba del todo a los medicamentos que seguía tomando para la infección de garganta. Desperté poco después del mediodía. Comí algo y tomé una ducha rápida. Arreglé las cosas que necesitaría dentro de una mochila y me hice camino hacia el penthouse de los Argent, pues debía llevar los tranquilizantes a Allison para que pudiese tener el arma lista.

     —¿Sólo tenía tres? —en su rostro apareció cierta preocupación.

     —Sólo tres —asentí, mientras le seguía hacia la oficina de su padre.

     —Bien, supongo que tendremos que hacerlo funcionar —dijo, más para ella misma que para mí.

     —Supongo que sí —comenté en voz baja —. ¿Te encuentras bien? —pregunté en cuanto noté cómo su mirada se encontraba clavada sobre el interior del pequeño portafolios donde yacían los tranquilizantes.

     —Sí, sí... —agitó un poco la cabeza.

     Se acercó a uno de los armarios en donde su padre guardaba sus armas y de dentro de este, sacó un estuche largo de color negro. A estas alturas, ya sabía bien lo que contenía.

     —Entonces, uhm... ¿Cómo va todo con Isaac? —dejó salir ella después de un momento de silencio, mientras yo llenaba una de las jeringas con Xilacina —. Oh, lo lamento... no tienes que contestar, probablemente no es mi asunto de todas maneras —agregó rápidamente, ante mi reacción de sorpresa.

      —Está bien —reí entre dientes —. Uhm, las cosas están ¿bien? Supongo... —tomé un respiro y después volví a mirarle —. No, honestamente... no lo sé —me encogí de hombros.

     —¿Por qué? Aún le gustas, ¿sabes? —sentí su mirada buscando la mía —. Es demasiado testarudo y orgulloso para admitirlo, pero no es muy bueno escondiéndolo —dijo entre risas.

     —Lo sé —reí de la misma forma —. Pero sé que lo lastimé, así que no quiero presionarlo... no todavía —agregué aquello último con un guiño divertido.

     —Lo entiendo perfectamente, pero a ti también te lastimaron —su mirada y la mía permanecieron conectadas por un momento. Ella tenía razón —. Yo creo que ya le diste suficiente tiempo para jugar a la víctima —dijo, después de unos segundos de silencio —. Deberías definitivamente empezar a presionar —comentó encogiéndose de hombros —. Piénsalo, ¿presionar a un chico como Isaac cuando se siente increíblemente atraído hacia ti? Eso puede que sea divertido, ¿no lo crees? —dijo de forma divertida.

     —Puede que tal vez tengas un poco de razón en eso —dije entre risas. De nuevo, ella tenía toda la razón —. ¿Por qué no se me había ocurrido algo así?

     —Porque te gusta demasiado —soltó con simpleza.

     —Sí, probablemente es eso —comenté.

     Semanas atrás nunca hubiese pasado por mi mente ni el más mínimo pensamiento sobre el tener una conversación como esta con Allison. En realidad era algo que no sabía que necesitaba. No entendía cómo había abierto mis ojos de aquella manera tan simple y rápida.

      —En fin, ¿crees que podrá rastrear a Malia? —dijo cuando ambas volvimos a lo que hacíamos antes —. Sino, estaremos en el bosque por un largo rato.