Club de Vírgenes (Novela)

Capítulo 11

Capítulo 11

Peta

Entré en casa y cerré la puerta. Puse mi bolsa pesada en el sofá y comencé a sacarme el vestido en el camino, incluso antes de llegar al baño.

Mi cuerpo necesitaba una ducha relajante.

Incluso antes de abrir la ducha oí a mi teléfono sonando dentro de la bolsa. Inmediatamente caminé solo de sujetador y bragas alrededor de la casa y me fui hacia mi bolso en el sofá. Cuando llegué a mi teléfono celular, inmediatamente vi las llamadas perdidas de Denise.

Práctica, dejó un mensaje escrito.

Peta

Arréglate que a las veintiún horas, pasaré por tu casa para que vayamos a una fiesta de los niños del curso de Ingeniería Agronómica.

Me invitaron a unirme a la fiesta y quería que vinieras conmigo.

Creo que el entrenado Moreno está atraído por mí... jejeje

Besos de tu amigota

Denise

Bajamos del coche de mi padre, en cuanto llegamos al lugar de fiesta la fiesta Peta y yo. El lugar era un lugar con piscina, salón de fiestas y sala de juegos. El salón parecía agradable.

Había un DJ que animaba la fiesta con la música electrónica.

Caminé junto a Peta. Ambas estábamos usando vestidos escotados, pero el mío era de color púrpura y el vestido de Peta era vino. Los tacones altos bajo nuestros pies nos hacían más altas y atrayentes.

Peta también había puesto un lápiz labial rojo y audaz en sus labios.

-¡Mira el Moreno allí! - Exclamó al verlo de nuevo. - Llevaba una camisa blanca pegada al cuerpo, pantalones cortos y zapatillas de deporte.

-¡Él está todo bueno!

-¡Creo que estás enamorada de él!

Peta me advirtió mirándome. Sonreí y miré al chico de nuevo.

-¿Crees?

-Estoy segura.

Peta miró y también se dio cuenta de que él y yo haríamos una buena pareja. Al darse cuenta de mi presencia, por en la oscuridad el entrenado se apartó de su círculo de amigos y vino a mí.

-¡Qué alegría que hayas venido! - Me miró de abajo hacia arriba, parecía interesado en mí. Traté de contener una sonrisa ardiente.

-Yo traje a mi amiga Peta.

Me apresuré a decir.

-¡Genial! - Dijo y sonrió. - Siéntete libre, Peta, mi nombre es Pablus.

-¡Gracias!

Ella sonrió y miró a su alrededor.

-Están en su casa. Tenemos bebidas a la vista, barbacoa y también si queremos nos metemos en la piscina. ¡Está disponible para ustedes!

Él me miró y me guiñó un ojo.

- Hablamos más tarde, ahora tengo que seguir dando consejos a los chicos de allí.

-Bien.

Le dije y le sonreí.

-¡Discúlpenme!

Pablus volvió a su grupo de amigos.

Peta

Después de un rato, Pablus volvió a nosotras y llevó a Denise a la pista de baile. En ese momento miré a mí alrededor y pensé que casi todos los estudiantes de ingeniería estaban allí. Aparte de eso, no he visto el tipo desagradable de la biblioteca.