Girls don't cry; 2 (exo&bp)

CAPÍTULO 6

Título: "fade away" by xam

-"tengo demonios en lo más profundo de mi mente"

p.o.v JongIn

Guardé mi cepillo de dientes en la pequeña mochila que había encima de la cama. Me puse la camiseta de manga corta y después la sudadera encima, ya que aunque estuviéramos en pleno verano eran las cinco de la mañana en Corea y hacía bastante frío.

Me acabé el vaso de zumo que había subido al dormitorio y me quedé esperando sentado en la cama de matrimonio a que Jennie se acabará de duchar y se vistiera para irnos a la mansión.

-¿Como vamos de tiempo? - me preguntó ella saliendo del lavabo de nuestra habitación envuelta en una toalla blanca y secándose la melena grisácea con una toalla más pequeña.

-Tienes media hora - dije mirando mi reloj y sentándome mejor en la cama con mi espalda en el cabezal.

-Voy tarde - dijo ella empezando a correr por el dormitorio.

La miré desprenderse de la toalla y quedar completamente desnuda delante de mí. Jennie seguía teniendo esas magníficas curvas, esa piel tan tersa y suave y esas líneas finas que le hacían la mujer más increíble ante mis ojos. A veces me daban ganas de ir hacía ella y tocarla de pies a cabeza, besar cada rincón de su cuerpo. Me picaban las yemas de los dedos por tocarla y mi cuerpo por un momento se sentía vivo de nuevo, como si esa llama apagada renaciera de las cenizas y me animará a tener el control de mi cuerpo.

En esos momentos mi cuerpo volvía a ser mío.

Pero entonces, cuando ya estaba convencido, cuando ya me veía capaz de volver a ser yo, algo que estaba muy dentro de mí, me detenía. Y me recordaba que estaba roto en mil pedazos y muchos de esos pedazos se quedaron aquel día en ese asqueroso colchón impregnado de sudor y sexo. Otros cuantos de ellos volvieron a mí, pero con otros nombres en ellos.

Estaba roto. Porque no era capaz de besar, tocar o de desnudarme con total libertad. Yo, ya no era de mí, era de otros.

-Vale - dijo ella parándose en frente a mí - ya está, nos podemos ir - me dijo cuando metió el peine y cerró la cremallera.

Yo le sonreí cuando alzó la cabeza y me miró. Pero en sus ojos se reflejaron algo que no supe entender.

-¿Todo bien? - le pregunté cuando me acerqué a ella y cogí la mochila.

-Si - dijo apartándome la mirada y haciéndose una coleta alta en un gesto nervioso y para evitarme.

-¿Seguro? - le dije cogiéndola de la barbilla y haciendo que alzará su cabeza para mirarme.

-Segura - me respondió y sonrió al final de la frase de forma forzada.

Me agaché un poco para que nuestras caras quedarán a la misma altura, y ella me miró frunciendo el ceño, cosa que seguía sin comprender. Dejé un beso en sus labios y me separé de ella cuando no obtuve respuesta por su parte.

Jennie me apartó la mirada y salió de la habitación. No dije nada. Jennie era una chica de carácter cambiante y un poco complicado. Pero con el tiempo supe tratarla.

Pero esta vez era diferente, se estaba distanciando de mí. Cosa que me daba mucho miedo.

Bajé las escaleras y me metí las dos mochilas en el coche. Me puse en el copiloto cuando Jennie se puso al volante.

Llegamos a la mansión, pero ella no paró hasta llegar un poco más lejos de donde se realizaban las carreras ilegales. Allí había una base de aterrizaje. Estacionado esperaba un avión a todos para ir a Japón, y entrar en la mafia JYP.