Covergirl | Camren

Capítulo 51

Lauren's POV

Desperté por el gran sol que daba en mi cara. Me dolía todo el cuerpo y no sentía las piernas, todo me pesaba. Me encontraba demasiado incómoda y ni siquiera era capaz de abrir los ojos del todo. Luego de algunos minutos luchando contra mí misma pude despertarme por completo y caer en en cuenta de todo. Estaba dormida en una silla del jardín, mire a mi alrededor y pude ver a Shawn tirado en el suelo a secas, Thomas y Kelly estaban en la misma posición; Jennifer, Vero, Ally y Dinah dormían en una silla al igual que yo y el resto podía sospechar que estaban dentro de la casa.
Después de mirar aquel panorama me desperecé y observé a Ally levantarse, pronto cayó en la realidad de todo y se persignó.

– Dios mío, qué he hecho? – susurró pero yo escuché y reí haciendo que me dirigiera la mirada. – Lauren, tú también? – dudó.

Traté de asentir pero la cabeza me dolía tanto que un mínimo movimiento haría que se me cayera. Ella estaba igual que yo y solo nos quejábamos en voz baja.

– Ally, el tequila es lo peor. – dije con los ojos cerrados frotando mi sien.

– Ya sé Lau, lo odio. – se puso en pie sosteniendo su cabeza.

– Virgencita de Guadalupe, qué pasó aquí? – exclamó la abuela de Camila al ver el jardín de su casa.

– Tequila. – respondimos Ally y yo al mismo tiempo y la vimos negar preocupada.

La abuela Mercedes nos ayudó a subir hasta el segundo piso, nos llevó unas aspirinas y dijo que nos prepararía una sopa para el la resaca. Agradecimos y luego de aquello la mujer volvió al jardín para despertar al resto.

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Camila reía sin parar, estábamos sentadas en la sala junto a Ally y Dinah.

– Pero si ustedes sabían lo que eso provocaba por qué bebieron? – preguntó risueña.

– Tu tío Enrique es un experto en convencer. De ahí no recuerdo más. – respondió Dinah y junto a Ally asentimos acompañándola.

– Y quién más bebió? – preguntó enderezándose en el mueble.

– Pues yo fui la primera en despertar y en el jardín me acompañaban Dinah, Ally, Vero, Jennifer, Shawn, Thomas y Kelly. Y dentro de casa dormían en el suelo Taylor y Chris, ni siquiera en un mueble sino en el suelo. – resumí y escuché a mi novia volver a reír.

– Es que son tontos amor, cómo le van a hacer caso a mi tío Enrique? Es el puto desmadre. – lo último lo dijo en español.

– No lo sé pero ahora por tu tío pequé y en consecuencia a eso me duele cada parte del cuerpo... y del alma. – respondió Ally con cara de drama y soltamos la carcajada.

Hablamos otro rato de diversos temas y luego Camz y yo quedamos solas en la sala, estaba sentada en el sofá mientras ella tenía su cabeza recostada en mis piernas y yo hacía caricias sobre su cabeza y toda su cara.

– Camz, aquello de anoche fue... muy especial, en serio muchas gracias. – dije y ella mantuvo su mirada firme en mis ojos.

– No tienes que agradecerme Lolo, era lo menos que podía darte. – yo negué con una sonrisa. – Hablo en serio, pensé tu regalo durante mucho tiempo y como lo tienes todo tuve que optar por algo de valor más... sentimental.

Camila me había regalado un porta retratos con una foto muy especial en él, una que nos tomamos el día que le pedí ser mi novia en Miami hace ya 6 años. En ella yo aparecía sentada en el suelo y Camz sobre mí mirando a la cámara, mi guitarra la sostenía en una mano mientras con la otra abrazaba a la castaña. Esa foto tenía mucho valor para mí porque durante años jamás vi esa foto debido a que fue tomada por ella desde su cámara, pero ahora por fin puedo hacerlo y aunque me veo horrible significa más para mí que nada. Además, el marco del porta retratos  tenía nuestras iniciales marcadas y lo hacía verse realmente hermoso.