Al día siguiente volvemos a la empresa. Hace un calor infernal dentro de la sala, pero apago el aire acondicionado en cuanto Hyunjin lo enciende. Prefiero prevenir riesgos, sobre todo teniendo el comeback tan cerca.
Es demasiado temprano y hemos dormido menos horas de lo habitual, y eso se nota mucho en nuestra forma de bailar. Sin embargo, poco a poco y gracias a las tonterías que hace Jisung y a las caras que pone, todos empezamos a disfrutarlo. Minho es el primero en animarse y ponerle más energía, y luego los demás acabamos por unirnos.
Finalmente, cuando ya se acerca la hora de comer, todos nos estamos riendo y bromeando y el ensayo ha resultado más productivo de lo que pensaba.
—Minnie —me llama Changbin cuando acabamos. Se ha tirado al suelo de espaldas y se tapa la cara con el brazo—. Estoy cansado, Minnie. Ven conmigo.
Me agacho a su lado y me quedo observándolo.
—¿No estás cansado? —Me mira por encima de su brazo y yo asiento—. Túmbate aquí.
—Iré al sofá —digo.
Me pongo de pie, voy hacia el sofá y me dejo caer en él. Echo la cabeza hacia atrás y cierro los ojos. Estoy agotado, supongo que como todos, pero no me he tumbado a su lado porque no quiera, sino porque quiero molestarlo.
—Minnie —escucho que me llama con el tono más agudo de lo normal.
—Ya estamos... ¿qué quieres? —digo, sin siquiera mirarle.
De repente noto un peso en mis piernas y cuando abro los ojos veo cómo se abraza a mí sin darme tiempo a apartarlo de un empujón.
—Esto es raro, hyung, apártate.
Mi pulso se ha acelerado y solo puedo rezar para que no se dé cuenta. Tiene la mejilla apoyada en mi hombro y puedo ver cómo tiene los ojos cerrados y el labio inferior abultado mientras me ignora.
—No quiero tenerte encima.
—Ni yo a ti —me responde.
—El sofá es muy grande. Podrías haberte tumbado por ahí.
—Tu cuerpo es más cómodo. ¿Te puedes callar ya?
Me quedo en silencio cuando vuelve a cerrar los ojos. Jisung y Felix están en la esquina, con la espalda apoyada en el espejo y mirando su teléfono con concentración. Por su parte, Jeongin y Hyunjin están hablando sentados en mitad de la sala. Los demás se han marchado a por la comida.
No sé qué hacer para entretenerme mientras Changbin duerme y me quita cualquier posibilidad de movimiento. Primero intento descansar también, pero su respiración me está dando en el cuello y no consigo centrarme, así que abro los ojos y me encuentro con nuestra imagen en el espejo. Sus cortas piernas cuelgan por ambos lados de las mías y está completamente recostado contra mí. Por suerte, no pesa tanto como para ser demasiado molesto.
Le rodeo la cintura con los brazos y sonrío. No quiero que me vea así, pero no puedo evitarlo. Sé que no está dormido porque se ha movido ligeramente en cuanto le he tocado, emitiendo un ruidito al volverse a acomodar, y también sé que no le ha importado que lo haya hecho.
La verdad es que nunca se sabe cuál es el límite para Changbin. Muchas veces quiere estar encima de todos, como ahora, y otras simplemente se cansa y te empieza a gritar en cuanto le pones la mano encima. Sin duda, me quedo con estos momentos en los que no solo se deja tocar, sino que busca por más.
Soy consciente de que lo hace con todos, así que solo me queda disfrutarlo sin pensar que para él pueda significar algo. Ni siquiera se me pasa por la cabeza.
—Binnie hyung... Pesas mucho —miento.
Pasa los brazos por encima de mis hombros y esconde el rostro en mi cuello. En cuanto su nariz me roza me invade un escalofrío que me obliga a cerrar los ojos. Con todo, no hago el esfuerzo de apartarlo.
Y el sigue durmiendo totalmente ajeno a todo.
ESTÁS LEYENDO
Hearts never lie [Seungbin]
Fanfiction«No sé cómo empezar a explicar que estoy enamorado de Changbin». --- -Actualizado-