"Los sicarios"

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Caminaba un camaleón morado, hasta llegar a una mesa, cogió la silla y se sentó, de su camisa, saco una rosa roja y la colocó en la mesa, miro a los lados cauteloso.

ー ¿Desea ordenar algo?ーpregunto un camarero llegando a la mesa.

ー No, estoy esperando a alguien.ーdijo el camaleón, el camarero asintió y se retiró.

ー Perdón, por demorarme.ーdijo una zorra de pelaje negro y ojos azules, vestía un saco negro, se lo quito y lo colocó en el espaldar de su asiento, ella vestía un vestido azul marino.

ー Oh, no, pasa nada.ーdijo el camaleón.

ー Bueno, sobre lo acordado...ーempezó a hablar el camaleón.

ー Espera, quiero que lo digas.ーsonrió la zorra, mostrando sus dientes.

El camaleón, le hizo señas para que se acercará, cosa que hizo la zorra.

ー Quiero que... la mates, a mi esposa.ーsusurro él.

ー Dame tu anillo.ーdijo la zorra extendiendo su mano.

ー ¿Mi anillo?ーpregunto el camaleón morado.

ー Si, tu anillo.ーdijo con un tono de ironía la zorra, el camaleón obedeció y se quito el anillo que llevaba en el dedo.ーMmm... de 24 quilates, no lo sé pero lo llevas usando desde 2 años, debería estar desgastado pero no lo está, no estas casado.ーdijo ella y libro el seguro de su pistola apuntándole al camaleón bajo la mesa.

ー Si, no estoy casado. Soy Zespio The Chameleon de la Zone Cop y tu eres la Asesina, un integrante de los sicarios y  créeme cuando digo esto, no podrás escapar de aquí.ーdijo serio el camaleón morado.

ー Ya se lo que voy hacer, dame tu celular.ーel camaleón morado cogió su móvil y se lo dio a la zorra.ー Te daré 30 minutos, tu responderás mis preguntas y con la pura verdad, si me mientes lo sabré, por que he hecho esto toda mi vida y se cuando uno miente.ーdijo la zorra, pulso el botón del teléfono y la cuenta regresiva empezó.

ー Cuéntame cómo fue tu día.ーdijo ella con una sonrisa.

ー Había regresado de unas vacaciones...

ー ¿Por qué tomaste unas vacaciones?ーpregunto ella.

ー Fui a casa de un amigo.ーempezó a contar él, ignorando a la zorra.

[...]

Entraba un camaleón morado, la puerta le fue abierta por una murciélago blanquecina, con una sonrisa.

ー ¡Zespio! Se que no te gustan los abrazos pero me da igual, ven acá.ーdijo la murciélago abrazando al camaleón.

ー A mi también me da gusto verte, Rouge.ーdijo el camaleón entre risas respondiendo el abrazo.

ー Oye, quita tus manos de mi chica.ー dijo un equidna rojo, caminando hacia ellos, los dos se apartaron del abrazo, el equidna llegó hasta ellos y puso un brazo por atrás del cuello de la murciélago atrayéndola.

ー Ah, aquí tienes lo que me pediste.ーdijo la murciélago, cuando su novio y el amigo de este, terminaban su saludo, ella tenía extendida su mano y en esta estaba una carpeta.

ー Gracias.ーagradeció él, tomando la carpeta.

ー ¿De qué es?ーpregunto curioso el equidna.

ー No es nada, informes médicos y esas cosas.ーdijo la murciélago.

ー ¿Sabes lo sexy que te ves hablando de esas cosas?ーpregunto juguetón y con sonrisa coqueta el equidna.

ー ¿En serio?ーpregunto ella siguiéndole el juego y se empezaron a besar y decir cosas lindas, metiéndose en su mundo.

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