29- In fraganti

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N.O.

—Dalgom no dormirá ahí.–avisó la más pequeña de los Kim con su perrito en brazos.

No permitiría que durmiera lejos de ella una noche más. Él jamás dormía en el patio en su antigua casa, menos lo haría aquí. Era lo único que le quedaba de su adorada madre.

—Ah, no? –preguntó burlón su padre–Entonces dónde lo hará?

—En la cama conmigo.–Jiyong levantó una ceja–Mi habitación es muy grande, puede estar ahí.

—Alice, ese perro no puede entrar a la casa.–murmuró como si le hablara a una niña muy pequeña–Con esa condición deje que lo trajeras aquí, recuerdas?

Jisoo escuchó esa parte de la conversación gracias a que salía de la piscina. No dijo nada y simplemente se fue acercando mientras secaba el agua que escurría de su cuerpo.

—Pero es que Dalgom no puede dormir ahí.–insistió casi en un chillido ganando una mala mirada de su padre.

—No es no, Alice.–fue claro–Le compré una casa lo suficientemente cómoda como para que Dalgom no quiera dormir ahí, así que dile a Dalgom que vaya a su nuevo hogar y duerma plácidamente como tú deberías hacerlo en el tuyo.–Jisoo hizo una mueca por la rudeza de su padre.

Siempre era así pero no entendía porque no podía mejorar un poco su tono con Alice, era solo una niña que acababa de perder a su madre.

—Es solo un perro, papá.–intervino Jisoo con voz firme–Estoy segura de que Alice se hará cargo de Dalgom.–añadió con una pequeña sonrisa acariciando al perro que lamía su mano. Alice asintió sin dudarlo.

Jiyong negó sin quitar su semblante serio.

—No quiero que la casa después apeste a suciedad de perro, seguro hasta está pulgoso.–murmuró sin dejar de mirar el iPad en sus manos–Así que ni insistan, ese perro dormirá ahí y punto.–finalizó señalando la pequeña casa blanca que estaba en la esquina del jardín trasero.–Allí estará bien, Alice.

Jisoo miró a su pequeña hermana que se abstenía de seguir insistiendo, regaló una última mirada a Jisoo antes de bufar y caminar hasta la casita de Dalgom con él en manos. ¿Cómo le iba a explicar que ya no podrían dormir juntos?

—En nada te afectaba que el perro durmiera con ella.–comentó Jisoo sentándose en la silla a un lado de su papá–Acaba de llegar a esta casa en donde no conoce a nadie, se acaba de enterar que nosotros somos su familia. Otra familia.–Jiyong la miró–Son muchos cambios, ese perro es lo único conocido para ella.

—La vida se trata de eso, Chu.–su hija lo miró sin entender–Los cambios son fundamentales en la etapa de crecer, ella debe aprender que así es esto. Lo hago por su bien.

—Es solo una niña.–mencionó Jisoo como si no fuera lo más obvio–A esa edad lo único importante es saber si One Direction va a regresar. Con esa separación ya es mucho para la vida.–bromeó un poco pero su padre la miró como si fuera idiota y la sonrisa de Jisoo se borró.

El rostro de Alice ya era lo bastante triste y serio como para alguien de solo 11 años, ella debía ser feliz. Jisoo se sentía con la obligación de convencer a su padre de permitir al perro en su casa, como diera lugar.

—No seas tan duro con ella.–siguió insistiendo–Con Jennie y conmigo ya lo fuiste, sé mejor con ella.

—Ahí es donde te equivocas.–respondió inmediatamente colocando el iPad sobre la mesa de cristal–Si hubiera sido disciplinado como lo pienso ser con Alice, Jennie ayer no me hubiera gritado. Me faltó al respeto y no pienso dejar que eso pase con Alice.–Jisoo sonrió con ironía ante las palabras de su papá–Ve la hora, no se ha parado por aquí en todo el día y ya casi es hora de dormir. Que se cree? –añadió mirando su reloj–Le he dado muchas libertades.

She Takes Control [Jenlisa G!P] Where stories live. Discover now