¡No soy Novio de Manuel Vainstein! - Trueplik

06

Al otro día en la escuela fuí hasta mi grupo de amigos, pero solo estaba Paulo con Mauro e Ignacio. Suspiré y me acerqué.

- Mateito - sonrió Ignacio.

- Mm.. - sonreí.

Pero antes de sentarme Paulo me dijo que lo acompañe al baño, así que volví agarrar mi mochila y lo acompañe.

- ¿Ahora sí me explicas? - Dijo cuando estuvimos lo suficientemente alejados.

- ¿Que cosa?

- No te hagas el boludo. Lo que pasa entre vos y Manuel.

- No pasa nada, no somos amigos ni nada, solo cuida a Emi.

- ¿A Emi? ¿Encerio?  Ese nene es tan inteligente que se cuida solo y a la vez a vos.

- Bueno - Susurré.

- ¿Te gusta no?

- No.

- ¡Ay Mateo! - Pasó su brazo por mis hombros - Conmigo podes ser libre, no te voy a juzgar ni nada. Se que te gusta aunque lo niegues, y no tiene nada de malo que te gusten los chicos.

- Paulo no te acompañe al baño para que me des consejos de como vivir mi vida.

- Esta bien - Me soltó - Solo quise ayudarte. Si te gusta, búscalo y que no te importe nada de lo que digan los demás.

Solté un suspiro.

La jornada paso y no había visto a Manuel en todo el día. Saliendo de la escuela fuí hasta su casa y golpeé dos veces hasta que salió su papá.

Me dejó entrar y fuí hasta su pieza, golpeé y apenas se escuchó un pasé entré.

- ¿Que haces aca?

- Vine a verte.. y a disculparme.

- No me podes pedir un simple perdón por cada vez que me trates mal.

- Te traje un alfajor - Lo saqué de mi mochila y se lo di - Los de Oreo son tus favoritos.

- Gracias - Susurró y lo agarró.

- Perdón - Me senté a su lado - No merezco tu amistad.

El soltó una risita.

- Ya esta Mateo, esta todo bien - pasó su brazo por mis hombros.

-  Voy a tratar de empezar a restarle importancia a lo que los demás digan. No quiero pelearme con vos Manu.

Lo miré a los ojos, el estaba mordiendo el labio y en suspiro se abalanzó sobré mi y me besó.

Se subió sobré mi, paso ambos brazos por mi cuello y me besaba lentamente. Tarde en caer a lo que estaba pasando, pero a los segundos se lo seguí.

Puse ambas manos en su cintura y lo atraje más a mí. Con mi lengua recorrí su boca mientras que con mis manos jugaba en su espalda, dejándole caricias por todos lados.

Después de un rato entre en razón. Manuel Vainstein me besó... Yo lo estaba besando.

Pensé que Mateo iba a dar el primer paso sjsjsj. Hasta yo misma me sorprendo.