EL DARDO DE EROS
Narrado por Cora (Eros quiso narra pero la autora soy yo)
Aquella mañana me levante algo sentimental, supongo que ayer vi tantas parejas juntas en la cena romántica mientras yo disfrutaba sola de una copa de vino y algún aperitivo de cortesía, luego de eso llore en mi habitación un rato hasta dormirme.
Pero hoy debo seguir mi camino y visitar el gran templo de Apolo, Delfos, junto a un grupo de turistas como yo, me arregle algo rápido porque me levante con el tiempo justo, salí de mi habitación y baje al desayuno ahí nos esperaba el guía quien nos dio las indicaciones y salimos en el autobús.
Durante el camino no puede evitar sentir una mirada encima, era como si siguiera mis pasos pero pensé que solo era mi cerebro jugando conmigo, llegamos hasta un punto y ahí caminamos junto al guía quien nos explicaba sobre como funcionaba el oráculo, cuando de pronto una mujer muy hermosa pero vestida de turista se me acerca cuando me ve sola.
- Así que tienes un corazón apasionado -la mire extrañada, pero ella a mi con una sonrisa- ¿estas enamorada? ¿Me habla a mi? -digo tratando de parecer desentendida porque no la había visto nunca -. Claro que si, acaso no ves que me acerque a ti, porque no hablas con Eros, el te puede ayudar. -dice alejándose-.
- ¿Eros el di...? -digo pero no alcanzo pues esta se aleja casi desapareciendo en medio de las personas que estaban en el grupo, extraña mujer pensé yo, todo en ella no parecía coordinar era así aunque parecía demasiado sensual para la ropa que usaba.
Luego el guía nos dejo solos para caminar y ver el lugar, yo me senté debajo de un árbol pues el calor estaba haciendo mella sobre mi, siento que me derrito, debajo de este saque un manzana que guarde en el desayuno para comer cuando pensando dije:
- ¿Eros? ¿enserio?, esa mujer cree que existe, esta loca, los dioses son solo inventos para explicar la naturaleza humana - digo en voz alta - Ojala Eros existiera, porque no estaría mal usar sus flechas para que Enzo me mire un poquito -digo hasta que escucho una voz-.
Pues yo creo que soy real, al menos mi madre dice eso -quedo pasmada hasta que veo al lado un hombre que no estaba ahí, creo que me estoy volviendo loca, porque juro que no estaba ahí, porque quien no vería a un hombre rubio, de casi dos metros, rostro y mira que te puede coger y embarazar- Mucho gusto, mi nombre es Eros, el dios mas sexy aunque le duela mi tío Zeus y se que quieres mis servicios.
-Jamas he pedido tus servicios, jamas, creo que eres un loco y gritare porque me asustas -digo casi temblando-.
No lo harás, primero porque nadie te va creer que alguien como yo sea un loco, segundo porque puedo ser muy encantador y tercero porque tu me llamaste después de tres mil años de inactividad y de hacer lo que quiero. -dice con ese aire de creerse superior que a mi me da ganas de partirle sus bellos y perfectos dientes con su sonrisa fastidiosamente hermosa- Zeus me mando, me castigo básicamente por jugar con los corazones humanos y me dijo que si fallaba me convertiría en un humano lo cual es aburrido.
- Me iré, no escuchare a un loco, no te creo ni te creeré -digo levantándome del lugar y camino unos metros hasta que aparece frente a mi y me detiene-.
- Estos humanos, son tan básicos, quieres que te muestre algo -de pronto del bolsillo de su pantalón sale un pequeño dardo y le da en el corazón de un chico, el cual no aparece sentir el dardo, al lado de una chica de cabello café lo mira algo sonrojada que al parecer venían en una excursión escolar- cambie el arco y la flecha, digamos que es mas cómodo y mas practico.
De pronto aquel chico tomo la mano de la chica, esta lo mira y se sonroja - he hecho que se enamoren, ahora son una pareja feliz, lo vez, que mas pruebas quieres - me dice y yo solo puedo temblar del miedo- Tranquila, no tiembles, todavía no hemos tenido sexo, guárdalo para las noches.- aquello me hizo soltar mi mano y golpearlo en el hombro- ¡Auch!, cuidado con mi piel, no me baño todas las noches con plantas aromáticas.
-Bueno eres el maldito cupido, te creo pero jamas pedí tu ayuda -lo miro seria- no te llame
- Me llamo Eros, E -r-o-s, -dice deletreando- cupido es mi forma angelical ¿A no? pues yo recuerdo oír: ...porque no estaría mal usar sus flechas para que Enzo me mire un poquito -dice tratando de imitar lo agudo de mi voz y yo solo lo golpeo- ¡Auch! deja los golpes para la cama, mas bien déjamelos a ti cuando te de en tu trasero.
-Eres desagradable, esta bien, se supone que esta bien, ¿acaso me seguirás? -lo miro- porque no creo que vivas conmigo -de pronto se queda en silencio y me mira- ¿o si? -asiente- no, no, no, no, tu no puedes hacer eso, no, no, tu no.
-¿Que esperas? no puedo regresar al Olimpo hasta que haga mi tarea contigo, Zeus no me deja - dice muy tranquilo y pone su mano en mi hombro- mas bien vamos al hotel, tengo sueño necesito algo de comer algo.
-¿Debo resignarte a llevarte como perro faldero?-asiente- ¿no me dejaras en paz cierto? -asiente y yo suspiro- esta bien, vamos, pero pondre reglas.
- Pues si, aunque le quitas lo divertido- dice haciendo un mohín y camina conmigo hasta el autobús-.
Durante el camino, me contó algunas cosas, bueno a su manera porque bueno no es muy normal que un dios griego aparezca y te hable sobre porque su madre es afrodita y ares y que significa eso, porque Artemisa era una amargada (en palabras de el), Hera es una fastidiosa y Zeus solo sabe lanzar rayitos y aparearse.
llegamos al hotel, cenamos y decidimos (lo obligo) para irnos a dormir:
-Subimos a la habitación, yo realmente estaba cansada- tu dormirás en el s...- no termine cuando se acostó en mi cama- lo siento pero te levantas, regla numero uno , yo pague esta habitación, yo uso la cama, si quieres una cama paga una habitación-.
Amargada, ya veo porque te pareces a Artemisa, te falta sexo -dice mientras se lleva una almohada y una manta-.
-Claro que no, yo tengo mucho sexo -digo tratando de fingir que si lo tenia- tengo sexo siempre.
-A ver, puedo sentir tu frustración sexual a kilómetros belleza, porque a ver, cuando ves personas tener sexo por computadora no se incluye en vida sexual -me dice y yo solo puedo sentir como mi pena se convierte en enojo- tu vagina ha de estar llena de polvo, úsala, lo pide a gritos.
-¿Porque no te callas? Dijo el del pene de 3000 años -le doy un golpe en el hombro- duérmete mejor, ante de que me arrepienta y te mate.
Esta bien pero que conste que hay mucha mas actividad sexual en mis tres mil años de inactividad que en tus 25 humanos, pero no creo que tu metro y medio te alcance para matarme -dice acostándose y acomodándose en el sofá, para luego acomodarse con su manta-.
-Me iré a bañar y cambiar mejor -digo mientras tomo mi piyama- quédate ahí.
-Puedo ver y hacerte un poco de compañía -dice mientra asoma su cabeza en las sabanas y golpeo su cabeza- ¡Auch! esta bien, esta bien, no soy un pervertido solo porque sea el dios del sexo.
-Con permiso - me adentro de al baño, me doy una ducha, pongo mi pijama y cuando logro salir, Eros ya ha dormido, así que decido hacer lo mismo y me cuesto, quedando dormida rápidamente, soñando en corazones, flechas y un hombre que me persigue con un arco-.
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Good afternoon
No lo esperaban cierto, la cuarentena me tiene confinada a esto asi que dije: vamos a darles mas de lo que quieren.
Gracias a las personitas que me esta leyendo, espero que lo disfruten, y no se encariñen con nadie.
Besos en la cola😘
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Eros y Él (En edicion)
Random¿Que pasa cuando quieres enamorar a alguien y le pides el favor a un dios griego? Y no, no hablo de un dios griego por su belleza, porque lo es al menos ante mis ojos y los de muchas, pero además es el mismísimo Eros dios de la atracción sexual, el...