Quedaban dos horas para el partido y como estábamos listos decidimos ir andando hasta el estadio y así veíamos más París y sus esplendidas calles.
Desde que me mudé a Francia con quince años, soñaba con mudarme a París pero nunca tuve la oportunidad, crecí con Adrien y su familia y cuando nos quisimos dar cuenta sólo quedábamos los dos y yo no quería dejarle solo.
— ¿Habías estado antes en París, Colin? — Le preguntó Lucía. Quedaba poco para llegar al estadio.
— Sí, he dado muchos conciertos aquí y estudié en el conservatorio de París.
— Wow, si que debes de ser bueno entonces.
— Es muy bueno — Sonreí yo y entrelacé sus manos con las mías.
— Me lo dicen mucho. He tenido muchas ofertas de trabajo y he trabajado con artistas muy importantes de todo el mundo, pero mi sitio está en Marsella. Mi vida está ahí.
— ¿Y nunca has pensado coger un trabajo en París?
— Varias veces. Pero no me iría sin mi chica, y ella no se iría.
— Oye, oye. Que yo no te ato — Reí y él me contestó con un "Lo sé cariño, me ato yo solo".
Poco después llegamos al Parque de los Príncipes. En un principio, el partido iba a jugarse en el Stade de France, pero lo terminaron cambiando al estadio del PSG por problemas técnicos que estaba sufriendo el estadio. Ya había bastante gente cuando llegamos, miré el rejol, quedaban cuarenta y cinco minutos para el comienzo del partido. Habíamos dado un gran paseo. Decidimos ponernos a la cola para entrar y una vez dentro, volvimos a enseñar las entradas para que nos llevasen al palco.
Lucía estaba acostumbrada a los palcos por Lucas, pero yo había estado pocas veces y siempre que entraba a uno se me hacía raro. Decidí salir a la terracita y vi como se iba llenando poco a poco el estadio. Los jugadores de ambas selecciones; Inglaterra y Francia habían salido a calentar.
Noté unas manos en mi cintura y una respiración en mi cuello.
— Veamos cómo de bien lo hace el principito esta noche.
— Esperemos que bien— Sonreí y noté su celosa mirada— Este partido nos sirve para la Eurocopa.
— Bueno, hay otros diez jugadores que pueden meter gol, incluyendo a Lloris. No tiene porqué meter él. — Bromeó y le di en el brazo.
— Exacto — Interrumpió Lucía saliendo también y con una cerveza entre sus manos. — Puede meter mi Luquitas. Así me lo dedica —. Reímos.
— Yo voy a por una cerveza ¿Quieres una Carla? — Asentí y me senté al lado de mi amiga.
Busqué a Antoine con la mirada, se encontraba estirando la cadera y parecía estar buscándonos también. Nuestras miradas se encontraron y nos saludó. Le dio a Lucas , el cual estaba es su lado, en el brazo y este también nos saludó. Segundos después se metieron en el túnel de vestuarios y nosotras volvimos a conversar.
Colin salió con dos cervezas,cogí una y me volví a sentar. Colin se sentó a mi lado.
Minutos después salieron ambos equipos por el túnel de vestuarios y las gradas comenzarón a hacer ruido. Los equipos se saludaron y colocaron para poder escuchar los himnos y tras ellos fueron a sus posiciones mientras que Lloris y Kane decidían con los árbitros el saque y el campo.
El partido comenzó y ambos equipos atacaban con ganas. Francia tuvo más oportunidades para adelantar el marcador pero ninguna dio sus frutos. La primera parte terminó empate y ambos equipos entraron a vestuarios.
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Tout a commencé avec un cheval. {Antoine Griezmann}
FanfictionMuchas veces encontramos al amor de nuestras vidas en el sitio menos esperado y nombramos a este sin haber conocido siquiera al adecuado. A Carla, una joven corredora de caballos en Francia le dan la oportunidad de correr con el caballo de una de l...