➳ Ella❌ Romanogers ❌

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La vida para Natasha siempre había sido complicada

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La vida para Natasha siempre había sido complicada.

Desde la infancia que no podía recordar junto con su duro entrenamiento en la Habitación Roja hasta cuándo se convirtió en Vengadora.

Sin embargo ese último suceso le había cambiado la vida tanto para bien como para mal. Por fin pudo encontrar una manera de redimirse y encontrar algo de paz en su interior.

Ese equipo que se unió gracias al hermano de Thor, fueron sus amigos, su familia. Por eso había quedado tan devastada cuándo se separaron en esa tonta guerra civil causada por esos absurdos acuerdos.
Si ya había tenido bastantes problemas emocionales lo que vino después destrozó toda su estabilidad mental aunque claro no lo quería demostrar frente a lo quedaba de su fragmentado equipo.

Sin embargo entre todo ese huracán de problemas encontró una ligera calma.

Esa calma tenía el nombre de Steve Rogers.

No lo había conocido cómo se debía en la invasión de Loki, cuándo simplemente para ella era un tipo que se sentía tan honorable y puro. Su perspectiva cambió cuándo se juntaron en el dos mil catorce, dónde se aventuraron para destapar la red de engaños y mentiras que era SHIELD.

¿Qué era lo que la hacía sentirse loca por él?

Steve era muy atractivo, cualquier persona se daría cuenta del hombre que tenía en frente.  Sus orbes azules tan sinceros la derretían junto con esos brazos dónde ella tuvo la fortuna de ser cargada. Su físico le gustan mucho pero era lo de menos para ella.
Nat adoraba su inocencia. Inocencia que ella amaba ver cómo se quebraba de poco a poco cuándo convivían juntos; sus patéticas y honorables virtudes a su manera también las apreciaba ya que él era todo lo que Natasha jamás podría ser.

Sus sentimientos habían entrado en conflicto, negándose a aceptar lo que Rogers había causado en ella; tal vez por eso pensó que sentirse atraída por Bruce sería una buena idea, pero Banner desapareció en el Quinjet dejando sus emociones tan revueltas de nueva cuenta.

Su corazón que estaba entrenado para no sentir decidió ayudarlo a él y a su amigo en el aeropuerto, acción que la convertiría en criminal y fugitiva junto con el Capitán.

Sería un error no aceptar que durante esos dos años escapando de la ley ella se había ilusionado. Eran algo parecido a amigovios porqué ningún par normal de amigos se besarían cada vez que estuvieran solos, ¿o sí?; de cualquier manera cuándo parecía que iban a formalizar su peculiar relación el infeliz de Thanos llegó derrumbando todo con un simple chasquido de dedos. Fue ahí que todo se fue al demonio.

Los primeros días después de que Thor decapitara a Thanos, justo después cuando todos se fueron y solo quedaron ellos dos, fueron días horribles pero bellos al mismo tiempo.

Steve era su pilar, su sostenimiento. Era el hombro en el que podía descansar su cabeza cerrando sus ojos tranquilamente, pudiendo olvidar por unos momentos el mundo, el universo que los rodeaba, siendo ellos dos nada más.

Steve y Natasha.
El héroe de guerra y la espía.
El Capitán América y Black Widow.

Era trágicamente perfecto.

Sin embargo en la vida de Natasha Romanoff no existía lo perfecto o no podía durar mucho.

Pareciera que esa época de incertidumbre y de perdida llevaron a Steve al pasado, setenta años al pasado.
Él de pronto se vio melancólico y triste, suspirando con frecuencia derrotado pensando en su primer amor: en Peggy Carter. Anhelando una vida que jamás podría tener junto a su amada.

Natasha la odió, la maldijo en silencio mientras veía como Rogers contemplaba el reloj con la fotografía de ella en blanco y negro.
Ese rechazo, la culpa de no haber hecho más, su pasado, su familia separada y la incertidumbre la estaban ahogando.

Una noche ella también observó a escondidas ese reloj, analizando la imagen de la mujer dándose cuenta de porqué Steve la quería tanto.

Peggy fue fuerte, intrépida, ganándose su lugar en una época en la que la mujer no tenía voz. Junto a ella Natasha era... casi nada. Ella era Black Widow, una espía, una asesina a sangre fría con una historia detrás de ella demasiado llena de sangre.

A pesar de eso su último pensamiento antes de caer en Vormir, en sus últimos momentos pensó en su amor más sincero. En su Steve Rogers.


Honestamente no sé de dónde salió esto
pero lo quise escribir xd.
Besos❤️

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