Porque algunas personas me lo pidieron aquí esta.
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Cinco años.
Cinco tediosos años, en los que él se había sumido en la más profunda desesperación. No era un hombre que llorara, de hecho solía sobrellevar el dolor con chistes y sonrisas falsas pero esta vez le resulto totalmente imposible.
Había pasado un lustro desde que todo el universo se "equilibro" justamente segundos después de que había encajado a su nueva arma en el pecho del titán. Media existencia había desaparecido.
Probablemente fue la ira lo que lo mantuvo cuerdo los 22 días que procedieron al desastre, porque todavía conservaba esperanza de que todos regresarían.
Sin embargo en el momento en el que alzo el Stormbreaker arrancándole la vida a Thanos, toda ilusión que preservaba se esfumó. Su corazón peso como nunca antes, su vida perdió sentido y sobre todo lloro. Lloro por todas las cosas que había perdido en esa década, por ser un fiasco como rey y por la gran mentira que le habían dicho:
"Te aseguro hermano que el sol va a volver a salir"
Los recuerdos lo atormentaron, persiguiéndolo en cualquier sombra y rincón, junto con los susurros de agonía de todos los asgardianos que partieron al Valhalla durante los inicios de su reinado. Ni el encontrarse con Valquiria y la gente que rescato lo salvaron de esa caída al vacío. Se olvidó de todo, hasta de cuanto le gustaba su perfecta figura que comenzó a descuidar.
"Mi niño".
"Los amo mis hijos".
"Mi rey".
"Hermano".
"Thor".
No pudo soportarlo y la única salvación que tuvo antes de volverse loco fue el alcohol. Ah, bendita bebida salvadora que acallaba los alaridos de los muertos, que poco a poco ahogó los recuerdos manteniéndolos a raya lo suficientemente para no alucinar.
No podía permitirse estar sobrio, porque cuando empezaba a recuperarse de la borrachera, solía verlo, con su ropa esmeralda y sus cabellos negros, junto con una mirada de desaprobación.
En pocas palabras la cerveza y el hidromiel con alcohol, lo salvaron.
Sin embargo tuvo que obligarse a dejar esas bebidas el día que Rocket y Bruce fueron a sacarlo a regañadientes de su "pocilga".
Debería decir que ver a todo el equipo y a sus cinco compañeros originales le dio un gran alivio, lo cual no era cierto. Realmente le causó vergüenza que lo vieran en ese lamentable y deplorable estado. No podía soportar sus miradas de repulsión, y personalmente sentía que algunas veces unos lo veían con asco.
Se tallo con brusquedad los ojos tratando de enfocarse en Clint. Ciertamente el plan de viajar en el tiempo sonaba bien. Ese día iban a mandar a Barton al pasado para ver si eran cierta las teorías de Scott y Stark.
Ellos dos junto con Bruce eran los únicos que habían demostrado simpatía con él. Lang era un hombre divertido que podía escuchar sus historias asombrado como niño pequeño. Banner y Hulk fusionados le inspiraban mucha confianza después de lo que vivieron en Sakaar; y Tony se había portado muy amable y comprensivo con él, dejando a un lado su típico sarcasmo e ironía.
Por estar sumido en sus pensamientos no pudo ver el momento en que Clint regreso agitado con un guante de baseball en la mano.
Una cosa era segura: había funcionado. Los Vengadores soltaron suspiros de alivio y satisfacción mirándose unos a otros.
Thor rio para sus adentros observando la alegría de que definitivamente había una solución. Si ellos poseyeran un seiðr todo habría sido más fácil. Si su madre y sus aprendices hubieran estado ahí hubieran resuelto todo en la mitad del tiempo que ellos habían tardado.
Al pensar inevitablemente en Frigga, su corazón latió con fuerza y su respiración se aceleró notablemente, así que sin avisar se fue directo a la cocina para conseguir una cerveza.
