Ya llevaba un buen rato hablando con Manuel, no es tan serio como se ve, pensó que era serio como lo es siempre en clase, al parecer no.
-¿pinta juntada en mi casa después de clases?-propuso Valentín mientras se sentaba en su silla, apoyando sus codos en la mesa.
-tenemos bastante tarea, no podemos.-hablo el de pelo largo negando con la cabeza, Manuel es muy atento con las tareas, si hay tarea, Manuel no sale de su casa, no.
Mateo lo abrazo por los hombros.
-dale Manucho, hacerlo por mi.-y bueno, Manuel no se podía resistir a los encantos de su amigo.
Manucho, ese apodo hizo que varios sentimientos se juntaran en su panza y un pequeño cosquilleo, capaz eran ganas de vomitar.