-¡Yue trae varios guardias necesito que me ayuden a subir a Korra!
-¡¿Qué le ocurrió a mi señor?! -Ella dejó caer lo que traía en la mano y corrió hacia Mako tocando al príncipe y tratando de ayudar al arquero a subirlo por las escaleras-
-Déjalo, solo entre los dos no podremos, trae a los guardias. No sé qué le pasó veníamos hablando y de pronto cayó del caballo.
-Si. -Yue corrió y desesperada llamó a los Betas cercanos a la cocina-
-Vamos, todos ayúdenme a subirlo. -Pidió Mako a los guardias llegando al cuarto principal y dejando sobre la cama al Alfa. Quien no dejaba de tener un gesto de dolor en su rostro- Buscaré a Katara, quédate con él Yue.
-Aquí estaré, ve rápido. -Ella vio a Mako irse y pidió a los guardias salir. Permitirle aire a su señor. Luego, le quitó sus zapatos y aflojó su cinturón. Lo toco y midió su temperatura, entonces se le ocurrió intentar escuchar el corazón de Korra, pegar su oreja del pecho de él. Notando de inmediato lo acelerado y anormal que sonaba. Ella no sabia de medicina pero si tenía un corazón y su corazón nunca se aceleraba tanto o latía tan irregular a la ligera. Yue miro de nuevo a su señor con preocupación. Vio la espada al costado de Korra y decidió retirarla para mayor comodidad. Pero su señor despertó y la tomo por la mano y ella sintió romper todos sus huesos por el apretón, luego el príncipe la empujó con tanta agresividad que ella cayo varios metros lejos de él, golpeando duro el suelo y sacudiendo su cabeza. El golpe casi la dejo inconsciente pero justo en ese instante Katara y Mako entraron a la habitación-
-Que los guardias me ayuden, no sean bruscos con él o lo alterarán y Korra les partirá el cuello. -Los guardias se miraron entre sí y lucieron asustados. Korra se había sentado en el borde de la cama, completamente fuera de si y sin dejar de tocarse el pecho. Gruñir de dolor- Yue, retírate no quiero a ninguna Omega cerca de él en este momento.
-¿Qué le pasa a mi señor? -Pregunto ella-
-Esta pagando las consecuencias de ser un terco ¿Tú estás bien verdad mi chiquilla?
-Lo estoy.
-Entonces retírate, haces esto más difícil para tu señor. -Katara no había tenido que divagar mucho o pensar en los signos y síntomas de Korra luego de por fin poderlo acostar en la cama. El diagnóstico se olía y sentía, se trataba de supresores. Algo que para inexpertos pasaría desapercibido sin un examen físico más profundo. Pero para ella no, sobre todo sabiendo que Korra se los había pedido he ido a conseguir a otra parte. Sin embargo no lo creyó demasiado capaz luego de su advertencia hasta ver cómo el Alfa se debatía entre la vida y la muerte, sentir su corazón a punto de explotar-
-¿Katara qué sucede?
-Mako, ve y busca mis yerbas lo más rápido que puedas. Trae toda la caja. También mis implementos básicos, tengo que escuchar el corazón de Korra con atención. Te los darán las Omegas en la cabaña principal de curación.
-No tardo. -Mako salió de la habitación corriendo prácticamente llevándose por delante a Yue, quien también corrió detrás del arquero buscando ayudarle con algo, para sin mucha demora Asami tomar su lugar afuera de la habitación, ignorante y ajena a lo que pasaba-
-¿Qué te ocurre Naga? Hiciste que nos corrieran de la clase de costura no dejas de llorar y aullar ¿Por qué tanto afán de venir al cuarto? Extrañas a Kor... -Ella quedó quieta de la impresión en la puerta de la habitación luego de abrirla, pues lo que menos imagino al hacerlo fue encontrar a Korra siendo detenido por varios guardias contra la cama- Pero qué...

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La Bestia del Sur
RomanceAsami, una Omega que no actúa como tal y está comprometida en matrimonio, es arrebatada del brazo del compromiso por su mejor amigo Korra. Un Alfa que se convertirá en su esposo y su salvación para darle alas, o no. [KorrAsami]