Red string fate «ls»

Capítulo 19.

"Tú me has hecho mejor de lo que era"

Su cuerpo comenzó a estremecerse producto de la luz que ingresaba por los ventanales del living. Abrió con dificultad sus ojos y se encontró con la imagen valiosa de Harry mirándole el rostro. Louis no evitó sonrojarse al instante, su memoria comenzó a funcionar como una locomotora. El y Harry tal vez no habían llegado tan lejos, pero no significaba que las intenciones de ambos no fueran en esa dirección.

Luego de haber tenido aquel íntimo encuentro corporal, no cesaron en besarse y acariciarse, permitiéndose dormir en medio del salón junto a la chimenea que poco a poco iba apagando sus llamas, al igual que los sentidos de ambos.

—Buenos —Susurró Harry mirando en dirección a los ojos añiles de Louis, el ojiazul tragó con dificultad, sentía su garganta seca y el hecho de no haber dormido con tapas era una señal clara de la congestión que presentaba—

—Hola —le saludó con voz ronca el más bajo. Harry sonrió de lado y se acerco con delicadeza y un tinte de temor hacia el rostro de su cómplice. Louis estaba congelado, no esperaba para nada un saludo mañanero de ésta categoría, pero todo pensamiento cuestionador se disipó al sentir los labios del ojiesmeralda sobre su frente. Cerró sus ojos porque no puedo hacer más que disfrutarlo. No había sido un sueño nada de lo anterior—

—Quieres... ¿Quieres que hablemos? —Se atrevió a preguntar Harry curioso. El ojiazul le miró los detalles del rostro, aunque ya lo había hecho en otras ocasiones, se encontró sorprendido por la belleza tan natural que Harry se cargaba—

—Siento.. que si hablo yo... puedo arruinar todo.. esto —admitió, Louis. Harry asintió con una sonrisa genuina—

—Es decir.. que.. no quieres arruinarlo ¿no? —Louis sonrió— Vale, voy a tomar esa sonrisa tuya como un sí. Voy a alistarme para preparar el desayuno—

—No, espera —Le detuvo Louis, Harry le miró atento—

—Que...¿pasa algo? —preguntó Harry casi sobre el cuerpo del más bajo, era en ademán de salir del sofá. Louis estaba hipnotizado por la gloriosa imagen—

—Bésame. —Demandó con firmeza el ojiazul. Harry pareció no escuchar o entender la indicación, o tal vez si, pero parecía ser muy utópico. Pero antes de que decidiera si preguntarle o no a Louis sobre si podría volver a decir la orden, sintió los labios de susodicho paseándose por la comisura de sus labios.

Harry podría haber sido más fuerte con todo esto, pero no podía pensar con todo el sentimiento abrumador que significaba de tener a Louis exigiéndole por un beso. Y un beso de Louis era suficiente para que Harry cayese como un esclavo que solo quisiera server a su amo. Se permitió acariciar por las pequeñas manos de Louis sobre su espalda desnuda, y el por supuesto, no iba quedar sin el privilegio de tocar la piel de su pajarito blanco.

Un suspiró estremecedor se escapó por sobre los labios de Louis, sumado a un gemido inaudible al sentir las manos de Harry acariciar sus muslos. Harry le miró con ojos glaucos producto de tal excitación. Lo que había iniciado en un inocente beso, se había transformado en la búsqueda de conocer un poco más los límites del otro. Harry lo quería tomar con calma, entendía que Louis era un hombre casado y además de todo el otro rollo difícil que se cargaban, pero al parecer el ojiazul tenía otras expectativas.

—No quiero desayunar... —Musitó Louis mientras sus brazos rodeaban el cuello del más alto—, quiero que te quedes conmigo aquí... sosteniéndome.. no sé que me sucede realmente pero.. eres como un imán que... —

—Louis —intervino con pesar, Harry— vamos a hacer las cosas bien, al menos en esto, vamos a hacerlo bien. —Decía responsable. Ni él se conocía con tanto autocontrol. Pero quería cuidar a Louis, en todos los aspectos posibles—