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Renjun suspiro por quinta vez en el día.

Se sentó solo en el autobús rodeado por otros universitarios, había terminado sus tutorías para la universidad, tenía horarios diferentes a la de las dos alfas por lo que tenía que volver solo a casa.

Debería encontrar otro lugar donde vivir.

No es que fuera tan malo, el lugar era hermoso y no le importaba dormir en el sofá de la sala, además ambos alfa eran amables, pero había demasiadas discusiones, temía el día en que eso se convirtiera en peleas y él no podría hacer nada para detenerlos...pero hoy incluso lo llevaron a la universidad.

No, no podía aprovecharse de ellos solo por ser demasiado amables, tenía que volver a su plan inicial y ser independiente, ellos no podían atraparlo con sus lindas sonrisas y lindos gestos, él buscaría la forma de salir de ese lugar.

Aunque realmente deseaba vivir ahí...

Cuando llego al edifico paso por recepción para poder dar sus datos al recepcionista y entro al ascensor, el elevador era tranquilo, con buen olor, podía distinguir su reflejo en los espejos alrededor.

En cuanto la puerta del elevador se abrió en su piso pudo oler esa pesada fragancia a rosas y a lluvia, era demasiado fuerte, Renjun cubrió su nariz sintiéndose mareado por el olor y camino hacia su puerta pensando que algo estaría pasando, en cuanto entro vio a Jeno arrojar un plato a Jaemin, el pelirosa lo esquivo con éxito pero el plato se rompió en la pared.

—¡Yah! ¡Pudiste darme!—Jaemin grito señalando a Jeno, pero el pelinegro solo gruño.

—¡Eso era lo que quería!—

Jaemin tomo uno de los zapatos del suelo, Renjun pudo ver el lugar destrozado, había varias cosas rotas por todos lados, almohadones tirados, zapatos, ropa...¿Cuánto tiempo estuvo fuera?

—¡Estúpido hijo de...—Jeno grito cuando el zapato que le arrojo Jaemin logro golpear su brazo, pero se detuvo mirando hacia la puerta, Jaemin también miro.

Renjun estaba de pie con la cabeza agachada, aun cubría su nariz, el olor era demasiado fuerte, no podía quedarse ahí por demasiado tiempo, se dio la vuelta cerrando la puerta escuchando una pequeña voz llamarlo con gentileza.

—Ren...—

Cerró la puerta con fuerza y se alejó hacia las escaleras, no podía esperar el elevador o se desmayaría por el olor, era tan fuerte que estaba suficientemente mareado, aunque ahora parecía estar disminuyendo, igual quería alejarse de ahí.

Corrió escaleras abajo y tomo uno de los dos elevadores en el siguiente piso, tenía que salir a caminar o se volvería loco.

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Renjun camino por la calle sintiéndose muy molesto, no lograba entender la necesidad de esos dos estar discutiendo todo el tiempo, miro por la calle, quizás si buscaba lograría encontrar algún departamento en renta y en unos meses podría mudarse.

Por más que busco algún anuncio, no lo encontró, incluso busco algún local que buscara trabajadores, con algo de dinero podría mudarse, pero por más que busco no tuvo éxito.

—Debería volver a casa—murmuro para sí mismo mirando el cielo, comenzaba a ser un poco oscuro, en un par de horas sería de noche y no era seguro estar fuera tan tarde para un omega.

Así que se dio la vuelta, pero eso le hizo darse cuenta de algo aterrador.

¿Dónde estaba?

Miro la calle, los edificios, había caminado demasiado, cerca de una hora o poco más, pero no lograba recordar como volver.

Por supuesto que no [Norenmin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora