Los padres siempre nos dijeron que no hablemos con extraños pero, ¿Que se puede hacer cuando uno de ellos te pedía ayuda?
Había tomado un cuadernillo especial para poner cada uno de mis anotaciones o adelantos acerca de la carta que parecía no tener una explicación de cómo abría llegado hasta mi casa.
Es que, ¿Acaso K y M perdieron el contacto o como es que esa persona no sabía que la otra se había mudado?
Fuí a la cafetería más cercana en busca de un capuchino que saciará mi necesidad de consumir algún producto con cafeína.
Me senté en una de los ventanales que tenía vista al parque mientras tanto me dejaba llevar por todo ese mat de emociones que había llegado a experimentar ese día, de la nada las primeras notas de la Sonata Claro de Luna de Beethoven inundaron el lugar.
Miré en la dirección donde provenía dicha música que había cautivado a cada uno de los que estábamos ahí y a este punto no sabía si se trataba de la música o la chica que tocaba el piano con suma delicadeza que parecía disfrutar mucho lo que estaba haciendo.
Decidí dejarme llevar por un rato y ha era un lado el asunto de la carta, había tenido suficiente estos días y por lo menos necesitaba un breve descanso.
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Salvando Un Corazón.©
Kurzgeschichten« Somos esa salvación que ambos necesitábamos para sanar ». Nate Maxwell solo tiene un objetivo, encontrar a la persona que está detrás de esa carta, la misma que empezó todo, antes de que el tiempo se le fuera de las manos. Cero pistas, ningún indi...