Fuego de hielo [Fríos II]

CAPÍTULO 26

*Capítulo 26*

Descubrí que William y su esposa Christel son alemanes, por eso su acento es extraño y muy bonito al mismo tiempo. También descubrí que su hijo se llama Christopher y es la cosita más linda del planeta, es rubio y sus ojos son azules igual a los de su padre.

Otra cosa que me dejó impactada fue que, el matrimonio de William y de Christel fue arreglado. ¡Arreglado!, Me dejó con la boca abierta y lo más sorprende es que para es ellos es tan normal y común. Es una tradición o algo así.

Son felices, demasiado si soy sincera. Se les nota desde lejos la felicidad que emanan, el amor resplandeciente que se tienen, es… mágico.

Otra cosa de las que he descubierto fue que tanto Jackson como William se conocen por medio de sus empresas y por sus padres. Su amistad es algo increíble ya que no se ven muy a menudo y aún así parece que se vieran todos los días.

Jackson es muy divertido y muy simpático, William por otra parte es más serio pero agradable después de todo.
En cuanto a las mujeres de la mesa, Christel es de lo más sencilla y carismática, es sumamente amorosa en todos los aspectos. Ni hablar de Maydelinne, es la chica más tierna que he conocido y aunque no lo ha dicho, sé que es menor de edad. Ella no pasa de los dieciocho.

Es lindo ver cómo Jackson trata de hacerla sentir cómoda y verla sonriéndole. En cuanto a Logan, él está feliz y me gusta verlo feliz. Creo que su seriedad es solo cuando está en su modo empresario y cuando está con su madre, algunas veces conmigo.

En lo que a mí se refiere, me siento cómoda y es extraño pues no me siento así con personas que apenas conozco, solo cuando conocí a Meg. Ella hablaba mucho.

Me remuevo incómoda en mi asiento captando la atención de Logan.

— ¿Estás bien?— niego.

— Necesito ir al baño— me coloco de pie y disculpándome, prácticamente corro al baño.

El alivio me llena cuando vacío mi vejiga. Frijolito, ¿Qué le haces a mamá?.

Salgo del baño y me encuentro con Maydelinne. La miro a través del espejo y le sonrío, ella me devuelve el gesto.

— ¿De cuando tiempo estás?— cuestiona tímidamente.

— Cinco meses— respondo sonriendo.

— Mamá y papá aprecian mucho a Logan— comenta sonriendo— Yo también lo hago.

— ¿Se conocen hace mucho?.

— Mis padres eran amigos de lo suyos— informa— Solíamos pasar tiempo juntos. Logan, Jackson y yo, era divertido— suelta una risita que me hace sonreír— Me agradas, me gusta que estés con él.

— Gracias— suspiro y observo mis manos — Pensé que serías como Sofía o…

— Su mamá— ríe— La conozco, es muy sería. Sofía es una arpía, no le hagas caso.

— Créeme, en el pasado hice cosas que no debí por escucharla— ruedo los ojos— No quiero nada que venga de ella.

— Eso es bueno— la puerta se abre y Christel aparece junto con su bebé.

— Hola, chicas— sonríe— Preciosa, ¿Me ayudas con este sujeto?— me ofrece a su hijo y gustosa lo recibo entre mis brazos— Tengo que ir al baño.

— Hola, hermoso— May juega con una de las manitos del pequeño Christopher— ¿Qué se siente ser mamá?.

— Es frustrante— dice Christel saliendo de la cabina y acercándose al lavamanos— Tener que orinar cada dos minutos, vomitar todo lo que comes, llorar y enojarte con todos— suspira— Es frustrante, pero todo vale la pena si al final vas a conocer al amor de tu vida— sonríe y carga a su bebé— ¿Niño o niña?.

— No lo sé aún— me encojo de hombros— El doctor dice que por sus medidas puede ser niño.

— ¿Se mueve mucho?— cuestiona.

— Demasiado, empezó a moverse hace una semana— llevo mis manos a mi vientre.

— Este señorito de aquí no paró de moverse en ningún instante— ríe— Puede ser un niño. Será hermoso, si es niña no busques pretendientes — señala a su hijo y sonrío.

— Gracias— acaricio la mejilla del pequeño— Lo tendré en cuenta.

Aprieto la mano de Logan mientras caminamos, observo todo a mi alrededor y me maravillo con lo hermoso que es.

— ¿Por qué sonríes?— Logan tira de mi mano hasta tenerme pegada su costado.

— Estoy muy feliz de que me hayas traído— inclino mi rostro en su dirección— Gracias.

— No tienes porque darme las gracias— besa mi sien— De todos modos no iba a dejarte.

— En todo caso… me divertí mucho— beso su mejilla y dejo que me guíe dentro del hotel.
Cuando estamos apunto de subir al ascensor me detengo.

— ¿Qué sucede?— cuestiona.
— ¿Podemos subir las escaleras?— miro sus ojos.

— Son tres pisos— murmura.

— Por favor— mi voz es suplicante, Logan frunce el ceño.

Asintiendo toma mi mano y nos guía a las escaleras.

— ¿Estás bien?— pregunta, asiento.

— Si, solo… no quiero entrar ahí— suspiro— Llevo haciéndolo desde hace meses y quiero subir las escaleras.

— ¿Alguna mala experiencia?— sonríe.

— Una vez— murmuro— Tenía diez y me sentí morir cuando esa cosa se detuvo… no quiero pensar en eso.

— Está bien— entrelaza nuestros dedos— No más ascensores por hoy.

— Gracias— sonrío y sigo subiendo con delicadeza— Me gustan tus amigos.

— A ellos también les gustas— sonríe— En especial a Christel, dice que nos ve como futura familia.

— Dijo que si tenemos una niña se la guardemos a Christopher— río— Aún no puedo creer que ella y William se casaran por negocios.

— Es más una tradición que un negocio— explica— Viene de familia y ya es un estilo de vida.

— ¿Dejaremos que nuestra hija se case con Christopher?— cuestiono.

— Aún no sabemos si es una niña— comenta y busca la tarjeta para abrir la puerta— Pero debemos tener en cuenta que Christopher no será un mal partido.

— Siempre y cuando a ella le guste— sonrío y él asiente.

— Exactamente— besa mis labios castamente y me deja entrar a la habitación.

Debemos explorar nuevos horizontes. Alemania será uno de ellos.

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¿Les gustó el maratón?.

4/4

Pronto llegará el final de esta hermosa bilogía.

¿Que esperan que suceda?.

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