CAPITULO 12

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LÍA


Siento un timbre molesto en mis oídos, como cuando se taponan con el aire al viajar en un avión, o como cuando voy en mi motocicleta a gran velocidad derrapando curvas a mi paso.

Intento moverme, pero se me hace imposible, mi cuerpo pesa, cada maldito musculo de mi cuerpo esta reacio a obedecer mis ordenes

¡muévete joder! – intento gritar, pero tampoco puedo hablar

- ¿Qué me paso? – me pregunto, no recuerdo nada

-mira, está despertando – escucho que hablan a mi lado

¿papá?

-iré a llamar a Zoé – otra voz

¿James? 

Intento mover mi mano, esta vez por fin lo logro, levemente, pero siento que es así

-aquí estoy hija, mírame amor, despierta – hablan tomando mi mano, definitivamente es mi papá

-ummm – carraspeo al sentir mi garganta seca y rasposa

-tranquila, Zoé ya viene y te daremos agua – susurra sobando mi brazo de arriba hacia abajo

- ¿despertó? – esa es la voz de Zoé
-eso hace – responde papá

Mis parpados se abren un poco pero inmediatamente los cierro debido a la fuerte luz blanca que me incomoda, inhalo aire y siento el olor del alcohol

- ¿lía? – pregunta Zoé a mi lado

Asiento levemente, todo mi cuerpo duele

- ¿Qué ... que me hicieron? – susurro intentando recordar que paso

-te inyectaron un calmante amiga – responde esta

Los matare

-agua por favor – pido casi rogando

Llevo mi mano a mi cara y hago el intento de tapar mis ojos para poderlos abrir sin que la luz me ciegue, James, Zoé y mi Papá me miran con una sonrisa triste

-te ayudo a sentarte – dice James llegando a mí, con suavidad me levanta un poco y pone varias almohadas en mi espalda

Zoé me pasa un vaso con agua y me ayuda a beber de este, gimo al sentir la sensación en mi garganta, que delicia

- ¿Cómo te sientes? – pregunta papá

-como si hubiera tenido un accidente – rio en respuesta y los tres me miran como si tuviera tres cabezas

Accidente … IAN

Mis ojos se abren al recordarlo todo, tomo fuerzas de donde no las tengo e intento levantarme de la cama

-no, amor no, tranquila, no te muevas – dice papá reteniéndome en la cama

-no papá, Ian, necesito verlo, él … él – me rompo ante la mirada de las personas que amo, lloro desconsoladamente, papá me abraza – fue mi culpa, todo esto es mi culpa – sollozo cada vez mas

-calma cariño, calma – susurra papá mientras soba mi espalda

Ian no pudo dejarme, no pudo, no

-Zoé – la llama James

Ella lo mira y se acerca a mi

-amiga – habla, pero no la dejo continuar

Papá me deja libre un momento y niego con mi cabeza

-él está bien, ¿verdad?, dime que si por favor, Zoé, por favor – hablo rápidamente sin poder controlarme

-amiga, tranquila – se acerca apaciguadora a mí, niego y rechazo su toque

-no me pidas que este tranquila joder – grito desesperada

Mas lagrimas surcan mis ojos y se me dificulta respirar

-él está bien – responde evitando que me desmaye – se encuentra estable – dice tomando mi cara haciendo que la vea a los ojos

Sus ojos son sinceros

-júralo – susurro

-lo juro, Lía – responde calmando un poco mi dolor

Asiento sin poder salir de mi estado nervioso, mis manos tiemblan y se me dificulta respirar, estoy teniendo un ataque de ansiedad y Zoé lo nota al ver en mis ojos

-por favor salgan, necesita estar sola – ordena y James saca a papá casi a rastras

-mírame Lía – pide cuando mis temblores incrementan de fuerza

-no puedo parar – digo sintiéndome mareada

-respira, vamos amiga, respira, no te desmayes por favor – ordena y asiento débilmente

Inhalo y exhalo varias veces con mis ojos cerrados, intento relajar mi cuerpo y funciona poco a poco

-eso es, toma agua – obedezco y tomo el vaso

Esta vez mis manos tienen un temblor demasiado leve

-eso es, tranquila, es una reacción al calmante, estas bien ¿vale? – dice acomodando un mechón de mi cabello suelto tras mi oreja

- ¿Por qué me aplicaron esa mierda? – gruño ofuscada

-fue orden mía, lo siento, era la única forma para poder atender a Ian, no podía estar en dos lugares al tiempo – se disculpa y la fulmino con la mirada

-solo ruego porque despierte pronto – sollozo y me abrazo a mi amiga


***


ZOÉ

4 horas antes


CODIGO AZUL

-inyéctale esto, no preguntes – le ordeno a Lorel, una chica de mi grupo y le señalo a Lía quien sale a rastras entre los brazos de Liam

Acudo al llamado del doctor Mckonill y llevo el desfibrilador sin perder tiempo, lo cargo y le aplico gel a las paletas en cuanto el doctor me lo ordena, Michel, otra enfermera llega tras de mí y toma la máscara de reanimación, se ubica sobre la cabecera y le suministra aire a Ian mientras se prepara la otra descarga

-administra un miligramo de adrenalina – ordena el doctor mientras da la segunda descarga

Inyecto rápidamente el medicamento y espero la nueva orden

-no responde – habla la enfermera

Niego sin poder aceptarlo

-vamos Ian, vamos, reacciona – intento hablarle

-una más – dice el doctor y cargo el desfibrilador

-Ian vamos, no te rindas, vamos, yo sé que tú puedes – hablo desesperada al no obtener respuesta

-vamos – grita el doctor Mckonill mientras da la última descarga

Los tres en el cuarto miramos fijamente hacia el monitor de los signos, no hay cambio, ninguno

-no, por favor, no te puedes rendir – ruego mirando a Ian

Bip … bip … bip

-lo tenemos – anuncia el doctor Mckonill y sollozo

-joder – camino hacia atrás con una opresión en mi pecho, funciono, está aquí

-excelente trabajo Lorel, jefe – felicita con un asentimiento de cabeza - ve a ver a tu amiga – dice este y obedezco

Salgo con más lágrimas en mis ojos, no las puedo contener, casi lo perdemos

-no señorita, dígame que no – susurra Liam al verme salir

Niego sin poder hablar, él niega interpretando mal mi reacción y le muestro mi mano para que espere

-está bien, ya paso – logro responder entre lagrimas

Inmediatamente sus hombros se relajan y una lagrima rueda por su mejilla

-ayúdame a llevarla a un cuarto – pido y asiente

Carga a Lía desmayada en sus brazos, camino hacia el cuarto seguido y abro la puerta, entro al ver que éste se encuentra desocupado y ubicamos a Lía en la cama, paso una sábana sobre su cuerpo y espero paciente a que mi suegro y marido lleguen para que cuiden de ella

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NO TE RINDAS #3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora