Capítulo 7 - Oki Doki

588 60 3
                                    

Noah estaba sentado en el puf frente a mi cama, mirándome fijamente.

 -¿Y bien? ¿No vas a explicarme que haces aquí? - Pregunté después dos minutos de miradas que parecieron horas. Sonrió de lado, mostrando uno de sus hoyuelos. Había prendido las luces de mi habitación, y cuando me volteé él ya estaba sentado ahí.

-¿Por qué me tiraste sal? - Preguntó frunciendo el ceño, aun sonriendo

-Yo pregunté primero - Dije a la defensiva mientras cruzaba los brazos sobre mi pecho. El rodó los ojos.

-Bueno, le conté a mi hermana Abby que te había ayudado el otro día, entonces ella te espió por dos días y cuando consiguió tu dirección, me obligó a visitarte - Dijo como si lo supiera de memoria, encogiéndose de hombros para sacarle importancia -Ahora, ¿Por qué la sal?

- ¿Por qué me espió? - Pregunté, frunciendo el ceño

- Yo pregunté primero - Dijo, imitándome.

Agh.

-Yo... - Alzó las cejas, esperando una respuesta - Ehh, yo... Yo quería... -Oh sí, eso. Yo solo pensé que eras un ladron y quería...¿Matarte? ¿Maldecirte? ¿Con sal? Sí, eso hubiera estado bien. - No lo sé, por primera vez en mi vida presté atención en clase y fue lo que "absorbí" - Dije rápido haciendo las comillas con los dedos, y citando a la profesora de historia. Noah asintió tras haber comprendido. Claro, y yo era la rara... - Mi turno

-Esto se está transformando en un juego de preguntas y respuestas - Dijimos al unísono. Yo le fruncí el ceño, mientras una sonrisa se escapaba de sus labios.

-¿Por qué tu hermana quería que me espiaras?

-No lo sé. Se mete mucho en la vida de otras personas. Es así desde pequeña.

-¿Tiene 8 años? - Pensé en Zed

-Si - Dijo examinándome, aunque sin parar de sonreír - ¿Cómo lo sabes?

-Ni idea, mi hermano tiene ocho años.

Él iba a responder cuando Cual entró a la habitación. Definitivamente hay que cambiarle el nombre al pobre perro.

-Hola Cual - Dijo Noah, de mala gana.

-¿Cómo sabes su nombre? - Recuerdo que el pero casi lo muerde, pero... ¿Acaso Cual sabe hablar y le dijo su nombre y...

-Por el collar

-¿Qué? - Pregunté desconcentrada

-So -Gritó Zed desde su cuarto y Noah soltó una risita

-No es gracioso - Le dije, cruzándome de brazos y tirándole más sal - Además, Cual no tiene collar

-Si - Dijo frunciendo el ceño y sacudiéndose el cabello con la mano. Ups.

Me fijé y si había un estúpido collar en el cuello del perro. Zed lo debe haber comprado hoy.

Gran día para hacer las compras, ¿No, Zed?

-Debo irme - Dijo levantándose, después de varias preguntas más - Abby debe estar preocupada

-¡No me dejes con ella! - Gritó Zed mientras corría hacía mi cuarto y se quedaba parado en la puerta. ¿Yo también te amo Zed? Lo miré amenazante, y se acercó hacia mí y planto un beso en mi mejilla.

- Perdón, pero Abs está sola en casa

¿Prefieres a Abby antes que a esta hermosura hermosamente hermosa? Bueno, así quedamos Noah, así quedamos. No se desperdicia a las personas del Wal-Mart.

Once Upon A DreamDonde viven las historias. Descúbrelo ahora