Once Upon A Dream

Capítulo 8 - ¿Nervioso?

-¿Cuándo los conociste? - Preguntó Tommy, con las manos entrelazadas sobre la mesa.

Sus padres necesitaban una niñera. Sus padres pensaban que yo estaba siendo su niñera.

¿Yo? ¿Trabajar? Ya quisieras...

Acababa de empezar el verano y pensaban que yo estaba haciendo...Cosas.

Después de encontrarnos en el parque me guio hasta su casa, y se sentó detrás del escritorio.

-Hace unas dos semanas -Respondí. Él había estado investigando sobre la psicología -En otras palabras, les preguntó a sus padres- y quiso formalizarlo.

Los niños de hoy en día...

Le había estado contando de las últimas semanas que no nos vimos, desde que me quitaron el yeso, hasta haber conocido a Noah y Abby.

-Quiero queso - Soltó de golpe. Fruncí el ceño mientras lo veía levantarse e irse a la cocina.

¿Y mi terap... A quien engaño, yo también quiero queso.

Me paré de un salto y lo seguí a la cocina.

-¿Tommy? - Pregunté con la boca llena de queso -¿Qué más quieres hacer?Digo, además de comer.

Se quedó pensando unos segundos para luego encogerse de hombros y meter más pedazos de queso a su boca. Puse mis ojos en blanco.

-Vamos Edison, tu puedes, ¿Qué haces cuando te aburres?

-¡Palmaditas!

Oh, genial.

***

-¡Llegué! -Grité mientras abría la puerta

-No están en casa- Dijo Zed sin despegar su mirada de la tele- Pero, te dejaron una nota en la cocina.

¿Una nota? ¿Enserio? Podrían habérselo dicho a Zed.

Arrastré los pies hasta la cocina y encontré la nota de la que tanto me han hablado.

Hola cariño, hoy a las 4pm cuidarás a Zed y a su amiga Abby. Te amo

¿Yo? ¿Trabajar? ¿Con niños? ¿Reales? ¿Otra vez?

Sigue soñando, cariño. Ya hice de niñera demasiado por hoy, y las palmaditas no son divertidas.

Un segundo, ¿Abby? ¿Abby, Abby la hermana de Noah? Oh oh

-¡Zed! ¿Abby? ¿Cómo convenciste a Abby de que viniera?

-Estuvimos hablando las últimas dos semanas, y le ofrecí venir, pero mamá me dijo que podía si tú eras la niñera con Noah.

-¿Veré a Noah y a Abby esta tarde?

-No esta tarde, en... - Se fijó en su reloj
-27 minutos

-¡¿Qué?!

-So -Dijo divertido -Tendrías que pensar antes de hablar si te molesta tanto.

Rodé los ojos y me uní a él.

-¿Abby te dio su número? - Pregunté subiendo y bajando las cejas repetidas veces, a lo que el solo asintió sin mirarme -Zed, no me entregues todo tu cariño a mí, compártelo. -Bromeé haciendoun gesto con los brazos.

Si alguien había heredado las miradas asesinas de mamá, definitivamente había sido Zed; yo, en cambio, parecía un pingüino recientemente atropellado por una grúa de camiones llena.

El sonido del timbre me despertó.

-¿Cuándo me quedé dormida? -Pregunté bostezando.

-Hace -Se fijó en su reloj -27 minutos -Rodé los ojos -Yo voy - Dijo Zed, parándose para abrir - ¡Dis! ¡Llegaron Abby y Noah!