Problemas para un dios

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Pasaron tres días después del castigo de los menores, la mayoría de santos, espectros y Marinas habían vuelto del viaje, aunque claro aún faltaban algunos, pero eso no era preocupante, tal vez solo estaban disfrutando del viaje.

Al ser mediodía los habitantes del santuario se encontraban comiendo en sus casa o templos, en uno de ellos que les pertenecía a los espectros de Hades, los dos jueces del infierno restantes y algunos espectros de mayor rango escuchaban atentamente al dios del sueño como ocurrió el segundo castigo de los niños caballeros.

-Entonces el Leo le gritó que "Actuaba como un chiquillo de 5"-decía burlón mientras masticaba su comida-Pero hay que ser sinceros Sagitario parece de 14 pero actúa como un niño berrinchudo de 3 años-se burlaba el rubio.

Los espectros reían por lo que les contó Hypnos, sobretodo por cómo les iba mal al dorado y los de bronce, los únicos que no reían era Hades que se encontraba leyendo un periódico y Thanatos.

El dios de la muerte suspiro cansado y decidió retirarse de la mesa, su hermano se dio cuenta de ello asi que decidio seguirlo, pronto llegaron a la salida del templo donde se hospedaban, ahí habló con su gemelo.

-Hey Thanatos ¿Que ocurre no has terminado tu comida?-dijo acercándose a su hermano.

-Eso debería preguntarte yo, no te entiendo hermano, hace unos días no parabas de hablar sobre Aioros, que te cautivo, que no se que no se cuanto, y luego resulta que casi lo matas, además que lo tratas como la misma mierda ¿Que paso?-.

-Hermano cuando recuperes los recuerdos entenderás la situación-.

-¿Y por qué no ahora? Aunque no tenga mis recuerdos ¿Sigo siendo tu hermano no?-.

Hypnos se quedó callado en ese momento, tenía razón en  eso él era su hermano aun sin recuerdos, pero no podía evitar pensar en como este parecía un humano, estos seres que tanto aborrecen ambos y que ahora su gemelo no le parecía molesto parecer uno.

El menor de los gemelos suspiro rendido ya entendía lo que pasaba.

-Es por que actuo como un humano ¿verdad?-dijo sorprendiendo al rubio-¿Tanto los odias como para odiarme a mi?-.

-¡¿Que?! ¡No porsupuesto que no!-.

-Entonces ¿Por que actuas frio con migo? ¿Por que casi no hablamos? ¿Por que me tratas como si fuera un tonto? Hermano hay veces en la que quisiera que nunca hubieras descubierto que somos dioses-.

-No digas tonterías Thanatos, cuando eramos humanos teníamos que huir o buscar alguna manera de conseguir dinero, pero ahora hay gente que nos sirve y vivimos con lujos-.

-No lo se, pero siento que ser humano no es tan malo como dices-.

Sin mas que decir se fue del templo dejando a su hermano con la palabra en la boca.

….

-¡Y luego me dijo que hablaba como un anciano!-se quejaba Aioria mientras comía.

-Bueno en realidad si hablabas como uno, creo que peor que Shion-se burlaba Milo.

Así las risas se llenaron en el lugar, todos los caballeros de oro se encontraban escuchando el relato, bueno casi todos, Dohko decidió hacerle compañia al patriarca mientras que Aioros aun no iba por su comida.

Sin embargo también eran acompañados por los generales marinos que fueron invitados por parte de Kanon a excepción de Isaac que se encontraba castigado.

-¿No creen que fueron muy crueles? Digo ellos no fueron los que hicieron la llamada que causó escándalo-opino Sorrento.

-Cariño tal vez no lo hicieron, pero eso niños no tiene por que portarse así, son caballeros y tiene  que actuar como tal-dijo Kanon que abrazaba al general marido de la sirena por los hombros.

Ya nada es como antesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora