Una Segunda Oportunidad

Capitulo 12:De la Amistad al Amor

Capítulo 12

Cuando Naruto se había ido a estudiar a una universidad extrajera, sus padres habían optado por abandonar el país también de forma definitiva para evitar que Naruto regresara y se enterara que Hinata estaba en prisión.

Habían vivido tranquilos junto a él hasta la noche que Naruto desaparecido.

Kushina llamaba insistentemente al celular de Naruto sin lograr comunicarse con él desde la noche anterior en la que debía haberse presentado porque Konan su casi novia, iba a traer a sus padres para cenar juntos y tratar de presionar a Naruto para que formalmente fueran novios.

Los padres de Konan eran una pareja bastante mayor casi parecían sus abuelos en lugar de padres por la diferencia de edad con Konan.

Eran muy religiosos y bastante estrictos con Konan su única hija.

La madre de Konan se había conocido con Kushina en la iglesia, y se hicieron amigas en poco tiempo.

Konan siempre acompañaba a sus padres a la iglesia y para Kushina resultaba encantadora.

Konan era amable y popular en la comunidad de su iglesia, cantaba en el coro y tocaba con habilidad el piano y la mayoría de veces leía los textos bíblicos durante las reuniones religiosas.

Se había convertido en policía, porque su padre había trabajado en dicho oficio, pero trabajaba en el área administrativa porque no le gustaban las armas.

Eran la familia ideal ante los ojos de Kushina y por ello presento a Konan con Naruto y planeaba encuentros supuestamente casuales entre ambos.

Konan le había confesado a Kushina que había estado interesada en Naruto desde hacía tiempo atrás, y le pidió ayuda para conquistarlo.

Ambas confabuladas y teniendo de su parte el despecho que atravesaba Naruto terminando enredándolo con pequeñas trampas para que accediera a tener un noviazgo semi serio con Konan.

A raíz de esa relación que apenas iniciaba los padres de Konan estaban verdaderamente molestos, porque su hija era quien llamaba a Naruto y quien tenía que buscarlo, lo que más les enojaba recientemente era que ella al salir del trabajo ya no iba a casa directamente, sino que pasaba a buscar a Naruto a su trabajo y de ahí se iban a cenar a la casa Uzumaki.

Lo único que le reconocían a Naruto era que la acompañaba de regreso a casa y no se iba hasta Konan entrara a la casa y saludar a sus padres brevemente, pero no había otros gestos de Naruto hacia su hija que les diera certeza de que Naruto convenía a su hija.

Aquella noche en que iba a cenar juntos ellos querían hablar seriamente con Naruto. Pero él no apareció.

La cena había sido un desastre tanto para los padres de Naruto como para Konan porque ahora sus padres estaban más enojados, Naruto los había dejado plantados sin ninguna explicación.

Minato fingió recibir una llamada e invento que Naruto le había llamado para disculparse porque un cliente lo había solicitado a última hora por un problema urgente.

Los padres de Konan no se fueron muy convencidos, pero no les quedaba más que creer en lo dicho por Minato.

Konan estaba muy enojada, aunque lo disimulo ante sus padres y suegros, ella tenía el presentimiento de que había una mujer involucrada en la extraña desaparición de Naruto.

Esa mujer era ese "fantasma" que se interponía entre Naruto y ella siempre.

Una enemiga oculta en la sombra, pero presente en los pensamientos de él.

Recordó que una vez al besarlo Naruto pronuncio el nombre de aquella mujer y al mirarla de nuevo lucia sorprendido como si se diera cuenta que no era aquella mujer quien lo besaba y se alejó corriendo diciendo varias veces "lo siento".