Sr. Mancini

La fiesta ∆

Me quede en el departamento pensando en lo que hice, no se si debí o no decirle algo así, pero lo hice, confíe en él... Ahora existe la posibilidad de que no lo vuelva a ver y eso me retuerce el estomago, no quiero pensar en eso, no quiero obsesionarme con esa idea, el llama insistentemente pero tengo miedo de escuchar algo que no pueda soportar.

No quiero pensar que acabo de descubrir que estoy enamorada y que sus siguientes palabras sean, no podemos vernos mas, no quiero verte mas, se acabo. Seria irónico si pensamos en cuando empezó.

Daniela tiene cumplir horas en el hospital y yo necesito hacer algo, estar echada en esta cama llorando, no me va a ayudar en nada.

No... No voy a dejarme golpear y atrapar otra vez por ese trauma.

Marco el numero de Lana y al tercer pitido contesta.

- Hola Beck... ¿Como estas?

- Lana... ¿Te llego el correo de UCLA? - abordo una conversación esquivándo lo obvio que es que necesito compañía.

- Ammm... Si, dos semanas mas, que horror, ya olvide todo sobre todas las materias - ríe

- Bueno, pensé que deberíamos hacer algo... Juntas.- casi balbuceó.

- ¿Fiesta?

- Si algo así.- no era lo que tenia en mente pero...

- Las chicas del Pole Dance tienen algo organizado para esta noche, sera divertido ¿vamos? - suena mejor que seguir aquí.

- Vamos, ¿paso por ti?

- Si, te envió dirección.

- Vale, estaré en una hora.- respondo mas animada.

- Nos vemos, muñeca.

Me prepare ropa provocativa, poco formal pero muy chick, ondule mi cabello, me puse mi body y un vaquero de color claro con botas negras.

Saque el coche que ya tenia muy abandonado, arranco y dejo la dirección de Lana en el indicador.

Estacione frente a su casa y pocos minutos mas tarde salio, sube al coche y besa mi mejilla.

- ¡¡¡Así que... fiesta!!! - ríe, ingresa una dirección en el indicador, pero este parpadea.

- ups, no se que hice.- dice riendo, reinició y arrancó el coche.

- y... ¿Que has estado haciendo? Becky.- dice Lana buscando algo en su bolso.

- bueno... No mucho, e pasado bastante tiempo en casa con mi tia.

- y yo con Chad de la clase Legislación dos.- sonríe traviesa.

- oh... Así que ya atrapaste a alguien.- festejo...

- si, algo así... No funciono con El chico que te mencione de la escuela, era muy pesado y lo mio es la libertad.- se encoge de hombros.

- ¿que hay de ti? - pregunta.

- ¿si conocí a alguien? - asiente, lo dudo... Obvio que conocí a alguien y vaya que lo estoy conociendo, pero no creo que sea adecuado mencionarlo ahora, es una chica agradable y amable, pero necesitamos conocernos mas.- No lo se, algo así.- respondo procurando que no suene importante, volteo a verla luce impresionada.

- tu siempre me sorprendes Becky.- dice sonriendo, conducido por veinte minutos hacia las afueras de la ciudad entrando por un camino que a primera vista da escalofríos por lo abandonado que luce hasta que llegamos a una finca diez veces mas grande que la casa de Alex o unas cinco mas grande que la casa de mis padres.