MÉXICO en la U.A (Kirishima × Male Reader)

Festival.

Un pitido salió de algún lugar en la arena y todos los alumnos de primer curso salieron disparados al pequeño pasillo por dónde empezarían la primera prueba.

— No chinguen, ¿Quién me agarro el culo? — Juan se detuvo entre tantos alumnos apretados, observo a una alumna de cabello castaño que se agachó entre la multitud — Pervertida — No sabía si había sido por error o no, pero de qué se lo agarraron bien, se lo agarraron bien.

Pasar por el lugar era difícil, había más alumnos de los que pensaba y todos se empujaban entre si para salir del lugar, casi no podía moverse y si lo hacía tenía que empujar a los demás o pisarlos. Si se detenía a pensar podría aplastar a su compañero Mineta, era demasiado pequeño y aunque podía moverse mejor era más probable que algo así le sucediera, se compadeció de él.

Agradecía haber leído tantos libros de tantas culturas, había salido del lugar volando sobre la cabeza de todos, se había transformado en un fénix y había logrado salir del lugar, justo a tiempo pues cuando miro atrás solo pudo ver la enorme entrada congelada.

Todoroki no tardó en salir de ahí, fijo su vista en el ave roja que iba en la delantera y corrio para tratar de alcanzarlo. Seguramente era el único que se había dado cuenta de quién era, lo supo cuando el locutor grito que él era el primero en salir.

A Juan no le dió importancia y continuo con su vuelo, casi fue derribado por una bola morada que le había alcanzado, volteo la vista para ver que ocurría. Mineta le estaba lanzando partes de él a Todoroki y por error casi recibe una, suspiro y volteo la vista en su camino...

¡Zaz!

El ave salió volando, rompiendo la transformación y dejando caer a Juan de sentón en el piso, había sido golpeado por uno de los enormes robots.

— ¡Pero qué es esto, el ave roja era un estudiante. No tengo registros de que alguien pueda transformarse en ave, pero eso a sido de locos! — Juan quedó aturdido en el suelo, Todoroki ya lo había alcanzado.

— Son los Robots del examen de admisión — Susurro antes de levantarse, aún estaba mareado y podía asegurar que sangre salía de su nariz.

Todoroki parecía no tomarle importancia a lo que decía, miro al atacante como si no fuera gran cosa y lo congeló, cruzó como si no fuera la gran cosa.

— ¡Podemos pasar por debajo! — Los alumnos comenzaron a correr de amontones siendo solo retenidos por una pared de tierra que se creo frente a ellos.

— ¡Los congeló cuando había movimiento, van a caer. No sean pendejos! — Tal como lo predijo paso, Juan estaba aliviado de que nadie hubiera salido herido o eso pensó hasta que Kirishima salió del robot.

— ¡Ese bastardo me las pagara!

— Todoroki anda de mamón, ¿Qué esperabas? — Juan había logrado estirar su cuerpo y subir hasta arriba, disfruto de la escena entre Kirishima y un tipo de otra clase — ¡Izuku! — Llamo a su amigo que parecía estar teniendo problemas, ya luego llegaría hasta la delantera, ahora debía de asegurar que su amigo pasará la prueba.

Picos enormes de tierra salieron del suelo atravesando a varios robots por sorpresa, los alumnos empezaron a atravesar el área, Juan había acabado con la mayoría.

Miro a su amigo pecoso, los dos asintieron y continuaron corriendo, bueno Juan volvía a transformarse en ave para llegar lo más pronto posible al siguiente obstáculo, uno menos difícil que el anterior.

Todoroki ya están ahí y solo le dirigió una mirada de odio a la enorme ave que volvió a mutar en su compañero, realmente esperaba que no avanzará a la siguiente prueba.

Juan corrió hasta saltar en el precipisio, cayo durante unos centímetros y un agujero se abrió, entro en el y apareció del otro lado. Le dedicó una sonrisa a su amigo bicolor y continuo corriendo.

— Con una chingada — Guadalupe entrego dos obleas a su gemela. Había apostado a que su hermano no lograba abrir el portal y terminaba estrellado en el suelo, claro está que había perdido.

— ¡Es un placer hacer negocios contigo! — Metió parte del dulce a su boca con una enorme sonrisa.

— Cierra el osico.

Dentro de la prueba Juan sentía que estaba por vomitar, nunca antes se había transportado a el mismo por uno de los portales o mejor dicho nunca había abierto uno tan grande y de recorrido largo, siempre creaba pequeños con los que solo podría llegar a pasar un lápiz o un rollo de papel higiénico. Pa'que mentir, por eso había aprendido esa singularidad, le facilitaba las cosas cuando no había con que limpiarse, por eso nunca la había llevado a algo tan extremo.

Por eso Juan sentía que volvía a vomitar, quizás lo hiciera cuando terminara la carrera.

Su tatuaje en la nuca empezaba a cuartearce, no debía sobre pasar un poder que no era suyo y que no sabía manejar en fuerza mayor. Las grietas se notaban diversas en la marca de reloj.

Freno con fuerza al ver la próxima prueba frente a él, por el extraño ruido que venía por debajo de la tierra pudo suponer que había bombas debajo.

Se hubiera transformado en ave para cruzar, pero su brazo había sido levemente herido cuando el robot lo derribo y había sido un martirio volar de la primera a la segunda, no creía poder volar sobre todo el campo y si lo hacía lo más probable es que terminara callendo y lastimando se más.

Usar los portales no parecía mala idea, pero apenas soportaba el dolor estomacal y el ardor punzante de su nuca.

Confiaría en oído y atravesaría el lugar.

Los demás no tardaron en alcanzarlo, para su suerte ya iba a medio camino.

— ¡Puto alebrije quítate del camino! — Apenas pudo esquivar a Bakugo y evitar pisar una bomba.

— ¡No estes chingando Katsuki! — Ambos comenzaron a empujar y a avanzar.

Pronto los alcanzo Todoroki y los tres comenzaron una discusión, Juan estaba por congelar a los dos y dejarlos en un bucle de tiempo aunque no pudiera seguir en el festival, cuando Izuku atravesó los cielos con ayuda de una enorme explosión.

— ¡Están lloviendo angeles! — Logro que Bakugo soltará su cabello y que Todoroki dejara su cuello, aprovecho la distracción y que estaba en una separación considerable entre las bombas, se convirtió en topo y escarbó hasta llegar fuera del campo minado — ¡Hasta la poxima!

— ¡Maldito bastardo!

Escucho las bombas, el frío y los pasos de los chicos detrás de él, apresuro el paso con el Quirk de doña Maggie y cruzo el final de la
carrera teniendo a Izuku detrás de él.

Le sonrió a su amigo y le dió las felicitaciones, luego se giró y empezó a dejar salir una sustancia blanca y espesa.

— ¡Quetzali-kun, ¿Estás bien?!

— A este paso la abuela va a terminar ganando — Susurraron ambas gemelas al ver que su hermano había roto algo.

Festival Parte dos.