La familia Banz-Bourne

¡Una semana sin escuela!

Habían pasado unos días desde el incidente del videojuego, las cosas habían transcurrido en casa como si nada hubiese pasado. Camila y Teresa se habían graduado de la universidad hace unos días (Camila de contabilidad y Teresa de veterinaria).

Estaba caminando sola por el patio de la secundaria cuando vio a un chico alto y delgado, con cabello negro y ojos de color café. Ese chico se llamaba Kyle, era una persona bastante débil de salud, pero no se dejaba molestar por nadie y eso me gustaba.

--Hola Kyle ¿cómo estas? -dije con una amplia sonrisa. Estaba apunto de responderme cuando sentimos un puñetazo y alguien gritar, nos miramos mutuamente y corrimos a ver que pasaba, unos chicos estaban golpeando a Samu.

--Oh dios mio kyle tenemos que ayudarlo -decía mirando la escena, siempre fui una chica bastante peleadora, en mi niñez había estudiado karate y otras artes marciales así que sabía muy bien cómo defenderme. Miró a Kyle por un momento parecía que se sentiría intimidado por eso, pero yo sabía muy bien que él odiaba todo tipo de bravucones por lo que sin previo aviso se lanzó a la pierna de uno de los bravucones, el nunca demostró tener habilidades físicas pero lo havía bastante bien.

--¡¡¡Hey Déjenlo!!!- dice con su voz grave mientras que daba una ligera patada en la parte trasera de la pierna de quién sostenía a samu.

Yo también corría y me lanzaba sobre uno de los bravucones tirándolo al piso y pateando su entrepierna. Kyle estaba sentado sobre la espalda de uno de los chicos y se mantenía agarrando los dos brazos poniéndolo en su espalda mientras que lo mantiene en el suelo. Veía otra vez a Kyle, sabía que él era débil por lo que temía que no pudiese con la fuerza del bravucón. De repente ve que Kyle no podría mantener la fuerza en ese candado que hacia soltando sus brazos para luego caer y empezó a ser golpeado por el bravucón.

--¡Oye déjalo! -me lanzo contra el chico tirandole de los pelos y mordiendo su oreja fuertemente hasta sacarle sangre. Podía ver a Samu intentando abrazarse al último de los bravucones para defenderse, peor este lo detiene con su mano riendo a carcajadas, era impresionarte ver a Samu haciendo eso ya que él no tenía ningún conocimiento en peleas. De repente se escuchan los gritos de los profesores, me bajo del chico mientras este se tapa la oreja ensangrentada.

-- ¡Se acabaron las peleas! -dijo un profesor -¡Todos a dirección!- dijo otro. Se escucharon algunos murmullos que decían "es su culpa" o "ellos empezaron" o "ya veras a la salida".

En el despacho de la directora:

La directora se detuvo por un momento, tenia a 6 alumnos parados frente a ellos, uno con una nariz rota, otro con una oreja mordida y con sangre, y otros 4 con algunos golpes pero estables. Sabía lo que había ocurrido perfectamente, miro a kyle y habló.

--Muy bien, no necesito que nadie me explique nada, Ustedes tres- mirando a los bravucones* están suspendidos por una semana por molestar a el estudiante Kyle. Nosotros nos miramos por un rato, ¿molestar a Kyle?

--Directoria, ellos no molestaron a Kyle, molestaron a... -intenté decir pero me detuvo para decir algo.

--No necesita decirme nada señorita, tengo muchos años de experiencia y se lo que ocurrió -carraspea un poco y me mira a mi y a Samu* en cuanto a ustedes, entiendo que quisieran ayudar a su amigo pero no fue la manera, ustedes también están suspendidos una semana.

Se escucharon varias protestas en la habitación y a Kyle intentando explicar lo sucedido.

--¡Silencio! -dice golpeando la mesa- ahora todos se quedarán aquí mientras yo voy a buscar los papeles de la suspensión y luego llamaré a sus padres, usted señor Kyle puede irse si quiere.