Es mejor rozar tu piel, sentir tu miel y juntos soplar las velas del pastel. Dejarse llevar por el vaivén, contar instantes vividos y que lleguen a cien.
Saltar al vacío oscuro mientras de las penas me río. Desembocar en tu mar. Una y mil veces volver a empezar, haga calor o frío. Amanece uno nuevo día para zarpar, solo con respirar... por tus... lágrimas... puedo... bucear.
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RELATOS DE UN MICROMUNDO
Short StoryHistorias cortas, breves, de un mundo imaginario tan real como la propia ficción
