Di que recuerdas

165 20 11
                                    

Respiraba aceleradamente. Sentía su cabeza dando vueltas y todo su cuerpo en pánico.

Blood Spider enterró sus dedos en su caballera mientras que caía de rodillas en el suelo de la celda que compartía con Killer Tiger. Dos días habían pasado desde la última vez que la había visto, ella fue a la enfermería después de haber sido apuñalada por Sable, y a él no lo habían dejado salir de la celda.

Pero desde que lo habían vuelto a llevar a su celda, había estado teniendo visiones. Recursos.

No sabía qué lo había causado. Tal vez el miedo causado por haber visto a su compañera ser atacada en frente de él. El miedo de perderla. El miedo de no haber podido salvarla.

Junto con sus recuerdos llegaban emociones: miedo, desespero, ira, tristeza, amor.

Sentía que su cabeza iba a explotar con cada recuerdo que llegaba de repente a su mente. Su mente era como una televisión pasando de canal en canal rápidamente, imágenes aparecían de repente, algunas borrosas, otras claras.

Jadeó fuertemente cuando a su mente llegó la imagen de una bella mujer morena, de cabello rojo, usando un traje blanco con rayas negras, amuleto verde, máscara de tigre y sonriéndole mientras que sostenía un ramo de flores y decía "Yo, Michelle Jones, te tomo a ti, Peter Romanoff, como mi esposo, para que seamos un equipo, en las buenas y en las malas, hasta que la muerte nos separe."

—En las buenas y en las malas...—Murmuró él, jadeando.

Apretó los puños tan fuertemente que sus uñas se clavaron causando que sus palmas sangraran.

Cerró los ojos mientras que su cuerpo colapsaba, terminado desmayado.

No sabía cuánto tiempo había quedado inconsciente, tampoco sabía si después de eso había recuperado todas sus memorias, pero cuando se despertó, lo que sí sabía, era que su nombre era Peter Romanoff.

Y frente a él, sentada en una esquina de la celda, viéndolo fijamente, se encontraba ella. MJ, su esposa.

Peter sintió sus ojos llenarse de lágrimas. Su cabeza todavía dolía, pero aún así se levantó y caminó lentamente hacia MJ.

Sus recuerdos más recientes eran de él y MJ momentos antes de que fueran preparados para entregarse a Hydra para ser convertidos en soldados a cambio de ya no ser prisioneros, pero nada en realidad había cambiado, siguieron siendo prisioneros, solo que ahora también eran las marionetas de Hydra.

—Tú dijiste qué tal vez recuperaríamos nuestras memorias... no sabes cuánto me alegro de ver que tenías razón, mi amor...

—¿Qué...?—Preguntó ella, mientras que él se agachaba, extendió una mano y le acarició la mejilla.

Mi MJ.

No sabía si ella había recuperado todas sus memorias como él, o si había recuperado las necesarias para entenderlo, pero aún así ella jadeó y sus ojos se llenaron de lágrimas.

—Soy yo, Tigresita.—Tomó sus manos y las besó.—¿Me recuerdas...? Por favor, MJ... di que recuerdas...

No pudo evitar sollozar cuando ella le sonrió y posó sus manos en sus mejillas.

—Recuperé algunos de mis recuerdos mientras que estaba en la enfermería...

Él sintió una oleada de alegría y emoción pasar por su cuerpo. Había pasado mucho tiempo desde que había sentido tal cosa.

—¿Y... qué recuerdas?

—Lo suficiente para saber que eres el amor de mi vida.

Ambos jadearon de alegría, con los ojos llenos de lágrimas, y se besaron, los dos sintiendo que habían recuperado a su alma gemela.





Children of the Spider and the Tiger [#5]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora