Capítulo 9

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-¿Quiénes sois?- dije cansada de la broma.

-Esta bien-dijo otro despues de hablar en susurros- no somos la policía, somos mafia rusa.- lo dijo con acento ruso. De fondo se rieron 3 voces, asi que por lo menos son 4.

-Me lo creería si no hubieran 3 personas por detrás riéndose.- dijo Marina cansada de lo que creía, una broma.

-¡Si es que sois tontos! No podéis estar callados ¿no?- dijo una nueva voz mientras las risas continuaban.

-Me estoy hartando...- dijo Fátima.

-Se acabó, voy a abrir la puerta- dijo Marina mientras se levantaba a abrirla.

La abrió y vimos a seis personas vestidas con una túnica negra y con cuchillos llenos de sangre. La reacción de las presentes fue: Estrella chilló y se escondió debajo de un cojín, Fátima miro a los espectros y se puso junto a Estrella protegiéndola fingiendo que no tenía miedo, yo me quedé paralizada un par de segundos pero en seguida corrí a esconderme detras de una mesa, y Marina... bueno, Marina me sorprendió, ella suele ser muy atrevida y nunca tiene miedo... pero esta vez... viendo esos espectros, con una pequeña luz poco potente en el portón, y ellos avanzando poco a poco dentro de casa... creo que ha sido la primera vez que la veo con miedo, su reacción fue una cara de miedo y cerrar la puerta de golpe, por desgracia habían avanzado tanto que uno puso un pie antes de que cerrara la puerta parandola y consiguiendo así entrar, visto eso, Marina corrió a refugiarse pegando gritos, los espectros se rieron ante su reacción, de pronto, se me ocurrió la única opción que veía: llamar a las de los otros apartamentos. Me escondí subiendo las escaleras y encerrandome en el baño. Las llamé. Enseguida pude escuchar la voz de la chica de la compañía diciendo que no tenía cobertura, así que el apagón había sido en toda la urbanización si no ha sido en todo el barrio...

¿Y ahora que hago yo? Estaba encerrada en el baño, habían unas personas en mi casa con intención de matarnos, y hasta Marina tenía miedo. Estaba pensando y pensando... de repente se me ocurrió una idea ¡y esta vez el apagón no podia impedir que la hiciera!

Así que me puse manos a la obra, cogí una cuerda de unos 5 metros de largo lo bastante resistente como para soportar mi peso, la coloqué atada en la ventana de nuestra habitación. Me senté en el alféizar y el miedo me invadió, pero sin pensarlo, me lancé con la cuerda y poco a poco fui descendiendo por la cuerda agradeciendo mentalmente las clases de educación física. Llegué al suelo y me arrepentí al instante ... ¡me había olvidado de las llaves! Así que volví a trepar, cogí las llaves y volví a salir de la casa. Miré por las ventanas, lo poco que se veía demostraba que los intrusos seguían allí. Corrí lo mas rápido que pude a las casas de mis amigas y llamé al timbre, no tardaron en abrirme y les conté lo mas rápido que pude lo que había ocurrido.

-¿Clara, estas bien? Creo que está delirando.- dijo Flora sin creerme.

-Es verdad, venid y os lo demuestro.

-Está bien, pero si es verdad hay que pensar algo que hacer.- dijo Nerea empezando a creerme.

-Tengo una idea.- dijo Ana.

Escuchamos la idea de Ana, a todas nos pareció buena. Preparamos lo necesario y nos dividimos en grupos para realizar todo: Mery, Nerea, Patri y Flora iban a entrar en casa por la cuerda y iban a ir escondiendose y acercandose a los intrusos, hasta que entre las 4 pongan una cuerda que los rodee con un nudo corredizo que evite que se escapen, reduciendo su espacio para moverse, mientras Ana, Lucía, Sara y yo los distraíamos entrando por la puerta y fingiendo tener miedo y querer escondernos para que vengan hacia nosotras sin darse cuenta del otro grupo; mientras Ara se ocupaba de un trabajo muy dificil, tenía que entrar a la cocina, coger un cuchillo y trapos para si nuestro plan falla que ella aparezca de la nada con el cuchillo y que les amenace, los trapos son para si funciona el plan poder amordazarlos y descubrir quienes son.

Nos pusimos manos a la obra...

El grupo A entró y se colocó, Ara dio la señal al grupo B que entró haciendo ruido. Los intrusos al vernos se rieron y vinieron hacia nosotras mientras Ara se preparaba, cuando todo estuvo listo, Ara pegó un chillido que era la señal, de manera que supieramos lo que teníamos que hacer y para que creyeran que éramos una de nosotras y no sospecharan. El grupo A se puso manos a la obra y les redució el espacio para moverse, cuando todo estuvo listo, Nerea silbó la melodía que cantaba Rue en los juegos del Hambre como señal con la que Ara saldría de la cocina con un cuchillo en la mano, solo se veía la sombra y así nadie sabía quien era. Todos los intrusos gritaron.

-¡¿Cómo ha cogido el cuchillo?!- dijo una voz vagamente familiar.

Intentaron salir corriendo, pero tropezaron con la cuerda que les llegaba pod la cintura, y pensando que era un mueble se fueron por un sitio cercano a Ara, pero también había cuerda, uno de ellos se tropezó con ella y calló encima de Ara tirandola al suelo con un grito de pánico, a la vez que el intruso se cae encima de ella aplastandola, pero enseguida se apoya en sus antebrazos para no seguir encima de ella pero no se fue, se quedaron mirándose a los ojos.

*Narra Ara*

Uno de los intrusos se cayó encima mío, yo chillé asustada pero no le puse el cuchillo, sino que lo aparté, no se por qué, algo me hizo no amenazarle. Enseguida se apoyó en sus antebrazos para no aplastarme pero no salió de encima mío, se quedó allí, mirándome a los ojos, yo miré a los suyos, unos increíbles ojazos marrones hipnotizantes, pronto su cercanía me hizo ponerme nerviosa, un poco incómoda, pero era mágico, noté las mariposas en el estómago que me hacen sentirme en una nube, no se quien es pero, me encanta que esta tan cerca mío mirando sus ojos marrones.

No se muy bien el tiempo que pasa, porque ese momento fue él y yo, nada más existe, no me entero de las voces de mis amigas ni las de los intrusos hasta que vuelve la luz y Estrella del susto pega un chillido con Flora al ver como la tele se ha vuelto a encender.

*Narra Clara*

-¡Ara! ¿Estás bien?- grita Mery. Nadie le responde y adivino que Ara esta en un momento Ara-intruso mágico de cuando alguien te gusta y te hace sentir única, en una nube junto a él, sin nada más que él y ella.

-Chico C, ¿estas bien?- dice la voz de antes en código.

De golpe viene la luz de nuevo, vemos a las cinco personas descubriendo el truco de la cuerda, al otro chico encima de Ara, los dos en su momento y todas mis amigas escondidas con la cuerda sin saber que hacer.

-¿Quiénes sois?- dijo Marina.

-Unos fantasmas.- dijo uno de ellos mientras otro de ellos se reía.

Patri, cansada de todo, se acercó sin aviso al gracioso y le quitó el pasamontañas, y era...

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Otro capi para vosotras! Siento haber tardado tanto, crisis de inspiración -.-

Espero que os guste, please votad y comentad!

Dedicado a:

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Buscando al príncipe azulDonde viven las historias. Descúbrelo ahora