SÁNDALO

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Útil.

Deseaba ser útil, pero ¿Qué implicaba exactamente ser útil?, ¿Qué era lo que Lan Zhou quería que hiciera?, mientras lo pensaba más difícil se le hacía estar de acuerdo con ir a LanLing Jin, su líder, Jin Guangshan era conocido por múltiples escándalos que involucraban actos viciosos y poco honorables, el anuncio de la cancelación de la boda del joven Jin Zixuan y la señorita Jiang Yanli había sido otra gran conmoción en este mundo, un compromiso que había estado ahí desde siempre, se rompió en un solo instante, nadie sabía las razones, y aunque hablar a espaldas de la gente estaba prohibido, los rumores se oían en los pasillo de Gusu Lan, entre los que se encontraba una posible relación secreta de alguna de las partes, pero nadie se atrevía a dar nombres, más aún después de saber lo que la señora del Muelle de Loto le había hecho a unas criadas por hablar de más sobre la reputación de su hija, con la guerra que se acaba de desatar Lan WangJi ya no sabía qué esperar en estos momentos.

Se encontraba ya en su quinta copia de su castigo, su mejilla ardía ligeramente, parece que Lan Zhou había utilizado más fuerza de lo usual — Es por tu bien, tu padre me confió tu educación, no quería que esa mujer te contaminara — la mujer se mantenía en la habitación de Lan Wang Ji, terminando de arreglar algunos detalles para su partida de Yilling, por lo que Lan Zhan no había podido moverse de ese lugar para ir a ver a su hermano.

Se mantuvo callado, era la mejor forma de mantener a la mujer de buen humor, extrañaba tanto a su madre, alguien que le sonreía tan brillantemente, tan solo deseaba sentir ese dulce amor que solo obtendría de ella, esa seguridad que le daba tenerla cerca.

— Hare un recorrido rápido, todos tenían tareas por hacer, regresare lo antes posible — busco entre las mangas de su túnica, y saco un par de pequeños frascos — Pon esto en tus manos, y por favor cubre con maquillaje tu mejilla, me incomoda tan solo mirarte.

— Mnm.

—Traeré unas cosas para ti, debes estar presentable para cuando lleguemos a Lanling Jin, prometieron enviar a sus hombres a buscar a los que se encuentran prisioneros una vez que estemos ahí, hay que ser rápidos, podrán traer a tu padre muy pronto.

¿A su padre? Lan WangJi podría llamarse un hijo poco fiel e irrespetuoso porque en estos momentos lo menos que quería era ver a su padre, es consciente que nada cambiaria, su padre no perdería el tiempo en él, tenía tan poco recuerdos con ese hombre, de los cuales podría contar con los dedos los que han dejado una huella positiva en su vida, al pensar en eso Lan WangJi llevo rápidamente su mano a su cuello, pero no había nada ahí, antes que la mujer notara su pánico decidió asentir y Lan Zhou finalmente se retiró.

—Siempre he pensado que esta algo loca, ahora realmente puedo comprobarlo— volteo siguiendo el sonido, Wei Wuxian estaba fuera de la ventana, Lan WangJi continúo buscando en su túnica, pero no pudo encontrar nada —Incluso me prohibió entrar.

—Wei Ying, no deberías estar aquí— hablo seriamente, estaba a punto de preguntarle por su collar cuando se dio cuenta de cómo la mirada de Wei Ying se centraba en él, aún no había cubierto la marca que debía tener en su mejilla.

—¿Te golpeo de nuevo? — pregunto entrando y acercándose rápidamente — Maldita bruja, deberías estar descansando, no soportando esto.

—Lo merecía—suspiro cansado.

—No mereces nada de esto, ¿Castidad? ¿realmente te está haciendo copiar ese libro?

—Es un castigo por mis errores.

—Me parece muy hipócrita teniendo en cuenta que están planeando entregarte a Jin Guangshan— Wei Wuxian hablo con odio —Sabes lo que pasara cuando llegues a Lanling Jin y aun así no has dicho nada.