Peliculas

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Si recuerdas bien cómo fue la última vez que estuviste enamorado, recordarás también un sin fin de diferentes situaciones donde no sabías bien que hacer o que no hacer, para impresionar a la persona que tenía tu corazón. A Garfield Logan y Rachel Roth estas situaciones les pasaron una y otra vez mientras fueron amigos, e incluso les seguía pasando de vez en cuando ya siendo una pareja, pero esta vez nos concentraremos en dos situaciones que hicieron no solo enrojecer las mejillas de los susodichos, si no que fortalecieron la atracción y el cariño que sentían el uno por el otro los adolescentes.

La primera situación fue un día de verano en el que la mayoría de los titanes estaban fuera de la ciudad haciendo diferentes visitas familiares o simples trabajos solitarios, en la torre simplemente se habían quedado Dick, Kory, Rose, Donna, y nuestros protagonistas Gar y Rachel. Esa tarde nadie parecía querer salir de su habitación y Garfield ya estaba aburrido de jugar videojuegos, así que decidió salir y dirigirse hacia la habitación de Rachel, quien se encontraba pintando un pequeño boceto que Rose había hecho para ella.

—Ey Rach —Saludó el mayor mientras asomaba su cabeza en la puerta abierta de la menor.

Rachel sonrió con ternura al ver el rostro de Gar y le hizo señas para que pasara.

—Ey, ¿aburrido?

El mayor suspiro y asintió mientras que se echaba en el pequeño sofá que había en una equina del cuarto.

—Estoy tan aburrido que comienzo a preguntarme si debía haber ido con Conner a escondidas.

—Solo si quieres que Dick te maté de una vez por todas. —Dijo ella simulando un cuchillo pasar a través de su cuello mientras sacaba ligeramente la lengua y cerraba los ojos.

Ambos rieron ante las muecas de la menor. Gar se quedó observando un par de minutos cómo Rachel terminaba el cuadro y comenzaba a recoger los instrumentos que había usado, fue entonces cuando una idea agradable le vino a la mente, pero pensar en proponérselo a ella le daba algo de nervios, como siempre que proponía que ellos dos hicieran algo solos, aún así, Gar se dijo a si mismo que debía dejar de lado sus sentimientos extraños por la menor, al menos hasta que estuviera seguro de lo que sentía.

Rachel por su lado sintió un leve cosquilleo al notar la mirada de Garfield sobre ella y se sacudió internamente la idea de que se veía realmente guapo con el cabello desordenado que llevaba aquella tarde, ya había decidido tomar con calma las extrañas sensaciones que el mayor cada vez provocaba más y más en ella, como los sonrojos involuntarios, los cosquilleos en el estómago o esas ganas que tenia de siempre pasar tiempo a su lado, sabía que todo eso significaba que comenzaba a sentir algo más que una amistad por aquel cambia formas, pero quería darse la oportunidad de explorar bien esos sentimientos antes de pensar en algo más.

—¿Y si vemos una película? —La voz de Gar casi tembló al momento de hacer la pregunta, razón por la que el mayor se maldijo internamente.

—¿Que? — Rachel levantó la mirada hasta Gar y notó cómo este estaba a punto de retractarse, por lo que añadió rápidamente. — Sería genial, yo hare las palomitas.

Y sin decir más la menor salió del cuarto ocultando la gran sonrisa que había aparecido en sus labios.
Garfield por su parte también sonrió ampliamente y rápidamente comenzó a acomodar las cosas necesarias para que ambos vieran la película en la habitación de la menor. No fue casualidad que cuando Kory pasó por ahí Gar se escondió, así como tampoco fue casualidad cuando Rose le preguntó a Rachel para que hacía las palomitas y esta le contesto que solo era su cena. 10 minutos después ambos chicos se encontraban de vuelta en la habitación de la menor con la puerta cerrada, un par de mantas, un sofa para dos y solo un tazón de palomitas separándolos.

One Shots Garchel Donde viven las historias. Descúbrelo ahora