Miedo al amor...

Problemas.

La tensión en el ambiente era muy fuerte, Johnny respiraba muy rápido, Javier se estaba por acabar con el tequila y Alan seguía tratando de entender.

— ¿Por qué te dijo padre?— pregunto Alan.

—porque es su padre— respondí con rencor pero opte por explicar las cosas, dado el momento— Hace ya 10 años, hubo un accidente en la carretera, donde supuestamente el señor aquí presenten había fallecido, jamás encontraron su cuerpo y a Jonathan, le afectó mucho. Él en ese entonces tenía 6 años; pero hoy vimos a un hombre que creíamos muerto, ese hombre al que antes conocíamos como Guillermo Bustamante—

Ni yo creía lo que decía pero bueno.

—Padre explíqueme que está pasando por que no entiendo, ellos te creían muerto ¿por qué hiciste eso?— Alan, también se comenzaba a alterar.

—lo explicare. Hace 20 años me case con la hija de un empresario muy famoso, estaba enamorado de ella y ella de mí, nos casamos y éramos felices pero conforme pasaban los meses las peleas se hacían más frecuentes y un día me fui de viaje de negocios donde conocí a una joven humilde, me volví a enamorar pero éramos sólo amigos. Pasaron 5 años y yo me quería divorciar por que descubrí que mi lado era con aquella joven, la cual hace 16 años estaba dando a luz a mi primer hijo, pero luego me entere que mi esposa también estaba embarazada y la madre de mi primer hijo para no, causarme problemas, dijo que ella podría con el niño sola; sin embargo, no los abandone y al niño jamás le falto nada, cuando ambos tenía 6, mi esposa se enteró de mi otro hijo y me corrió de la casa diciendo que se iría del país, yo acepte y me fui. Tenía que empezar de cero y lo mejor fue fingir mi muerte—

— ¿O sea mi madre fue la amante?— dijo Alan muy molesto y es de comprenderse.

Javier lo miraba apenado.

—No se te ocurrió también haber luchado por mí— Johnny estaba furioso y dolido— ¡Crecí sin un padre! ¡Crecí sólo! de no ser por Michelle no sé dónde estaría— gritaba.

—Yo creí que no te volvería a ver— dijo Javier, intentando excusarse.

— ¿y qué? eso no es excusa—

Johnny se levantó de un golpe.

—Calma, gritar no solucionara nada— lo volví a sentar, pero estaba demasiado alterado.

—Ahora lo veo, perdóname hijo— dijo intentando acercase, pero Jonathan lo alejo de un empujón.

—no me llames hijo, aunque somos de la misma sangre, tu para mi sigues muerto— dijo en tono frío.

Jamás lo había oído en ese tono de voz

—por años le guarde rencor a mi madre, por casarse con otro hombre, yo decía que te estaba traicionando. Eras mi todo y me abandonaste, ¿sabes cuantas veces mientras estaba en mis entrenamientos, imagine que estabas en las gradas? ¿Sabes en cuantos campeonatos espere verte sentado entre el público? ¿Sabes cuantas veces necesite un consejo y no hubo nadie que me lo diera?— seguía gritando. Tomó la copa de vino y la lanzo contra la pared.

Comenzaba a asustarme.

—Johnny cálmate— le dije, colocándome frente a él, por que comenzaba a caminar rumbo a Javier.

No iba terminar nada bueno.

—lo lamento Jonathan, ahora sé que lo que hice estuvo mal, pero yo creí que tú ya no estarías aquí, que jamás te volvería a ver— decía comenzando a llorar.

—eso no justifica nada. No te quiero ver, ni que pongas un pie en esta casa, ni que te acerques a ella— me señalo y por su tono de voz deduje estaba reprimiendo las ganas de llorar.