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CAPITULO IX

POV WOOHYUN

Me deje caer en mi asiento, ¿pero qué demonios me pasaba? ¿Por qué quería besarle? Cerré por un momento mis ojos para ver aquella imagen de Sunggyu indefenso, con sus pequeños ojos llorosos, esos labios rosados que me llamaban la atención y quería besarlos. Agite con rapidez mi cabeza, yo amo a mi novio, y al único que quiero besar era a él, tanto tiempo lejos me hacía alucinar cualquier cosa.

Tome con rapidez el teléfono para fingir que estaba llamando, cuando mire a Key entrarse y colocarse enfrente de mi con una ceja enarcada, le hice la seña que estaba hablando por teléfono, inventando cualquier cosa que se me ocurría.

— Basta WooHyun, sé que no estabas hablando con nadie — bufo, mientras me arrebataba el teléfono y lo dejaba en mi escritorio — ahora dime ¿Qué paso en el baño? — pregunto con sus ojos brillantes —

— Nada ¿Qué tenía que pasar? — comente carraspeando un poco y mirar unos papeles —

— Por dios, no me creo que solo mirabas los azulejos — rio —

Sabía que eso era una estúpida respuesta, mordí mi labio pensando en que decirle, en que mentira, pero era Key por dios, el sabia prácticamente como era.

— Yo... quería besar a Sunggyu— confesé, para mirar su sonrisa y gritar —

— Eso es fantástico, la verdad prefiero a hyung que ese chico esquelético —confesó, acomodándose en uno de mis asientos— lo siento pero es la verdad, aparte Sunggyu es muy tierno — confesó —

— Lo sé, sé que es tierno y es lo que no me gusta — confesé con mi ceño fruncido —

— ¿Por qué? Por qué comienzas a sentir algo por él — le mire entrecerrando los ojos —

— Yo amo a YoSeob— confesé serio —

— Pero no te trae tanto como Sunggyu —

Me quede callado, porque Sunggyu podría ser torpe pero lindo y eso era mi debilidad, YoSeob, no se comportaba de aquella manera tímida, inocente como Sunggyu, me recargue mejor en mi asiento para mirar a Key reír.

— No me puedes negar que ahora mismo estas comparando a Sunggyu con tu novio — rio, le mire con el ceño fruncido —

— A veces odio que me conozcas bien — bufe para mirar de nuevo aquellos papeles —

— Mira, YoSeob no está, ten algo con Sunggyu — le mire molesto —

— No voy a engañar a YoSeob, sobre todo no jugaría de aquella manera con Sunggyu — confesé serio por las estupideces que estaba pensado —

— ¿Quién dijo que jugaras con él? quien quite que terminas enamorándote de él —

Confeso mientras se incorporaba de la silla y salía, no sin antes susurrarle que eso jamás pasaría, porque a la única persona que amo era mi novio, le mire reír y negar, diciendo que eso lo veríamos, bufe para ignorar esos pensamientos, yo queriendo algo con Sunggyu.

Rodé los ojos para seguir mirando los papeles, sin darme cuenta de la hora, apague todo para estirarme un poco y tomar mi saco, nadie se encontraba ya en la empresa, imaginándome solo a los guardias, pero me había equivocado, el elevador se abrió, dejando ver aquel chico de ojos pequeños. Se encontraba ido, me adentre a él, para mirar como hacia una reverencia sin mirarme.

Las puertas del elevador cerrándose, silencio absoluto, para nada incomodo, carraspeo un poco para llamar su atención, levanto un poco su vista para mirarme y sonreí, al ver sus mejillas sonrojadas.

— Joven Nam — susurro con nerviosismo, haciendo una pequeña reverencia —

— Sunggyu, que hemos dicho, aparte eres mayor que yo — deje salir una pequeña risa — yo debería llamarte Hyung ¿puedo hacerlo? — pregunte, mirando aun esas mejillas sonrojadas y asentir tímido —

— ¿Tienes mucho tiempo que subiste? — le mire con una ceja enarcada, para asentir — lo siento, no me di cuenta — susurro avergonzado, provocando un puchero en mis labios —

Un puchero que fue desapareciendo al escucharle reír, una sonrisa que removió todo mi interior, una sonrisa que era completamente sincera a las que me había dado durante el día, una que ocasiono que me sintiera nervioso, carraspeo un poco cuando la puertas del ascensor se abrieron y salimos.

— Gracias por lo de hoy — le mire hacer una reverencia y encaminarse a un taxi que ya lo estaba esperando —

Le dedique una sonrisa cuando le mire detenerse y agitar su mano de nuevo con esa sonrisa que para mí se me hacía hermosa, agite con rapidez mi cabeza y me encamine hasta mi auto, ya listo para irme, le agradecí al portero y me apresure a irme de mi departamento, necesitaba olvidar de todo lo que había pasado.

En el baño y en el ascensor, no debería de pensar de esa forma, tenía un novio y tenía que respetarlo, pero Sunggyu, deje salir un suspiro tan solo en pensar en él, me provoca estar de esta manera, di un golpe en el volante.

— Demonios — maldecí molesto —

¿Por qué me estaba pasando esto? Me quite la corbata para arrojarla en el asiento de alado y dar media vuelta al coche, conocía un lugar donde podía ir y la verdad lo necesitaba. Baje del auto una vez que estuve afuera, para mirar al dueño y dedicarme una sonrisa.

— Namu, tanto tiempo sin verte — confeso sonriente — ven entra —

Le dedique una sonrisa de alado y me adentre para mirar como colocaba el letrero en cerrado, mirando a DongWoon traerme algo de tomar soju. Me extendió un vaso y servirme un poco.

— ¿problemas? — pregunto con una ceja enarcada cuando le había dado el primer trago —

— La verdad aún no se — confesé —

Con la única persona que podía contarle mis problemas era él, Key era mi mejor amigo, pero conociendo su personalidad no me ayudaría en nada, al contrario me diría que hacer, mire a DongWoon que me dedicaba una sonrisa y esperaba a que le contara lo que me pasaba, y lo hice, todo lo que había pasado desde la ida de Yoseob al extranjero, de las llamadas que no me contestaba, de los mensajes que nunca me recibía y de Sunggyu, de lo que me sucedía, de lo que me negaba a pensar en aquello que sabía que era absurdo.

— No es absurdo Nam — comento con diversión — simplemente te estas enamorando de Sunggyu — comento, fruncí el ceño — no vengas a decirme que amas a YoSeob, porque no es así —

— Lo amo — confesé serio, viendo su sonrisa divertida —

— Si lo amaras, no pensarías en engañarlo —

Iba a protestar, pero tenía razón, Sunggyu me hacía sentir diferentes cosas que con YoSeob no las sentía, esas inmensas ganas de protegerlo, mire a DongWoon susurrara que podía ser simplemente compasión por lo que sentía una vez que le platique toda su vida, de verlo tan indefenso y todo lo que ha sacrificado por su familia.

Sonreí de alado al pensar que ese cariño solo era como el cariño que sentía por Yeol, por mis padres, no como sentía por YoSeob. Y eso quería pensar, un cariño de amigos simplemente, no sentía nada por Sunggyu. Pero al mañana siguiente, al ver cómo era acorralado por Choi, había provocado que me molestara.

¿Un amigo también podía sentir celos? Porque eso es justamente lo que me estaba pasando, quería matara Choi por tenerle de aquella manera, no quería que se acercara, sabia la clase de chico que era, forme mis manos en forma de puños al ver como acariciaba su mejilla.