CAPITULO XXVIII

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POV SUNGGYU

Había cumplido ya un mes, el menor se había dio de nuevo al hotel, ya que le había surgido un problema con un huéspedes, le había escuchado gritarle a uno de los empleados que si no podía hacer las cosas bien, al parecer un chico había ocasionado un problema grave al llegar con olor alcohólico, se había agarrado a golpes con unos de los huéspedes.

Susurrándome que volvería pronto, fruncí el ceño cuando mi padre tampoco me había dejado ir, había salido de mi cita con JunHyung, mi padre también había traído a SungJong al ponerse un poco mal, el pequeño se había alterado en la escuela, no sabíamos lo que había pasado, pero a llanto le susurraba a mi padre que no quería ir a la escuela.

Ocasionando que JunHyung mandara a mis padres a Seúl, necesitaba ir con su padre para que lo atendieran, que su padre tenía los mejores equipos para que SungJong ya no necesitara su respirador, sonreí al ver la gran ciudad acercarse.

No quería decirle nada al menor, quería darle una sorpresa. Mis padres me había dejado en la puerta del hotel y bajar con cuidado, sintiéndome feliz de que por fin estaría con el menor, salude al portero que me dedico una sonrisa que no dudo en abrirme la puerta.

Mirando que no había cambiado nada, mirando un poco mi vientre se estaba notando, pero la camisa enorme ayudaba a ocultarlo, me acerque a la recepción para mirar a Park, como sonreía, era de las pocas chicas que había tratado.

— Sunggyu, me alegro verte de nuevo — susurro con una lida sonrisa —

— Hola, ¿sabes si se encuentra Hyunnie? —

Pregunte curioso, mirando como asentía y tomaba el teléfono para llamarlo.

— Y porque este lo quiere ver, sabes que nuestro hermoso jefe no recibí a nadie — me miro de pies a cabeza — sobre todo a un pobretón como él —

— Lee — susurra Park, negando con un ceño fruncido —

— Es la verdad Park, ve no más, deberías irte, arruinas el ambiente pobretón — dijo mientras me tomaba del brazo —

— Suéltame me estas lastimando — susurre molesto para aventarla y tomarme del brazo—

— Lee déjalo, no puedes tratarle así, sobre todo en su estado — susurro molesta —

Le mire verme confundida cuando sus ojos dieron con mi vientre al tratar de ocultarlo, le mire verme diferente.

— Qué asco, eres un fenómeno — grito, haciendo que toda la gente me mirara y algunos empleados — fenómeno, aléjate de aquí —escuche los murmullos de los empleados y algunas personas — no perteneces aquí, un chico embarazado, eres un fenómeno —

Hice mis manos en forma de puños, mordí mi labio para bajar mi rostro y sentir como mis lágrimas intentaba salir, el nudo en mi garganta haciéndose presente, escuchar una y otra vez que era un fenómeno me hacía sentirme mal. Las risas de los empleados comenzando escuchándose, cuando sentí como me giraban y ocultaban mi rostro en aquel pecho que me hacía sentir protegido, sintiendo como mis lágrimas comenzaban a salir, me aferre a su cuerpo y comenzar a sollozar.

— Quiero que tomes tus cosas y te largues de mi hotel — dijo molesto —

— Pero —

— ¡PERO NADA! No quiero verte de nuevo aquí, no voy a permitir que le faltes a respeto a mi prometido y sobre todo a mi bebe — me aferre a su cuerpo cuando comenzaron de nuevo los mormullos — si veo a otro insultando a Sunggyu o murmurando sobre mi prometido, olvídense de encontrar otro trabajo — me tomo de la mano y comenzamos a camisa, viendo cómo se detenía con alguien — encárgate de sus papeles y consigue alguien que valga la pena, no una basura como ella —

Sin más me tomo del cintura y nos encaminamos hasta el elevador, sintiendo como me atraiga a su cuerpo, mis manos aferrándose a su cintura, mientras el acariciaba mi espalda para poder tranquilizarme, susurrándome que todo estaba bien, que si quería ir a la habitación, lo cual asentí.

Me llevo a ella sin soltarme de la cintura, nos acomodamos en la cama, sus manos acariciando mi espalda para que me tranquilizara, quedándome dormido. Levantándome cuando las luces de la ciudad comenzaban a encender, encontrándome solo en la habitación.

Mire los grandes edificios para recordar lo que había pasado, "fenómeno" ¿lo era? Sentí como quería volver a llorar, nadie había hablado de esa manera, ¿a esto se refería mi padre? Mordí mi labio al ver como WooHyun me había defendido, mi madre me había dicho que había personas que no lo tomarían bien, pero que él siempre estaría para mí, y WooHyun haría cualquier cosa por no verme de esta manera.

Escuche como la puerta se abría y mirar al menor entrar con una bandeja de comida, la dejo en la cama, pero lo único que quería era estar con él, en olvidarme de aquella palabra que resonaba por mi cabeza, me atrajo a su cuerpo, sentándome en su regazo, la pequeña mesa aun lado de nosotros, abriendo mi boca para que me alimentara, negué al sentirme lleno, no quería seguir comiendo.

— Sabes que yo te voy a defender y no me importa lo que diga la gente — asentí, porque lo sabía, WooHyun siempre me protegería —

— Lamento por no avisarte, tal vez venir fue una mala idea — sentí su cuerpo tensarse y abrazarme con fuerza —

— Claro que no fue mala idea, me alegra mucho que vinieras, tus padres me contaron todo, si necesitan dinero yo puedo ayudarlos — susurro mientras me dejaba un beso en la frente — y no tienes que avisar en venir a verme, yo soy feliz de estar a tu lado — le sentí apretarme con fuerza — les he dado una habitación a tus padres y a Myung, espero que no te moleste — negué con una sonrisa y aferrarme a su cuerpo —

— Para nada, gracias por todo Hyunnie —

Bese sus labios y quedarme más tiempo a su lado, esperando que aquel pequeño accidente con esa chica se olvidara, pero paso a más los días siguientes, la gente me miraba y algunos empleados evitaban tocarme, sintiéndome una especie de bicho raro. Era como si al tocarme provocaría que se enfermera.

Ni se digan en las noticias, los periodistas atacaban a los Nam, con preguntas que me relacionaban, sonriendo con cada pregunta que WooHyun contestaba, todas sonriente al mencionarme, en decirle lo feliz que estaba a mi lado, algunos felicitándolo porque sería padre, como otro preguntándole que si no me había embarazado solo para tener su fortuna, solo porque era pobre, pero esos comentarios me hacían sonreír al ver como Nam me defendía, susurrando la clase de chico lindo que era y que jamás me interesaría su dinero.

Si él estaba soportando cada día los reporteros también lo haría yo, porque ahora más que nunca sabía que WooHyun daría todo por mí y también me encargaría de dar todo por él, porque de eso se trata el amor.

Dar todo por la persona que amas...

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