18. Final

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No sé si las decisiones que tomaré de ahora en adelante sean correctas, no sé si conservaré las amistades que tengo ahora, y si no las conservo; no sé si se irán de mi vida en buenos términos.

Luego de dejar a Brian y a Fiore en sus respectivas casas; consulté con mamá si podía irme unos días con la abuela. Tengo que pensar muchas cosas y sin Logan aquí es muy difícil concentrarme en lo que hago. Si, lo sé; se muy bien que no dependo de él pero se convirtió en una segunda voz de mi conciencia, es ese alguien que con solo mirarme ya sabe cómo me siento. No me malinterpreten; Brian lo es; a su manera pero lo es.
Mamá por obvias razones no me dejó; pero me dijo que si alguien llegaba preguntando o buscándome no daría información lo cual agradezco.
Incontables mensajes de Brian aparecen en mi celular; aviso a Logan que estaré ausente por unas horas y dejó mi celular en modo silencioso y en una cajón de mi mesa de noche.
Este es quizá uno de esos momentos en los que mi memoria me juega una mala pasada y vuelven los recuerdos de aquella noche que inició todo esto.

Aquella noche me encontraba justo como ahora; acostado en mi cama, con la mirada perdida en el techo, sin poder dormir y dándole a la nada la cantidad de noches exactas que había pasado así contando esa noche; dato que ya no puedo actualizar. Los recuerdos de un Logan borracho; unas mejillas sonrojadas y un par de mejores amigos durmiendo juntos me hicieron llorar una vez más.
Quién diría que un viaje a una playa a 20 minutos de dónde me encuentro y un par de iniciales talladas en una palmera crearían tanto revuelo. Tantas emociones juntas, tantos momentos que quizá se queden en eso, personas que están aquí y personas que no. Todo esto es capaz de arrastrar a una persona de su zona de confort y de su intento de vida monótona que no hace más que dejarte vacío
Brian y Fiore me dijeron una vez que aquella teoría de los colores es solo una guía, una; que te replantea la forma de percibir a los demás y la forma en la que te acoplas tu mismo con tus defectos y cualidades al final tu decides que eres y quién eres y el estigma de la sociedad convertido en colores totalmente definidos es simplemente eso; un estigma, una forma de encasillarte hacía algún lugar o hacia cierto tipo de personas.
Tanto así; que si lo miras desde distintos puntos o buscas varios caminos el resultado parece ser el mismo. Terminas siendo tu reunido en un parque con tres o cuatro amigos mirando a su alrededor y hablando de diferentes temas que no se relacionan entre sí.
Mentiría si dijera que todo esto pasará a segundo plano. Siguen muchos pasos que dar; como la universidad, el juicio de Allison, la recuperación de Brian, mi relación con Logan y más...

Querer darle un final total a esto es básicamente casi imposible; porque sería seguirle el hilo a aquellas novelas en las cuales la salida fácil es matar a un personaje para que simplemente la historia tenga una moraleja de superación y resiliencia.

Tres toques en mi puerta fueron causantes de que todo ese océano de pensamiento por el que flotaba sin rumbo se secara y me diera un golpe con el piso de mi habitación literalmente.
Me levanto y con algo-Demasiada-pereza me encamino hacia mi puerta, al abrirla se encuentra Brian; con la mirada hacia el piso y con la ropa desarreglada. Sube la mirada y el brillo de sus ojos no está, no es necesario preguntar para saber que el causante de eso está parado frente a el sosteniendo una puerta que quiere cerrar para luego salir por la ventana y correr hasta que las piernas le fallen.
De hecho lo intento; pero la determinación de tener esa conversación es tal que ejerce más fuerza que yo para que no vuelva a escapar.
-Fiore te salvó en el hospital-dige con esa voz ronca que escuché el día que despertó- ya es hora que hablemos.
Resignado le hago pasar y este se acomoda en el rincón de mi cama con las piernas cruzadas.
-De seguro Fiore te contó todo; no sé que más debería decirte-mi voz titubea.
-No vengo a preguntarte nada; vengo a decirte un par de cosas antes de que intentes aislarte de la sociedad como acostumbras solo por sentirte frustrado contigo mismo-Unos segundos de silencio fueron suficientes para hacerle entender que debía seguir hablando-Si piensas que te culpo por lo que pasó; si, en su momento lo hice, no es fácil y lo sabes; pero entiendo que no es tu intención y te agradezco todo lo que hiciste por mí, aunque tú digas que te sentías obligado yo no lo veo así.
-No estoy entendiendo nada- confieso
-Deja de hacerte el loco y presta atención, Te quiero, ninguna persona aparte de Fiore se había ganado ese lugar en mi vida como te lo ganaste tu y obviamente como toda novela cursi no puedo dejar ir a mi mejor amigo-su voz se suaviza-Eres único; eres inteligente, pero también eres muy impulsivo y distraído y eso te juega malas pasadas, te perdono y perdono a Allison por la simple razón de que esto ya me pasó y no se puede cambiar.
-¿Que harás entonces?- pregunto- te irás tu supongo
-Es ahí donde te equivocas. No me voy a alejar simplemente por un problema que casi me mata literalmente, no tenemos control de lo que pasa cuando pasa; simplemente debemos saber sortear las soluciones y no encuentro modo de alejarte así como lo haces tu.
-No merezco eso y lo sabes.
-Puede que no; puede que tal vez se te haya escapado el detalle de que una persona cuando está dolida y enojada es capaz de mucho-
-Tal vez- respondo y el se levanta de mi cama y camina a la puerta
-No eres lo que lo demás dicen y eso deberías tenerlo presente; ya estoy cansado de repetirlo, nos vemos luego; quedé con Fiore para una maratón de terror- se despide desde la puerta y la cierra.

Uno...

Dos...

Tres...

Cuatro...

Cinco...

Cinco segundos me tomó reaccionar y saber que la maratón de terror no era otra que una tapadera para no decir Harry Potter y que esa era su manera de invitarme. Saco mi celular y le texteo a Logan diciendo que Brian quería ver películas y el me manda una foto donde está viendolas diciendo que ya lo sabía y que se une a la causa.
Me despido de mi madre con la esperanza de ver su carro estacionado frente y a mi casa, lo cual es así y una sonrisa se apodera de mi. Me subo al auto y el arranca mientras me reprocha la tardanza.

Con esto dicho y con la escena es sus cabezas de un auto conduciendo a ritmo de One Direction; es más que probable que este sea el momento en que la pantalla se pone negra y empiezan los subtítulos de la película.

Fin.

Blue. LGBT+Donde viven las historias. Descúbrelo ahora