Viernes

19.

Emilio

Es sábado por la tarde cuando Joaquin decide sorprenderme al salir del trabajo, ya había estado comportándose extraño lo que resto de la semana después del cumpleaños de mi padre e incluso hoy en la mañana me dijo que no era necesario que pasara por él, aún cuando había pedido mi hora de almuerzo en el horario que él regularmente suele salir de su ensayo

El trabajo ha tomado más tiempo del que tenía previsto sin embargo no tengo ninguna queja más allá de las tediosas reuniones que a veces consumen a Tom y por ende a mi también, tomando notas, oyendo acerca de números y estrategias de venta

Justo ahora acabamos de salir de una video conferencia en la que se analizaron las ventas de la semana para la disquera mayor que ahora es dueña del pequeño lugar de Tom, nada que a nosotros nos resulte relevante, pero si de lo que podemos aprender

Estaba punto de ir a casa, cuando un mensaje iluminó la pantalla de mi celular

"Te espero afuera"

El hecho de que Joaquin se tomara el tiempo para pasar por mi no pudo haberme hecho sentir más emocionado

Camino contento, con la mochila que suelo traer, rebotando en la espalda, despidiéndome de los pocos que quedan en el lugar hasta el ascensor, un poco apresurado

No tardo ni 5 minutos en llegar a la entrada, Joaquin me espera recargado en el coche de Nikolas, Azul me sonríe desde el asiento del copiloto y los miro extrañado pero me acerco a Joaco que ha comenzado a caminar hacia donde estoy

-Bebé- me dice y se cuelga de mi cuello para acercarme a sus labios, el sabor a fresa del humectante que suele llevar inunda mi paladar, dejo que mi mano se amolde a su cintura y no puedo evitar sonreír con mis labios junto a los suyos

-¿Y esto?, no me dijiste que vendrías- no me responde, se separa de mi sonriendo y se dirige a sus amigos

-Gracias chicos, gracias Blue, te veo mañana en la tarde- se acerca a la ventanilla del coche para plantarle un beso en la mejilla y estira la mano para chocarla con Nikolas

Me acerco a ellos

-¿Hola y adiós?-

-Adiós Emilio, diviértanse- Azul me guiña un ojo

-Si chicos, disfrútenlo- Niko no puede darle un tono más sugerente a lo que acaba de decir, sin embargo se van antes de que pueda preguntarles y Joaquin les saca el dedo de en medio

-¿Eso fue...?-

-Eso fue- regresa a mi riéndose bajito- Una sorpresa Emiliano, ahora, ¿Donde está tu coche?- ruedo los ojos, no me gusta que me diga Emiliano pero él lo hace cada que puede para molestar, me saca la lengua y lo guío al parking

La curiosidad comienza a surgir en mi interior, nos adentramos al coche y espero a que él tenga el cinturón de seguridad puesto para seguir interrogándolo mientras enciendo el motor para salir de ahí

-¿Por que la sorpresa?, ¿es algún mes de aniversario o algo así?, ¿lo olvide?- hago cálculos mentales

-No amor- comienza a reírse- No es nada de eso, solo, no habíamos festejado tu nuevo trabajo-