My King ​Wow || WowKwan

18° Capítulo

La tarde caía sobre ellos y por lo dicho por Byeongkwan estaban solo a metros de llegar a su hogar, la ansiedad en él corría como un manantial, SehYoon lo podía sentir, desde hace kilómetros atrás ha estado ansioso y distraído.

— ¿Byeongkwan estás llorando?

— E-estoy muy feliz d-de volver a c-casa

— Cariño no llores porfavor— SehYoon lo abrazó mientras hacía frenar al lindo corcel.

— Detrás de esos árboles está mi casa

Bajaron del caballo y SehYoon tomó su mano con seguridad, caminaron el resto que les quedaba, Byeongkwan tenía el corazón acelerado al máximo, mordía su labio inferior y sus piernas temblaban.

Cuando observaron el final del camino vieron a una mujer de edad que recogía unos trozos de madera a la orilla de una linda casa.

Byeongkwan se soltó de su agarre y corrió a su dirección.

— ¡Mamá!...— La mujer se quedó allí agachada y quieta por unos segundos, volteó viendo a su hijo correr a ella y inmediatamente soltó los maderos.

— ¡Kwannie! ¡Hijo!— ByeongKwan se lanzó al suelo, dejándose abrazar por su madre

— Estás aquí... Estás aquí bebé— La mujer lloraba, besando a su hijo y apretandolo en su pecho

Tantas noches habían pasado, tantos días torturandose pensando en que jamás volvería a verle, a escuchar sus tontas conversaciones.

— Has vuelto hijo mío, mamá te extrañaba tanto— La mujer lo apartó para mirar su rostro, limpiando los ojos de su hijo y sonreír al verlo sano y allí, junto a ella, frente a sus ojos.

— ¿C-como es que has vuelto?

— Oh— ByeongKwan abrió sus ojos en sorpresa y sonrió en grande— Tengo que presentarte a alguien.

ByeongKwan se puso de pie rápidamente, su madre le siguió, el pequeño omega corrió hasta SehYoon, quién seguía allí donde le había soltado.

— Ven a conocer a mamá ¡Ven alfa! Vamos— Entre tironeo y risas Byeongkwan llevó a SehYoon frente a su madre

— Mamá él es SehYoon, es mi pareja

La madre del omega se quedó muda, mirando al alfa frente a ella. Un chico alto y fuerte, de pelo negro como la noche y ojos profundos. SehYoon estaba de nervios, esa mujer parecía estar esculcando hasta su alma, esa mirada era peligrosa.

Finalmente ella dejó de mirarlo para fijarse en los brillantes ojos de su hijo.

— ¿No es bonito mami?— Y si, ahí estaba eso que tanto extrañó, la mujer suspiró.

— Vamos adentro

[°°°]

— Así que... Eres el alfa de mi hijo

— Si, así es— SehYoon necesitaba urgente un fuerte trago para aguantar aquel momento

— ¿Lo has marcado?— SehYoon asintió, por primera vez en la vida su valentía se había ido por la ventana

— Mamá, mi alfa y yo nos encontramos ¿No es genial? Y si, él me marcó, además...— Byeongkwan guardó silencio, pensando en las palabras con las cuales decir la noticia

— ¿Además que cariño?

— Estoy... Vamos a ser padres.

La cara sin expresión de la madre de ByeongKwan era la prueba exacta de que... No había sido tan buena idea llegar así como así.