Él no quería estar en éste lugar. Se lo dijo a su padre y él ¿que hizo? Pues simplemente lo observó con esa mirada seria que tácitamente lo estaba obligando a asistir a ésta fiesta.
Lo peor es que ésta es una fiesta en donde solo hay gente mayor, socios de su padre, y sí, algunos también vinieron con sus hijos pero a leguas se notaba que eran unos arrogantes hijitos de papá.
—¿Por qué estás tan serio, hijo? —preguntó una mujer— Es una fiesta, diviértete.
—Yo no quería venir —bufó Earth— prefería estar en casa.
—Hazlo por tu padre, cariño —rogó— Ésto es importante para él.
—De acuerdo —se rindió.
Su madre solo le brindó una sonrisa y dándose media vuelta se fue donde su grupo de amigas.
Earth vió como su madre empezaba a hablar con esas señoras, quizá estaban cotilleando sobre las "amigas" que no asistieron.
Soltó un suspiro y dando un vistazo a todo el lugar observó que había una puerta de vidrio que, suponía, daba al jardín trasero.
Hizo su camino hacía el lugar y salió por la puerta.
Cuando lo hizo pudo sentir como el aire fresco le dió directo en el rostro lo cuál hizo que cerrara los ojos.
Empezó a caminar por el área verde, como era de noche solo las estrellas y unas pequeñas farolas emanaban luz.
Llegó hasta donde un muelle y caminó hasta llegar al borde, se sentó y contempló como la luna se reflejaba en el agua, todo en silencio excepto por los grillos que emitían su característico sonido, el lento vaivén del agua, la brisa fresca.
Unos pasos lentos se podían escuchar acercándose.
Earth no volteó, no quería perder de vista ni un segundo la tranquilidad que le brindaba el paisaje.
El hombre se sentó a un lado suyo. Se quedó en silencio viendo al frente.
—Es reconfortante ¿Cierto? —preguntó Earth.
—Pacifico, diría yo —respondió el otro— Una paz que en cierta forma te trae nostalgia —añadió.
—¿Por qué no estás en el fiesta? —cuestionó después de unos minutos de silencio.
—No lo sé. Solo quise venir acá —informó— ¿Que hay de ti?
—Me aburren éste tipo de "reuniones". Prefiero estar en un lugar tranquilo, sin mucho ruido —explicó con calma.
—Entonces ¿Por qué viniste a esta "reunión"? —quiso saber.
—Mi padre, prácticamente me dijo que si no venía me desheredaria.
Rió— Vaya padre el tuyo.
—Si —suspiró.
Después de eso nadie dijo nada, todo quedó en un silencio para nada incómodo.
—Tienes razón —maniestó Earth rompiendo el silencio— Te llena de nostalgia.
—Es raro ¿No crees?.
—¿Qué?
—Es raro que sienta que ya te conozca aunque ni siquiera sé cuál es tu nombre —respondió girando la cabeza, mirando a Earth— ¿No sientes lo mismo?
—Si —afirmó mirando también al hombre a su lado— Uh... Me llamo Earth.
—Yo soy Kao —dijo con una ligera sonrisa— Entonces Earth... ¿No crees que deberíamos volver adentro?
—Tal vez —repuso devolviéndole la sonrisa.
—Me gustan tus ojos —dijo de la nada.
—¿Mis ojos? ¿Por qué?
—Porque me brinda más tranquilidad que éste lugar —manifestó sin dejar de mirarle a los ojos.
—¿Estás tratando de coquetear conmigo? —cuestionó mirándole fijamente.
—¿Está funcionando? —preguntó acercando el rostro lentamente hacía Earth.
—Tal vez —dijo con una sonrisa sin hacer ni un movimiento.
—¿Debería seguir? —habló en voz baja estando a centímetros de los labios del otro.
—Averigualo —cerrando los ojos.
Kao empezó un beso lento, movía suavemente los labios disfrutando el momento. Puso una mano en la mejilla de Earth y comenzó a acariciarlo con ternura.
Earth solo se dejó llevar. No sabía si era por el lugar en el que estaban, o porque estaba, de cierta manera, vulnerable o simplemente el ambiente parecía ser el ideal para que algo como esto pasara. Pero sentía que ésto estaba bien, que era lo correcto.
Sentía paz.
Lamentablemente la falta de aire hizo que terminaran con el beso. Se separaron con lentitud pero la conexión que sentían aún seguía presente.
—Así que Earth, ¿Qué quieres hacer ahora?
—Supongo que volver —habló en voz baja.
—Entonces vamos —poniendose de pie ofreció su mano a Earth.
El chico agarró la mano de Kao y se puso de pie.
Ambos empezaron a caminar a paso lento con las manos entrelazadas en dirección a la casa.
Llegando, ambos intercambiaron números de celular y Kao se despidió de Earth, con la promesa de llamarle.
Ya en el auto, con rumbo a su casa, Earth no dejaba de sonreír mirando por la ventana.
—¿Te divertiste, hijo? —preguntó su padre viéndole por el espejo del retrovisor.
—Si, fue espectacular. Gracias por obligarme a venir —respondió sonriendo.
—Cuando quieras —ofreció divertido el hombre.
πππππππ
¡Hey! Un poco corto pero me apetecía escribir algo así (◔‿◔).
¿Les gustó? ( ꈍᴗꈍ) espero que sí.
¡Ay bye!✌🏻😊