—¡No puedo creer que hayas chocado mi auto! —gritó Prem molesto— ¿Que haré ahora?
—Uh... Llamar un taxi —dijo Boun con simpleza— Además no es para tanto.
—¡¿Qué no es para tanto?! —habló sintiendo la ira apoderarse de él— ¿Tienes idea de lo que significa? —señalando exageradamente el coche.
—Velo de ésta forma, es una nueva oportunidad para comprar otro auto, quizá un Audi —comentó tratando de sonar razonable.
—Eres un estúpido, por tu culpa llegaré tarde y me despedirán de mí trabajo —manifestó— Quiero que te vayas.
—No te dejaré solo, en la calle, podrían pasarte algo malo. Deja que yo te lleve —propuso Boun.
—Vete de aquí —dijo sacando su celular— Llamaré a una grúa.
—Esta bien, pero llamalos desde mí coche mientras nos dirigimos a tu trabajo— expresó el rubio.
—De acuerdo —se rindió Prem— Pero si tratas de sobrepasarte te golpeare.
—Como quieras, pero solo te digo que no eres mí tipo —encogiendose de hombros se dio media vuelta y comenzó a caminar hacia su automóvil.
—Idiota —bufó Prem yendo detrás del rubio.
(...)
—¿Cómo chocaste mí coche? —quiso saber Prem.
—Digamos que me distraje unos segundos —respondió Boun— Pero mira la parte delantera del mío, se arruinaron las luces y el parachoque está maltratado.
—Al menos sigue funcionando. Ya que un estúpido no colisionó por la parte trasera haciendo que impactara contra un poste de luz —reclamó— Ahora tendré que pagar a tránsito por dañar propiedad pública.
—Si quieres-
—No. No digas nada —interrumpió.
—Solo digo que si dices la verdad entonces quizá entiendan —explicó sin dejar de mirar hacia adelante.
—Lo dudo mucho, pero no te preocupes, yo me haré cargo —dijo sonando tranquilo.
—Te lo recompensare.
—No, gracias —se negó Prem.
—Escucha, yo me encargaría pero sabes muy bien que no puedo tener antecedentes —comentó el rubio.
Soltando un suspiro.
—Si, lo sé.
Después de eso hubo un silencio un poco incómodo.
Parando el coche en un lado de la calle, Boun miró a Prem.
—¿Qué sucede? —preguntó Prem— ¿Por qué te detienes?
—Y-yo... Perdón —dijo de repente— perdoname.
—No entiendo ¿De que hablas?
—De lo que pasó la anterior noche, no quería que terminara de esa forma —explicó Boun bajando la cabeza.
—No tienes que culparte —poniendo una mano sobre el hombro del rubio— No fue culpa de nadie.
—Si tan solo yo hubiera tratado de luchar por lo nuestro —articuló con la voz casi rota.
—Hey no —negó tocándole la mano— Fue una decisión que decidimos ambos, fue lo mejor.
—¿Lo mejor para quién? —dijo con una triste sonrisa— Porque para mí no. Fueron los peores días de mí vida, te extraño.
—Boun, no lo hagas más difícil. No quiero hablar de eso.
—Lo entiendo —manifestó comenzando a conducir.
De nuevo todo se tornó silencioso. Unos minutos después llegaron al destino de Prem, por lo que Boun detuvo el auto.
—Gracias por traerme —manifestó Prem mientras bajaba del coche y cerraba la puerta.
—Prem, espera —detuvo el rubio bajando la ventanilla— ¿Podemos tomar un café? Para hablar.
—Solo para hablar, nada más —aclaró Prem.
—Entonces paso por ti.
(...)
—Entonces... ¿De qué querías hablar? —cuestionó Prem mordiéndose el labio inferior.
—En realidad de nada en concreto —repuso Boun— Solo hablar de cualquier cosa. De ti.
—De acuerdo. Bien, ¿Quieres que te hable de mis sentimientos? ¿Quieres que me ponga a llorar en tus brazos? ¿Quieres que te diga que te aún te amo? —cuestionó a la defensiva.
—Prem-
—No, deja que continúe —interrumpió casi al borde del llanto— Pues sí, aún te amo, te amo tanto que simplemente no puedo evitarlo. Y odio eso, detesto no tener el control de mis sentimientos.
Boun se puso de pie y se acercó a Prem para hacer que se ponga de pie y proceder a abrazarlo.
—¿Por qué, Boun? ¿Por qué no viniste detrás de mí? —preguntó Prem con un hilo de voz, correspondiendo el abrazo.
—Crei que querías estar solo —habló Boun— Creí que no querías que vaya tras tuyo.
—Te odio —balbuceó Prem.
—Hace unos minutos dijiste que me amabas —expresó sonriendo.
—Si, pero ahora te odio —manifestó— Ojalá que te pase algo muy vergonzoso.
—Tú no quieres eso —habló suavemente acercando su rostro al de Prem— Pero si sé que quieres en éste momento.
—¿Ah sí? —retó cerrando los ojos.
—Ajá —tambien cerrando sus ojos y terminando con distancia juntando sus labios con los de Prem.
Fue un beso tierno, sin más intención que el de decir sin palabras cuánto se extrañaban.
A veces creemos que estamos haciendo lo correcto, ignoramos lo que nos dice nuestro corazón y solo tomamos decisiones en base a términos lógicos y racionales, pero eso no está bien, también debemos arriesgarnos, no tener miedo, porque no importa si nos equivocamos, de los errores se aprende ¿Cierto? De todas formas todos somos personas perfectibles, no perfectas.
—Aún me debes la reparación de mí coche —manifestó un Prem feliz, después de separarse del beso, a lo que Boun solo soltó una risa volviendo a besarlo.
ππππππππ
¡Hey! ｡◕‿◕｡
Ya era hora de algo de BounPrem :)
Ahora quería pregúntales algo:
¿De cuál de las tres parejas quieren que sea el próximo OS? :)
Dejen comentarios para poder empezar a escribir.
¡Ay bye! (≧▽≦)
