Darkness || Hinny

XVII. Castigo

Harry Potter

Mansión Nott, Berlín

Después de lo sucedido en la mansión Malfoy me recorrían sudores fríos cada vez que veía a mi hermana.
El solo verla me traía una imagen mental de ella y Malfoy haciéndolo que me daba arcadas.
No podía siquiera tocar a Ginny sin pensar en que Draco Malfoy tocaba de la misma forma a mí hermanita.
_oh, vamos cariño. No lo hemos hecho en casi tres semanas... Por favor
_cariño no puedo. No sin pensar en eso.
_que hombre...
Ginny azotó hastiada la puerta del baño.
Dios...
Decido quitarme la ropa para ir a dormir.
No puedo estar tranquilo, ni siquiera con el hecho de que Hermione esté en Londres con Sirius.
¡¿Qué mierdas le ha hecho ese rubio teñido a mí hermana?!
El que ella haya decidido irse tan violentamente no termina de agradarme.
Decido no pensar en eso.
Me meto a la cama.
Pero no pasan ni diez minutos cuando Ginny aparece en bragas y se me sube encima.
_Gin, ¿Qué haces?
_¿Tú que crees?
_ahora no, preciosa
Intento quejarme pero ella no me deja porque me planta un beso de aquellos que me dejan queriendo más.
_Gin...
_te deseo
_Ginny, ahora no...
_Harry ahora sí. Te deseo tanto, quiero que me toques, que disfrutes de mí. Quiero todo lo que tú desees y lo quiero ahora.
No me da tiempo de replicar porque sus caderas se mueven sobre mi regazo.
Pues si eso quiere, no pienso negarselo más.
La tomo del cabello y le exijo un buen beso.
Me apodero de su sensible cuello.
Mi otra mano sube por su cintura y me apodero de su suave pecho.
Estimulo su pezón..
_me vuelves loco
_tú a mí, aunque te comportes como un niño.
_Gin, no quiero lastimarte
_no Harry... Tu castigo por no darme lo que quiero será que yo mando
_¿Mi castigo?
_si. Creo que voy a tener que empezar a castigarte como tú a mí.
_ni lo sueñes, pequeña.
Durante buen rato Ginny se restriega sobre mí, besa mi pecho con lujuria, me tienta.
Acaricio sus piernas.
Pero no puedo resistirme a ella
_de acuerdo... Pero sólo por hoy.
Ginny con total delicadeza toma mis manos y las retira de sus muslos
_prohibido tocar.
Quiero protestar pero ella levanta una ceja retándome.
Sin remedio me quedo quieto.
Ella se agarra los pechos y me los ofrece.
No puedo resistirme a tomarlos.
Quiero más.
La escucho jadear.
Pero luego de repente me los quita.
Frunzo el ceño.
_dame tu mano_ me pide con su aterciopelada voz.
Se la doy expectante.
Ella la pasea por la cara interna de sus muslos. Me deja tocarla.
La estimulo.
La escucho respirar con dificultad.
Quiero darle más pero ella quita mi mano y lleva mis dedos húmedos a mí boca.
_resbaladiza y húmeda como a ti te gusta.
Ya no puedo más.
Intento tomarla por la cintura pero ella me da un manotazo
_prohibido tocar, señor Potter
_señora Potter... Modere sus órdenes.
Ella sonríe pero a mí no me hace gracia.
Ella sube su mano izquierda hasta mi cuello, la mete entre la cama y yo.
Deja mi cuello expuesto para ella.
_señor Potter, no olvide que ahora mando yo.
Saca su lengua y me chupa el cuello.
Una corriente me recorre entero.
Luego debora mis labios y no puedo evitar gemir en su boca.
Acerca sus pechos otra vez a mí boca.
Encantado los empiezo a chupar.
_subete a mí, Gin... Por favor hazlo.
Ella obedece a mí petición.
Sus bragas desaparecen con rapidez.
Está caliente y muy húmeda.
_¡Dios, nena con lo que haces me vuelves loco!
Ella empieza a cabalgar me con ganas
Sus pechos saltan ante mí. Es una visión divina.
Pero no pienso quedarme mucho tiempo así.
Sin previo aviso me pongo sobre ella y empiezo a bombear con fuerza en su interior.
Los gemidos se convierten en gritos hasta que ya no podemos más.
Nos dejamos ir totalmente saciados y cansados.
_está bien, nunca más volveré a negarme a tí.
_mas te vale Potter. Porque no pienso quedarme sentada a esperar.

...

Las cosas en la oficina pasan sin ninguna novedad.
Todo está yendo relativamente bien.
Tenemos a Astoria con nosotros en la parte subterránea de la casa.
Yo no termino de ver con buenos ojos que Sirius la haya tomado de asistente.
Sé que la utiliza de carnada para quien sea que la busca. Pero por alguna razón pienso que debe permanecer vigilada un tiempo más.
Hasta que nos aseguremos que ella no representa ningún peligro para nosotros.
_¿Qué es lo que sucede, hermano?
_hay cosas que no terminan de cuadrarme de Astoria. Y creo que a Mione tampoco.
_tal vez sea esa una de las razones de Mione para dejar Moscú.
_puede ser, Theo. De todos modos debemos vigilarla bien.
_Sirius vendrá a ver cómo la tratamos. Lo sabes ¿No?
Asiento en respuesta.
_por cierto, ¿Y esa mordida?
_¿Cuál mordida?
Miró a Theo sin entender.
_esta
Me voltea la cara y señala justo el punto entre el maxilar y el cuello.
_la pelirroja te tiene a cien.
_oh solo cállate.
Mi hermano se burla de mi.
Que ni se entere de que eso fue parte de mi castigo.
Tengo un par de arañones en la espalda y varios chupetones más en el pecho.
Pero mi hermano no tiene por qué saberlo.
Soy bastante reservado con mis cosas.
Y que Theo lo sepa sería para que me tome del pelo cada que puede.
La próxima vez tendré más cuidado de que Ginny no me deje marcas en lugares notorios ...