Prompt 2: Música
Un poco de amor y azúcar para ustedes
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Música
Wei Wuxian había estado actuando extraño los últimos días. Bueno, extraño fuera del ya de por sí extravagante comportamiento del hombre, para Lan Wangji, empezando porque había pasado largos días encerrado en la Biblioteca, y luego había visitado a su hermano Lan Xichen con una frecuencia sospechosa. Por supuesto, como el esposo comprensivo que es Lan Wangji esperó a que Wei Wuxian se decidiera a decir que estaba sucediendo, preguntando una sola vez si necesitaba ayuda con algo, sólo para ser desestimado prontamente por un ansioso Wei Wuxian que aseguró una y otra vez que todo estaba bien, todo sonriendo preocupado y dejando escapar risitas nerviosas.
En una de sus visitas a Lan Xichen, al notar la preocupación en su rostro su hermano le aseguró que no pasaba nada malo con Wei Wuxian, que le diera tiempo y este le explicaría todo. Incluso Lan Sizhui, al percibir su incomodidad un día al ver a Wei Wuxian corriendo por todo el Receso de las Nubes haciendo sólo él sabía con Lan Jingyi a pocos pasos tras él, le aseguró que no pasaba nada malo con su esposo.
La respuesta a todas sus dudas llegó el día en que ya no podía más con la preocupación y estaba dispuesto a cuestionar a Wei Wuxian hasta que este le dijera lo que estaba pasando. Su decisión de intervenir se vio desencadenada cuando despertó sin Wei Wuxian a su lado, un evento que no había sucedido desde poco después de casarse cuando su esposo despertaba en la madrugada por una pesadilla y salía a tomar un poco de aire para no molestarlo.
En un principio pensó que se trataba lo mismo, cosa que no lo dejó para nada tranquilo pues Wei Wuxian le había prometido despertarlo si lo necesitaba luego de una pesadilla, pero era un pensamiento con el que logró controlar el impulso de salir a buscar a su esposo. La tranquilidad no le duró demasiado cuando sonaron las campanadas que indicaban las primeras clases y su esposo aún no había vuelto al Jingshi, dónde Lan Wangji había desayunado sólo por primera vez en tres años.
Como ese día no tiene clases sale en busca de su esposo, deteniendo a algunos discípulos en el camino, pero nadie sabe decirle específicamente donde se encuentra su esposo. Cerca del medio día y con la desesperación cada vez más evidente en su rostro está más que dispuesto a poner de cabeza toda la montaña cuando ve a Lan Sizhui acercarse a él a paso rápido, lo suficientemente rápido como para llegar pronto a él, pero no demasiado como para considerarse que estaba corriendo.
—Hanguang-Jun, acompáñeme —dice el joven tomando su brazo con cuidado.
—Sizhui yo...
—Sé dónde está el Señor Wei —dice el joven con una pequeña sonrisa—, lo está esperando.
Esas palabras son suficientes para hacer que Lan Wangji siga al joven por el camino que sabe da hacia la parte trasera de la montaña, dónde los conejos viven tranquilamente y dónde no se le ocurrió buscar primero dado que su esposo adora ir a jugar, o más bien molestar, a los pobres animales. Al llegar se sorprende de ver a Wei Wuxian caminar nerviosamente de un lado al otro con Cheqing balanceándose entre sus dedos, una manta extendida bajo el árbol y Lan Jingyi entreteniendo a los conejos para que no se acercaran al área dónde su esposo lo espera.
—Wei Ying —llama sintiendo el alivio recorrerle al notar que Wei Wuxian no está herido o en inminente peligro, simplemente parece ansioso, aunque sus ojos brillan como nunca al momento de detenerse para dedicarle una enorme sonrisa.
—¡Lan Zhan! Perdón por dejarte sólo esta mañana, pero tenía que... tenía que perfeccionar algunas cosas —el hombre se acerca rápidamente y Lan Sizhui se aleja para darles tanta privacidad como le es posible—. Lamento no haber estado ahí para despertar a tu lado, esposo mío —dice con suavidad tomando una de las manos de Lan Wangji que rápidamente este aprieta contra sus dedos.
—¿Wei Ying? —dice con suavidad mirándolo atentamente preguntando en silencio lo que estaba pasando.
—Ah, debes estar preguntándote porque he estado actuando tan raro estos días —Wei Wuxian ríe suavemente rascando su nuca con la mano que aún sostiene su flauta—, fue muy difícil no arruinar la sorpresa, pero finalmente terminé. Obviamente recibí mucha ayuda, Zewu-Jun fue muy amable al explicarme algunas cosas que no entendía de la biblioteca y Lan Sizhui ayudándome para que fuera perfecto para tu guquin y...
—Wei Ying —interrumpe el hombre—, sabes... puedes decirme lo que sea Wei Ying.
El hombre sonríe nerviosamente apartándose un poco y sin soltarlo lo guía a la manta haciéndolo sentarse. Rápidamente se sienta a su lado tomando una caja, que Lan Wangji no había notado hasta ese momento, poniéndola en sus manos.
—Yo... yo hice esto para ti —dice tímidamente.
Curioso Lan Wangji abre la caja encontrando dentro un rollo de pergamino perfectamente enrollado y envuelto en una de las cintas rojas para el cabello de su esposo. Lo mira por un segundo antes de bajar la caja para sacar el rollo y con gran reverencia suelta la cinta para poder desenrollarlo y leer su contenido. Abre sus ojos sorprendido al encontrar la letra de una canción y las notas para un dizi, y en ese momento se da cuenta que detrás hay otro rollo con la misma letra, pero las notas corresponden a las de un guqin.
Mira a su esposo sin saber que decir encontrándose con Wei Wuxian alzando la flauta a sus labios para empezar a tocar. Las notas en un principio se parecen un poco a WangXian, la canción que Lan Wangji compuso para su adorado esposo, pero pronto las similitudes acaban dejando una melodía hermosa y suave, llena de alegría, desbordante de amor, anhelo y adoración; una canción que cuenta como Lan Wangji hace sentir a Wei Wuxian cada día de su vida, como su amor lo hace ser mejor persona, como siente que no merece tanto pero que aún agradece la oportunidad de estar con el hombre más maravilloso que ha pisado la tierra.
Pronto, demasiado para el gusto de Lan Wangji, la hermosa pieza musical termina y Wei Ying baja lentamente la flauta mirando sus manos sostenerla, sus mejillas enrojecidas e incapaz de mirar a los ojos a su esposo. Con la misma reverencia conque lo sacó, Lan Wangji vuelve a poner el rollo en la caja cerrándola antes de tomar entre sus manos el rostro de su esposo e inclinarse para besarlo con suavidad.
Wei Wuxian deja escapar un jadeo un poco vergonzoso, pero pronto se inclina hacia Lan Wangji respondiendo al beso con todo el amor que siente por el hombre frente a él. Cuando el beso termina ninguno de los dos se aleja demasiado, apoyando sus frentes juntas y mirándose con adoración.
—Es hermosa —dice Lan Wangji finalmente—, gracias.
Wei Wuxian sonríe y ríe bajo, encantado al notar el sonrojo en las orejas de su esposo que pronto se propaga hacia su cuello. Sus risitas se convierten en una suave carcajada antes de lanzarse a los brazos de Lan Wangji llenando su rostro de besos. El hombre suspira sosteniéndolo contra su cuerpo agradeciendo silenciosamente ser capaz de disfrutar del amor de Wei Wuxian, pero toma nota de pedirle que por favor no vuelva a asustarlo de esa forma, por muy buenas intenciones que tuviera preparándole una sorpresa.
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WangXian Week 2020
Fiksi PenggemarAquí encontrarán mi aporte a la WangXian Week 2020, desde fluff hasta angst de esta hermosa pareja. Espero lo disfruten